El discurso de la Reina
Un hipot¨¦tico discurso navide?o de do?a Letizia ser¨ªa un regalo y uno de esos hitos pioneros tan propios de Espa?a. Aunque en la ¨²ltima columna de 2023 quiero felicitar a Los Javis: para m¨ª otra pareja real, poderosa y gay
Este a?o me toc¨® ver el discurso del Rey en Vigo. Tambi¨¦n en esa ciudad vi aquel famoso discurso de su padre, el rey em¨¦rito, donde habl¨® de la ejemplaridad y su importancia en la vida de los personajes p¨²blicos. Este a?o el sitio de la ejemplaridad lo ocup¨® la Constituci¨®n. Dos palabras que decoran el ¨¢rbol de Navidad que es el discurso del Monarca.
Unos d¨ªas despu¨¦s recib¨ª en mi m¨®vil los datos de audiencia de la alocuci¨®n con un titular tambi¨¦n muy de adorno: volvi¨® a ser el discurso menos visto en a?os. Los datos tienen ese car¨¢cter antip¨¢tico que deben ser su constituci¨®n y ejemplaridad. Con la experiencia de muchos a?os recibiendo y entendiendo datos de audiencia, pens¨¦ que esta situaci¨®n necesita un meneo. Hay que arriesgar un poquito. Quiz¨¢s sea momento de incluir a la Reina en el programa. Compartir protagonismo, como ya lo hacen en los actos p¨²blicos. El discurso de la Reina tendr¨ªa varios frentes. Desde el m¨¢s evidente, que es un miembro femenino de la instituci¨®n y que se expresa con perfecto dominio del lenguaje televisivo, hasta los menos abstractos, como el hecho de que es una mujer profesional, madre y reina, esa parte de la jefatura del Estado que puede hablarnos de cosas familiares, terrenales y tambi¨¦n institucionales. En un complejo discurso entre la ejemplaridad y la Constituci¨®n, ella tiene algo que decir. Del ejemplo, de la falta de ¨¦l y tambi¨¦n de c¨®mo observamos la figura de la Constituci¨®n los espa?oles que no hemos nacido en una familia real.
Un hipot¨¦tico discurso navide?o de la Reina ser¨ªa un regalo y uno de esos hitos pioneros tan propios de Espa?a, que en 1492 se encontr¨® un nuevo mundo y que en 1992 celebr¨® esos 500 a?os con unos extraordinarios Juegos Ol¨ªmpicos. Am¨¦n de mi llegada a este pa¨ªs, para devolver la visita. Otros ejemplos de lo arriesgada, din¨¢mica y diversa que es esta naci¨®n que sostiene a la Corona y que el Rey pidi¨®, con toda su l¨®gica, defender en sus palabras, se han sucedido en estos ¨²ltimos a?os. Entre ellos tener ministras y vicepresidentas. Una selecci¨®n de f¨²tbol femenina campeona del mundo. Todos ellos constituyen un dosier inmejorable para promover un discurso de la Reina que no sea en X.
La Reina Letizia, invitada de honor para hablar de la #Fundaci¨®nGomaespuma, que se dedica a la promoci¨®n de la cultura y el fomento de la educaci¨®n entre los grupos sociales m¨¢s desfavorecidos en todo el mundo. ?#GomaespumaElReencuentro ya disponible en Movistar Plus+ pic.twitter.com/neFsMMXUsR
— Movistar Plus+ (@MovistarPlus) December 26, 2023
Mientras eso llega, las portadas de las revistas del coraz¨®n proclaman que Letizia y Felipe viven momentos tensos, al parecer enfrentados a pol¨¦micas. Es dif¨ªcil saber a qu¨¦ se refieren esas portadas porque para la prensa tradicional e impresa no existe ninguna pol¨¦mica. Probablemente, los medios del coraz¨®n tienen una cofrad¨ªa en la que se intercambian noticias que al resto nos son vetadas o disueltas bajo la niebla. Con la globalizaci¨®n, la prensa rosa nacional sabe leer en franc¨¦s Paris Match o en ingl¨¦s The Times y en italiano el Corriere della Sera, como sustrato para publicar esas l¨²gubres portadas hablando de tensiones y conjuras.
He terminado de ver Cristo y Rey, que ofrece un retrato nada ejemplar de los dos hombres en la vida de B¨¢rbara: Juan Carlos I, un amante manipulador por su poder, y ?ngel Cristo, otro hombre poderoso y maltratador. Y de la propia Rey, un talento, una llama, un poder forzado a apagarse. Interesante el papel que juega la televisi¨®n en esta serie. Cristo y Rey son estrellas de ese medio en unos a?os en que este ejecut¨® un papel ejemplar en la construcci¨®n de la democracia.
No quiero terminar esta ¨²ltima columna de 2023 sin felicitar a Los Javis. Para m¨ª otra pareja real, poderosa y gay. La mes¨ªas es mi hito del a?o. Es la m¨¢s potente reflexi¨®n sobre la alienaci¨®n y enajenaci¨®n que la religi¨®n puede ejercer sobre nosotros. Este a?o, unos premios period¨ªsticos los reunieron con Almod¨®var en una imagen que, para m¨ª, es ejemplo y constituci¨®n. Feliz 2024.
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