Andr¨¦s Serrano, sobre su pol¨¦mica obra ¡®El Cristo del pis¡¯: ¡°Sigo siendo un soldado de Dios¡±
El Museu de l¡¯Art Prohibit, proyecto del magnate audiovisual Tatxo Benet, exhibe una copia de la controvertida obra ¡®Piss Christ¡¯. Hablamos con el fot¨®grafo estadounidense y confiesa que le duele sobre todo que le llamen anticristiano
Pocas obras de arte recientes han despertado la furiosa hostilidad de Piss Christ (El Cristo del pis), una fotograf¨ªa de 1987 que muestra a Jesucristo crucificado dentro de un recipiente lleno de orina. Su autor, el fot¨®grafo estadounidense Andr¨¦s Serrano (Nueva York, 73 a?os), fue el chivo expiatorio que dos senadores republicanos, Al D¡¯Amato y Jesse Helms, utilizaron en el Congreso de los Estados Unidos para atacar la financiaci¨®n p¨²blica del arte en el fragor de las guerras culturales de finales de los a?os ochenta ¨Cuna situaci¨®n que resuena hoy en d¨ªa en nuestro pa¨ªs¨C, y la propia obra ha sido objeto de violencia iconoclasta en diversas ocasiones. Serrano estuvo en Barcelona para participar en una conversaci¨®n p¨²blica en el Museu de l¡¯Art Prohibit, proyecto del coleccionista y magnate audiovisual Tatxo Benet que exhibe una copia de Piss Christ como parte de su colecci¨®n. Serrano recuerda que en su d¨ªa no entendi¨® el odio generado por su foto m¨¢s famosa: ¡°Cuando la hice, yo era un desconocido, as¨ª que me impresion¨® que aquellos pol¨ªticos se ofendieran tanto y vinieran a por m¨ª a nivel personal. Aunque tampoco me molest¨® su reacci¨®n, porque siempre pens¨¦ que mi obra est¨¢ abierta a interpretaciones. Si he provocado que alguien piense y sienta, solo por eso ya me alegro¡±.
Sin embargo, algo que s¨ª le doli¨® de todo aquel asunto fue que lo llamaran anticristiano. ¡°Me educaron en el cristianismo, soy parte de la Iglesia y me siento conectado a una larga tradici¨®n de artistas cristianos que trabajan con los s¨ªmbolos de la fe¡±, afirma. ¡°En mi Confirmaci¨®n, las monjas me dijeron que ahora yo era un soldado de Dios. Aunque dej¨¦ de acudir a la iglesia por motivos religiosos, y solo voy cuando estoy en Europa y por razones art¨ªsticas, sigo siendo un soldado de Cristo¡±.
De todas las veces que fue atacado Piss Christ, resulta especialmente perturbadora una, en Melbourne, donde el perpetrador fue un adolescente. ?Qu¨¦ sensaci¨®n le provoco? Por lo que s¨¦, era un chico de 16 a?os que hab¨ªa visto a su madre llorar por la obra, as¨ª que fue a destruirlo. Antes de que eso pasara, el arzobispo de Melbourne, George Pell, intent¨® que prohibieran la exhibici¨®n de Piss Christ, pero el juzgado dijo que no hab¨ªa blasfemia y que s¨ª pod¨ªa mostrarse. As¨ª que hubo protestas, y cuando yo llegu¨¦ all¨ª ya hab¨ªa pol¨¦mica y mucha atenci¨®n de la prensa. Cuando aquel chico fue a romperla, me pareci¨® bien, y le dije al director del museo: ¡°Oye, deber¨ªas dejar as¨ª la obra hasta que tengamos una nueva¡±. Pero, para mi espanto, el director cancel¨® la exposici¨®n al cabo de dos d¨ªas. As¨ª que nos enfadamos todos: no solo yo, que lo denunci¨¦ a la prensa, sino tambi¨¦n el comisario y el resto de la gente que hab¨ªa trabajado en la exposici¨®n. Y le dir¨¦ una cosa sobre el arzobispo George Pell: muchos a?os despu¨¦s le llamaron del Vaticano para ser tesorero o algo as¨ª, y entonces descubrieron que hab¨ªa ni?os que aseguraban que ¨¦l hab¨ªa abusado de ellos [en efecto, George Pell, fallecido en 2023, fue sentenciado a prisi¨®n por abusos sexuales a menores, pero despu¨¦s se anul¨® la sentencia por considerarse que hab¨ªa una ¡°posibilidad significativa¡± de que no fuera culpable]. Esa persona me hab¨ªa atacado a m¨ª por blasfemo mientras hac¨ªa algo horrible contra esos ni?os.
?Quiere decir que existe una conexi¨®n entre ambos hechos? Digo que hay muchos cristianos que son completos hip¨®critas. Y creo que el propio Papa tambi¨¦n lo sabe, porque ha hablado de los cristianos retr¨®grados de Am¨¦rica, que de verdad son retr¨®grados porque, m¨¢s que seguir las ense?anzas de Cristo, de tolerancia y aceptaci¨®n de los dem¨¢s, hacen todo lo contrario. Y eso es muy anticristiano.
Como usted dice, hay muchas posibles interpretaciones de Piss Christ. ?Cu¨¢l es la suya? Cuando hago una foto, s¨¦ por qu¨¦ la hago, pero no es una raz¨®n profunda. Muchas veces simplemente tengo una idea en la cabeza y la realizo, y despu¨¦s se me ocurre la explicaci¨®n. Yo hab¨ªa estado trabajando antes con fluidos corporales, y decid¨ª hacer unas inmersiones en tanques de orina, y entonces puse un crucifijo, porque ya incluso antes hab¨ªa trabajado con iconograf¨ªa religiosa. Se juntaban dos l¨ªneas de trabajo m¨ªas: estaba el pis y estaba Cristo, as¨ª que solo pod¨ªa llamarlo Piss Christ. Y no pens¨¦ que fuera blasfema ni nada por el estilo. Un crucifijo como ese ya es una cosa muy banalizada, que se usa hasta como accesorio de moda y para mucha gente no significa gran cosa. Pero cuando pasas tantas horas crucificado sale todo, el pis y la mierda, todo. Pues, si te ofende, debes pensar lo que representa, que es el modo horrible en que Cristo fue asesinado.
En Espa?a acabamos de tener otro peque?o esc¨¢ndalo por un el cartel de la pr¨®xima semana Santa de Sevilla, que consiste en una representaci¨®n en realidad muy convencional de Cristo, con un hermoso cuerpo, por lo que quiz¨¢ han visto en ¨¦l connotaciones homosexuales. En todo caso, seg¨²n el Nuevo Testamento, Jesucristo fue muy escandaloso para la sociedad y el poder de su tiempo, as¨ª que, ?no es coherente que siga si¨¦ndolo hoy en d¨ªa, aunque sea a trav¨¦s de la mirada de los artistas? Nunca lo hab¨ªa pensado, pero tiene raz¨®n. El propio Cristo fue muy controvertido, as¨ª que ahora solo estamos siguiendo sus pasos con m¨¢s controversia en su nombre. Cristo y sus s¨ªmbolos, como el crucifijo, ha creado la religi¨®n m¨¢s poderosa de la Tierra. Y eso es fant¨¢stico, que tenga un efecto tan prolongado, y en la vida de tanta gente, incluso en nuestros d¨ªas. Hay muchos superh¨¦roes en las pel¨ªculas, pero nadie les reza como rezan a Cristo.
Pero en otra de sus series, Residents of New York, mostr¨® gente sin hogar, y nadie pareci¨® escandalizarse ante esa situaci¨®n, que quiz¨¢ para un cat¨®lico deber¨ªa resultar m¨¢s ofensiva. Nunca he tratado de hacer nada ofensivo, aunque algunas de mis obras hayan sido fuertes. Pero en el caso de la gente sin hogar, la gente no quiere verlo, as¨ª que prefieren mirar hacia otro lado ante esas injusticias, ya que no hacen nada al respecto. Otra serie m¨ªa, History of Sex, fue atacada por un pu?ado de neonazis, que grabaron la acci¨®n e hicieron una pel¨ªcula bastante interesante que pusieron en YouTube, con m¨²sica heavy y esl¨®ganes nazis tipo ¡°arte degenerado¡±. Siempre digo que mi trabajo es bastante b¨¢sico, no es que incorpore teor¨ªa o historia del arte, sino que trata de cosas sencillas, de la muerte, la raza, la religi¨®n y el sexo.
?Cree que no deber¨ªa existir censura en el arte? Creo que deber¨ªas poder hacer cualquier cosa, siempre que no te arresten. Y, si te arrestan, quiz¨¢ haya que cambiar las leyes.
?Y qu¨¦ hacemos con los mensajes de odio, con el racismo o la xenofobia, o con quienes denigran grupos humanos como las mujeres o los homosexuales? De hecho, hay otra exposici¨®n que hice, llamada Infamous, donde mostr¨¦ una postal de 1907 con un hombre colgado en un ¨¢rbol. No solo es que lincharan a gente negra inocente, es que iban a verlo como si fuera el circo o algo as¨ª, y pod¨ªa hasta mandarse por correo una postal con esa imagen, y nadie se ofend¨ªa por ello. El pasado tiende a repetirse cuando tratas de negar lo que ocurri¨®. Y yo no quiero apartar la mirada. Quiero mirarlo, y discutir c¨®mo me siento ante ello.
Pero usted lo hizo con una perspectiva cr¨ªtica. Imagine que otro artista utilizara la misma postal para decir que habr¨ªa que volver a hacer algo as¨ª. ?Deber¨ªa permitirse tal cosa? No se me ocurre nadie lo bastante atrevido como para hacer eso. Y eso que seguramente habr¨¢ mucha gente que lo piense, pero jam¨¢s lo expresar¨ªa. Hoy hay reacciones adversas con todo, especialmente en las redes sociales. Pero mire Am¨¦rica, donde todo est¨¢ tan dividido, todo es blanco y negro. La mitad de la gente quiere a Trump, y la otra mitad los detesta por ello. Ya no hay un frente unido. Siempre digo que la guerra civil nunca termin¨®. Y se ve porque cuando lleg¨® Trump dijo: ¡°A vosotros no os gusta esa gente y a m¨ª tampoco, as¨ª que: ?que les jodan!¡±.
Algo similar suele decirse de Espa?a, donde la guerra fue m¨¢s reciente y adem¨¢s estuvo seguida por 40 a?os de dictadura. Y fue una guerra horrible y brutal, ?verdad? Ese es el problema de la guerra y la religi¨®n, que rompe las familias, las sociedades y las naciones. Pero qu¨¦ se puede hacer cuando la gente est¨¢ en completa oposici¨®n entre s¨ª.
?Es de quienes piensan que debido a lo woke ya no se puede decir nada? ?Cree que existe menos libertad de expresi¨®n hoy que en 1987? Podr¨ªa ser. Es verdad que no puedes decir nada. Gente muy lista y joven es silenciada solo por sentir algo. Y eso es malo, y va m¨¢s all¨¢ de lo woke. Tiene que ver con la intolerancia con otra gente y con ideas que no son las suyas.
?Todo arte es pol¨ªtico, incluso aunque su autor no lo pretenda? Siempre digo que soy apol¨ªtico porque trabajo con un grupo de Londres llamado a/political, pero claro que tengo sentimientos. Aunque en mi trabajo prefiero ser abierto, de forma que puedas interpretarlo en un sentido u otro. He hecho una pel¨ªcula sobre el asalto al Capitolio de los Estados Unidos, Insurrection, a partir de v¨ªdeos de la gente que hab¨ªa estado all¨ª grab¨¢ndose a s¨ª misma. Era como estar ah¨ª desde la emoci¨®n del principio hasta el barullo del final. Y si lo ves y eres partidario de Trump te gustar¨¢, pero si est¨¢s en el otro lado tambi¨¦n, porque dir¨¢s: ¡°Dios m¨ªo, mira esto, no hay ni polic¨ªa ni ej¨¦rcito, y en cambio si estas personas hubieran sido negros les habr¨ªan disparado de inmediato¡±. Por cierto, esto podr¨ªa suceder de nuevo, porque si vuelve Trump tendr¨¢ un ej¨¦rcito de fieles a¨²n mayor, y quiz¨¢ las fuerzas militares de los Estados Unidos detr¨¢s. As¨ª que qui¨¦n sabe lo que pasar¨¢.
?Le preocupa la situaci¨®n pol¨ªtica en los Estados Unidos? No me preocupa tanto, porque todas las civilizaciones caen, as¨ª que sea lo que sea que pase, pasar¨¢. Esa es la maldici¨®n de los seres humanos, que tienen que destruirse entre s¨ª en alg¨²n momento.
He le¨ªdo que la ¨²nica persona que le ha dado indicaciones sobre c¨®mo deb¨ªa fotografiarla fue Yoko Ono. ?C¨®mo ocurri¨®? ?S¨ª! A m¨ª me gusta fotografiar a la gente desde abajo, pero ella me dijo: ¡°?No, no, Andr¨¦s, sube la c¨¢mara!¡±. As¨ª que yo le dije: ¡°Muy bien, Yoko¡±. ?La dulce Yoko!
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