Vuelta a casa
Hasta una coronaci¨®n como la que se celebrara en Copenhague tiene obligatoriamente su momento complicado. La cu?ada del futuro rey Federico X, la princesa Marie, ha decidido no acudir. O sea, un mal rollo real
El a?o comienza con mi regreso a Telecinco como miembro del jurado del programa Bailando con las estrellas. Durante la divertida rueda de prensa de presentaci¨®n escuch¨¦ varias veces la pregunta sobre qu¨¦ significa regresar a Mediaset en su nueva etapa. No es una respuesta f¨¢cil porque el regreso no fue planificado, y tambi¨¦n porque es una aut¨¦ntica sorpresa que una persona tan vinculada a la antigua Telecinco ahora est¨¦ dentro de lo nuevo. Y no deja de ser maravilloso tener la etiqueta de ¡°nuevo¡± pegada en la frente. Aunque en ese ¡°nuevo¡± haya experiencia acumulada y positiva determinaci¨®n.
Hay que tom¨¢rselo con buen rollo. Como cuando fui jurado en ?M¨¢s que baile!, donde locamente adjudiqu¨¦ 10 puntos a Bel¨¦n Esteban, en una votaci¨®n pol¨¦mica y sin complejos, como muchas de las cosas que hicimos en aquella Telecinco. En los corrillos posteriores a la presentaci¨®n de Bailando con las estrellas me interrogaron sobre ese episodio y por qu¨¦ Esteban fue elegida ganadora por delante de Edurne, que bailaba mejor. Son cosas de la televisi¨®n. La Princesa del Pueblo pod¨ªa equivocarse con los pasos o sofocar el ritmo, pero manten¨ªa inc¨®lume el inter¨¦s de la audiencia. Ba?ado por la atm¨®sfera de buen rollo de la nueva Telecinco consegu¨ª decir que las dos contrincantes ¡°se comportaron como se?oras. Tanto Bel¨¦n como Edurne son grandes profesionales¡±.
La plasticidad de Antonia dell?Atte acapar¨® mucha atenci¨®n, vestida de Armani y jugando con unas gafas de sol durante la convocatoria, hizo hincapi¨¦ en que est¨¢ encantada en la nueva Mediaset, a sabiendas de que su presencia all¨ª vuelve a colocarla muy pr¨®xima a su ex, Alessandro Lequio, quien, seg¨²n me indicaron los compa?eros periodistas, ha levantado una amarga pol¨¦mica al se?alar incongruencias de Ana Obreg¨®n con las ganancias por el libro p¨®stumo de su hijo, Aless. Un mal rollo que se suma al que existe entre Gabriela Guill¨¦n y Bert¨ªn Osborne por el nacimiento de su hijo. Como en cualquier regreso a casa se envuelven recuerdos, buenos y malos rollos. Pero ?no es la vida un permanente retorno? Creemos avanzar en una direcci¨®n y volvemos en c¨ªrculo al punto del que hemos partido.
Hasta una coronaci¨®n como la que se celebrara este domingo en Copenhague tiene obligatoriamente su momento complicado. La cu?ada del futuro rey Federico X, la princesa Marie, esposa del pr¨ªncipe Joaqu¨ªn, ha decidido no acudir a la proclamaci¨®n. O sea, un mal rollo real, que algunos intentan suavizar compar¨¢ndolo con Meghan y Enrique (quien al final s¨ª fue a la de su padre Carlos III, aunque tuvo que sentarse en tercera fila). En Dinamarca vuelve a flotar ese olor hamletiano. Un hermano afea al otro en su momento cumbre. Se me ocurre que Joaqu¨ªn tendr¨ªa que pasar por Bailando con las estrellas, bien para que Antonia le d¨¦ una lecci¨®n o para que la experiencia de competir le baje los humos.
Muchos humos, poco buen rollo en Royal Lodge, esa vieja casa de 30 habitaciones en Windsor. El regreso de los llamados papeles de Epstein, el financiero estadounidense propietario de una red de prostituci¨®n vip cuyo juicio lo llev¨® al suicidio en prisi¨®n, ha empujado a Carlos III a ¡°prever retirar los fondos privados que destina a la mansi¨®n que ocupa su hermano Andr¨¦s¡±, seg¨²n publica el diario The Telegraph. Andr¨¦s ha generado muy mal rollo por su relaci¨®n con Epstein y sus chicas. Si quiere permanecer en el Royal Lodge tendr¨¢ que sufragar de su bolsillo los gastos de seguridad. A ver exactamente cu¨¢nto es eso.
Pero no todo son malos rollos. En Abu Dabi, durante la fiesta de cumplea?os tax free del rey em¨¦rito se respiraba realmente tanto buen rollo como pellets flotan en la costa de Sanxenxo, esos pol¨ªmeros derivados del petr¨®leo que se fugan como capitales antes de convertirse, al contacto con el oc¨¦ano, en micropl¨¢stico. O en alegr¨ªa y tarjetas de pl¨¢stico.
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