Jin Xing, la actriz y bailarina que rompe barreras por la tolerancia LGTBI en China

Si una persona en China est¨¢ curtida en los vericuetos de sortear la adversidad para ser feliz y sentirse profesionalmente realizada y, como consecuencia, recibir aceptaci¨®n y reconocimiento social, esa es Jin Xing. Nombrada este a?o embajadora de la fragancia J¡¯adore de Dior en su pa¨ªs, con su popular programa de entrevistas de vuelta a la peque?a pantalla, y con una fama que sobrepasa fronteras, sobran los argumentos para pensar que Jin ser¨¢ una de las figuras m¨¢s prominentes del gigante asi¨¢tico en 2022.

El curr¨ªculum de Jin Xing llama la atenci¨®n por ser de lo m¨¢s variopinto: es bailarina, core¨®grafa, presentadora, jueza de realities, empresaria y actriz; profesiones todas en las que ha tenido un ¨¦xito indiscutible. En el plano personal, casada y madre de tres hijos adoptivos, es una mujer que ha luchado a contracorriente por alcanzar su felicidad m¨¢s plena. En ese proceso, Jin ha hecho una convocatoria a la tolerancia de millones de personas, muchas de las cuales, si no fuera porque terminaron cautivadas por su determinaci¨®n, carisma y talento, probablemente jam¨¢s hubieran aceptado a una transexual.

¡°Si la gente presta atenci¨®n a mi trabajo por lo que soy, est¨¢ bien. Si se cuestiona cu¨¢l es su condici¨®n sexual por m¨ª, tambi¨¦n¡±, ha comentado en varias ocasiones. Jin abri¨® el espinoso sendero de la transexualidad en China a mediados de la d¨¦cada de 1990 y, a d¨ªa de hoy, contin¨²a siendo la persona trans m¨¢s relevante. Elogiada con frecuencia por ser una pionera, sin embargo, ha rechazado en m¨²ltiples ocasiones el papel de abanderada LGTBI, lo que ha generado cr¨ªticas entre quienes opinan que deber¨ªa valerse de su posici¨®n para presionar m¨¢s a Pek¨ªn por los derechos del colectivo.

Pero la visibilidad que ha dado a la transexualidad en un pa¨ªs en el que el tema sigue siendo un tab¨² es innegable. Prueba de ello es que la marca de lujo francesa Dior la eligi¨® en mayo para figurar en su campa?a #DiorStandWithWomen, distinci¨®n que comparti¨® con supermodelos como Charlize Theron y Cara Delevigne, o la actriz Natalie Portman. En su v¨ªdeo de promoci¨®n, Jin se?ala que la caracter¨ªstica m¨¢s importante de una mujer es la independencia.

Hija de un funcionario del ej¨¦rcito y una traductora, Jin naci¨® en 1967 en la ciudad nororiental china de Shenyang. Con nueve primaveras ingres¨® en la mejor academia de danza del pa¨ªs, la del Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n. El trayecto y ascenso de aquel ni?o prodigio se bifurc¨®: como miembro estrella de la compa?¨ªa de bailarines, estudi¨® ballet ruso, ¨®pera china, danza y acrobacias; como soldado, destac¨® disparando ametralladoras y colocando bombas debajo de puentes.

A los 17 a?os gan¨® el campeonato nacional de danza, un galard¨®n que le consolid¨® como el mejor bailar¨ªn cl¨¢sico del pa¨ªs. Con 19, consigui¨® una beca para pulir sus habilidades en Nueva York, donde estudi¨® danza contempor¨¢nea durante cuatro a?os. El ¨¦xito que cosech¨® en la Gran Manzana fue tal motivo de orgullo, que el Ej¨¦rcito chino le otorg¨® la distinci¨®n de coronel, aunque en la pr¨¢ctica no estuviese enrolado en sus filas.

Los a?os que trabaj¨® en el extranjero, primero en Nueva York y despu¨¦s en Roma y Bruselas, tambi¨¦n le valieron para investigar, prepararse y aguardar por su anhelada transici¨®n. ¡°Desde los seis a?os supe que era mujer¡±, afirma. En entrevistas internacionales ha reiterado que, aunque probablemente le hubiese sido m¨¢s f¨¢cil operarse en EE UU o Europa, sinti¨® la llamada de sus ra¨ªces: ¡°Quer¨ªa estar cerca de mi madre, porque la primera vida que me dio fue en China. Por eso, mi renacer ten¨ªa que ser all¨ª¡±.

Venus, como se traduce literalmente su nombre en chino al espa?ol, se convirti¨® en 1995 en la primera persona en someterse a una cirug¨ªa de cambio de sexo y hacerlo p¨²blico en la naci¨®n m¨¢s poblada del planeta y, por ende, en recibir la aprobaci¨®n del Gobierno. ¡°No soy la primera que cambia de sexo en China, pero s¨ª la ¨²nica que habla de ello abiertamente¡±, expresa orgullosa.

Ese renacer vino acompa?ado de proyectos a¨²n m¨¢s ambiciosos. En 1999, en Shangh¨¢i, cre¨® la primera compa?¨ªa privada de danza de China (The Jin Xing Dance Theatre) y en 2013 dio el salto a la televisi¨®n como miembro del jurado del programa So You Think You Can Dance. Su estilo directo, similar al de Risto Mejide en Operaci¨®n Triunfo, as¨ª como su espontaneidad a la hora de tratar asuntos controvertidos, la catapultaron a la fama. Lleg¨® a ser expulsada de un programa en una cadena regional por ser trans, pero en 2015 retornar¨ªa a los sets televisivos para presentar su propio espacio de entrevistas en otra emisora de alcance nacional.

Este mes se ha anunciado que, por el probado ¨¦xito que tuvo hasta 2017 ¡ªcon una audiencia que super¨® los 100 millones de espectadores semanalmente¡ª, la peque?a pantalla volver¨¢ a contar con la presencia de Jin el pr¨®ximo almanaque. La noticia del venidero estreno de The Jinxing Show 2022 ha sido recibida con entusiasmo por los m¨¢s de 13 millones de seguidores que la artista tiene en Weibo, el Twitter chino. ¡°El programa de entrevistas m¨¢s atrevido de la televisi¨®n, en el que se lanzan verdades como dardos¡± est¨¢ pensado, en palabras de la propia presentadora, ¡°para sorprender al p¨²blico¡±.

A pesar de que la puerta se le ha abierto de nuevo, no es de extra?ar que algunos intenten torpedearle el paso una vez m¨¢s. Por parad¨®jico que parezca dado su historial de ¨¦xito, Jin Xing tendr¨¢ que lidiar en adelante con nuevos obst¨¢culos, ya que las ¨²ltimas disposiciones de los reguladores chinos no han llegado para hacerle la vida m¨¢s f¨¢cil a personas transgresoras de las tradiciones m¨¢s obsoletas como ella. En septiembre se aprobaron una serie de pol¨ªticas que instan a boicotear a las estrellas ¡°inmorales¡±, el ¡°entretenimiento excesivo¡±, as¨ª como a los ¡°hombres amanerados¡± que no siguen ¡°los est¨¢ndares de belleza correctos¡±. Bajo las nuevas regulaciones, las parrillas deben evitar incluir programas en los que aparezcan celebridades que hayan amasado una gran cantidad de dinero a trav¨¦s de redes sociales, de programas de cotilleos o, que en alg¨²n momento de sus carreras, hayan propagado mensajes ¡°vulgares¡± u opuestos a la pol¨ªtica del Partido.