Mary de Dinamarca confiesa por primera vez que sufri¨® depresi¨®n

Las enfermedades mentales afectan a cualquier persona, sea cual sea su puesto en el rango social. Poco a poco el tab¨² va llegando a su fin. Algo a lo que ha contribuido que, en los ¨²ltimos a?os, hayan sido muchas las personalidades que han hablado p¨²blicamente de sus problemas emocionales. Esta vez ha sido la ¡°princesa heredera del Mar del Norte¡±. As¨ª llaman en Dinamarca a su futura reina, Mary Donaldson. La esposa del pr¨ªncipe heredero Federico de Dinamarca ha querido hablar del impacto de la naturaleza en la salud mental desde el nuevo espacio de la televisi¨®n danesa La naturaleza y nuestra mente. Un tema que la princesa ha querido tratar personalmente, haciendo incluso una revelaci¨®n inesperada: ella misma ha sufrido depresi¨®n.

El programa se estrena este jueves, 30 de noviembre. En ¨¦l, se podr¨¢ ver a Mary Donaldson, de 51 a?os, acompa?ada del popular presentador Peter Qvortrup, hablando con naturalidad de los trastornos y complicaciones derivadas de la salud mental mientras pasea por la playa, tal y como muestra el avance que ha compartido la cuenta de Instagram de la familia real danesa. ¡°El impacto de la naturaleza en el bienestar y la salud mental es el tema del nuevo programa de televisi¨®n La naturaleza y nuestra mente¡±, es como abre el anuncio del programa. ¡°La princesa heredera ha trabajado durante muchos a?os para combatir la depresi¨®n y centrarse en la salud mental. Al mismo tiempo, la naturaleza ¨Dy la importancia de cuidarla¨D es una parte esencial de la vida y del trabajo de la princesa heredera¡±, afirma su mensaje en redes.

El programa se grab¨® el pasado verano, aunque ver¨¢ la luz en un momento en el que la familia real danesa lleva semanas ocupando titulares despu¨¦s de la publicaci¨®n de las fotograf¨ªas en las que se ve¨ªa al pr¨ªncipe Federico pasando un d¨ªa en Madrid con Genoveva Casanova y sin su esposa, publicadas en exclusiva por la revista Lecturas y reproducidas en medios de todo el mundo, como el tabloide brit¨¢nico Daily Mail. El heredero al trono fue capturado en varias ocasiones con la empresaria mexicana, Genoveva Casanova, paseando por el Parque de Retiro de Madrid, entrando en su casa de la capital y saliendo a la ma?ana siguiente. Desde entonces, incluso medios de comunicaci¨®n del pa¨ªs n¨®rdico han tachado al futuro rey de ¡°irresponsable¡±, entre otras cosas porque durante ese viaje estuvo sin escolta.

Por ahora, se desconoce cu¨¢les fueron los detonantes que hicieron que la esposa del pr¨ªncipe Federico cayera en la depresi¨®n. Tampoco se sabe si Mary aprovechar¨¢ su presencia en este programa de televisi¨®n para dar detalles sobre la relaci¨®n que mantiene con los miembros de su familia y en especial con su marido, ahora situado en el ojo del hurac¨¢n y que tan solo se ha pronunciado al respecto de las fotograf¨ªas con la exmujer de Cayetano Mart¨ªnez de Irujo para decir que no tiene nada que decir.

Pero la australiana Mary Donaldson no es la ¨²nica princesa que hablar¨¢ en p¨²blico sobre sus problemas de salud mental. Antes lo han hecho otras de las royals. Por ejemplo, Charl¨¨ne de M¨®naco. La esposa del pr¨ªncipe Alberto incluso tuvo que dejar a un lado su agenda oficial para centrarse en s¨ª misma. En 2021, fue ingresada en un centro fuera de M¨®naco para seguir un tratamiento para recuperarse de su ¡°profundo agotamiento, tanto emocional como f¨ªsico¡±, tal y como cont¨® entonces su marido.

La propia Diana de Gales confes¨® en 1995, en la pol¨¦mica entrevista que concedi¨® a Martin Bashir para la BBC tras su separaci¨®n del entonces pr¨ªncipe Carlos, que sufr¨ªa bulimia en los primeros a?os de su matrimonio. Adem¨¢s, cont¨® que hab¨ªa intentado quitarse la vida en una ocasi¨®n. Problemas que, hace cuatro d¨¦cadas, intentaban esconderse en lugar de tratarse. Sus hijos Guillermo y Enrique de Inglaterra tambi¨¦n han hablado p¨²blicamente de sus problemas emocionales tras el accidente que provoc¨® la muerte de su madre cuando ellos a¨²n eran muy j¨®venes (ten¨ªan 15 y 12 a?os, respectivamente).

Aun as¨ª, la familia real brit¨¢nica no fue pionera en hablar p¨²blicamente de su salud mental. Fueron los reyes suecos, Carlos Gustavo y Silvia. Su hija, la princesa Victoria, sufr¨ªa anorexia. Al llegar a su mayor¨ªa de edad, su enfermedad comenz¨® a ser evidente p¨²blicamente, y los reyes se vieron obligados a lanzar un comunicado para revelar lo evidente. Hace cuatro a?os, en su 40? cumplea?os, la heredera al trono se volvi¨® a pronunciar sobre esta cuesti¨®n: ¡°Pas¨¦ una ¨¦poca dif¨ªcil. Necesit¨¦ tiempo para resolverlo y recuperar el equilibrio, conocerme y descubrir d¨®nde se encontraban mis l¨ªmites y no presionarme demasiado¡±.

Descendiente de diplom¨¢ticos y una brillante alumna en las prestigiosas universidades de Harvard y Oxford, la princesa Masako de la casa real de Jap¨®n no fue capaz de sobrellevar la exposici¨®n medi¨¢tica y las presiones inherentes a su posici¨®n. Todo ello desemboc¨® en un ¡°trastorno de adaptaci¨®n¡± motivado por el estr¨¦s, el cual le fue diagnosticado en 2003 y le gan¨® el apodo popular de ¡°la princesa triste¡±. ¡°Su fatiga tiende a prolongarse despu¨¦s de un evento grande o cuando tienen lugar uno detr¨¢s de otro¡±, explic¨® el actual emperador del pa¨ªs nip¨®n cuando su esposa se ausent¨® de la celebraci¨®n de su 60? cumplea?os, en febrero de 2020. ¡°Nunca he querido que se exponga demasiado, sino que contin¨²e haciendo el trabajo que pueda hacer¡±, determin¨® Naruhito entonces.

Pero estos no son los ¨²nicos miembros de la realeza que han dado un paso al frente para concienciar sobre la importancia de cuidar de la salud mental. De hecho, su visibilizaci¨®n se encuentra en las agendas y hojas de ruta de muchas casas reales. En Espa?a, cada 10 de octubre, es costumbre ver a la reina Letizia ofreciendo un discurso sobre visibilizaci¨®n en el D¨ªa Mundial de la Salud Mental. Precisamente este jueves, los Reyes se han desplazado hasta Toledo para inaugurar la residencia comunitaria Hospital del Rey. Una entidad dedicada a amparar a personas con trastornos mentales de gravedad, y riesgo de sufrir exclusi¨®n social por sus padecimientos mentales.