Eusebio Poncela: ¡°Hu¨ª de Madrid porque la gente con las drogas no te deja en paz. Mi casa parec¨ªa la de Keith Richards¡±
El protagonista de t¨ªtulos clave del cine espa?ol como ¡®Arrebato¡¯ o ¡®La ley del deseo¡¯ acaba de recibir el premio honor¨ªfico del Festival LesGaiCineMad, recompensa a su visibilidad de la diversidad sexual
Leer la lista de pel¨ªculas que Eusebio Poncela (Madrid, 77 a?os) interpret¨® en los setenta y ochenta es recitar un compendio de algunos de los t¨ªtulos m¨¢s transgresores y atrevidos del cine espa?ol. Aunque el actor insiste en reivindicar la figura del cineasta Eloy de la Iglesia como la persona que abri¨® camino al resto y, por ello, ¡°recibi¨® muchos palos¡±, Poncela fue quien puso cuerpo y voz en la pel¨ªcula que hicieron juntos, La semana del asesino (1972), a un personaje homosexual en pleno franquismo. Tras De la Iglesia, colabor¨® con otros dos artistas revolucionarios como Iv¨¢n Zulueta y Pedro Almod¨®var para superar nuevas barreras de representaci¨®n con, respectivamente, Arrebato (1979) y La ley del deseo (1987), pionera en sus valientes escenas de sexo entre dos hombres. En Operaci¨®n Ogro (1979), narrada desde el punto de vista de ETA y a¨²n en la Transici¨®n, dio su rostro al magnicida que deton¨® la bomba contra el almirante Carrero Blanco.
Pero Eusebio Poncela, que atiende a ICON horas antes de salir de vacaciones a Argentina (¡°Argentina tiene dos cosas muy buenas, un sentido de la amistad fabuloso y los dentistas¡±, explica), no le da tanta importancia. Solemnidades, las justas. Ni siquiera ha visto, asegura, ninguna de las pel¨ªculas citadas. El d¨ªa 8 recibi¨® en el Cine Dor¨¦ de Madrid, sede de la Filmoteca Espa?ola, el premio de honor de la 27? edici¨®n del festival LesGaiCineMad, que tambi¨¦n proyect¨® como homenaje una versi¨®n sin censura de La semana del asesino. El int¨¦rprete, que en diciembre retomar¨¢ su gira por los teatros espa?oles con la obra El beso de la mujer ara?a, sorprendi¨® en el coloquio a golpe de humor al joven p¨²blico que abarrotaba la sala con respuestas como ¡°A Javier Bardem nadie le pregunta si teme encasillarse por hacer cinco heterosexuales seguidos¡±.
?De d¨®nde viene ese tir¨®n suyo entre los j¨®venes? Yo qu¨¦ s¨¦, no tengo ni idea, pero as¨ª es. Me pasa tambi¨¦n en el teatro. Supongo que ven a un t¨ªo que lo hace bien, que da la cara y que se toma las cosas de otra manera. No el t¨ªpico gilipollas que va haciendo el chorra por ah¨ª. Se dan cuenta de que no hay artificio, que lo que hay es lo que ven.
Recogiendo el premio de honor del LesGaiCineMad dijo que no le importaban los galardones, pero que este significaba mucho. ?Qu¨¦ tiene de especial? No es que no me importen, es que no s¨¦ por qu¨¦ me los dan. Tengo tres premios Sant Jordi. ?Por qu¨¦ les gusto tanto a los catalanes? No lo s¨¦. Entonces, este s¨ª tiene un significado, por un c¨²mulo de cosas que ni se me hab¨ªa ocurrido pensar sobre la visibilidad y la representaci¨®n que he hecho en estos 50 a?os de trayectoria. Tiene un significado especial no por m¨ª, sino por las personas a las que mis pel¨ªculas han servido para salir un poco de tanta putada, que no pod¨ªan ir por la calle d¨¢ndose cari?o con su pareja del mismo sexo porque les met¨ªan un hosti¨®n.
En el homenaje proyectaron su primera pel¨ªcula, La semana del asesino. ?C¨®mo se empieza con algo tan radical y en la Espa?a franquista? Me parece incre¨ªble haber empezado por ah¨ª, ya abriendo brecha y cantando las cuarenta. Eloy [de la Iglesia] era la pera, le guardo mucho cari?o, recibi¨® muchos palos. Fue el primero que se enfrent¨® a la catarata de hostias, porque Iv¨¢n Zulueta lleg¨® 10 a?os despu¨¦s y Pedro [Almod¨®var] un poco m¨¢s tarde. La pel¨ªcula pudo hacerse porque Vicente Parra, el protagonista, la sac¨® adelante para poder trabajar. Era un actor carism¨¢tico y popular, estaba muy dentro del franquismo por su actitud y por sus trabajos, hac¨ªa cosas muy edulcoradas. Pero cuando los actores no son aut¨¦nticos y guardan secretos [Parra era, seg¨²n algunos compa?eros, homosexual], enferman o no hacen bien su oficio. Un actor, para ser bueno, no puede guardar secretos ni llevar falsedades dentro. Entonces este hombre empez¨® a tener dificultades e hizo La semana del asesino. ?Con lo que no contaba era con que Eloy iba a ser tan, tan, tan salvaje!
De usted, en cambio, viendo su filmograf¨ªa, queda claro que nunca pens¨® en el qu¨¦ dir¨¢n. Si me hubiera importado, hubiera estado toda mi vida paralizado. Lo primordial es que nunca me he tomado este oficio como una carrera. Yo no estaba haciendo una carrera, estaba haciendo una vida. El oficio me gustaba porque me serv¨ªa para investigar. Y en base a eso hac¨ªa las pel¨ªculas, quitando cuando estaba colgado, que ah¨ª hac¨ªa lo que fuera para comprarme lo que necesitaba. Generalmente, he recibido ofertas de los mejores directores de este pa¨ªs. A todos los he seducido. ?Todos los interesantes han pasado por estas manos!
?Le ocurre igual en teatro? Lleva doblete con Carlota Ferrer. Es que Carlota es la mejor montadora visual del teatro espa?ol. Lo que ha hecho con El beso de la mujer ara?a es una belleza. Cuando hicimos Esto no es la casa de Bernarda Alba, me dijo que pensaba que yo la iba a mandar a tomar por culo. Pero era el proyecto que necesitaba. Yo interpret¨¦ a Bernarda Alba mejor de lo que lo hab¨ªa hecho N¨²ria Espert, que es la persona que m¨¢s admiro en este oficio. N¨²ria y toda la gente que la hizo antes se hab¨ªa perdido en cosas psicol¨®gicas. No hab¨ªa que hacer nada m¨¢s que dejarse envolver en la m¨²sica extraordinaria de las palabras de Lorca. El sentimiento es secundario, una cosa m¨¢s privada. Lo que sientes no es tan importante. ?Da igual lo que sientas! Es lo que piensas y lo que expones.
?Por qu¨¦ no ve las pel¨ªculas que hace? ?Es por pudor? No, pudor yo tengo poco, me gustar¨ªa tener un poquito m¨¢s. Es que soy un hijo de la gran puta y un obsesivo compulsivo. El edred¨®n tiene que estar colocado de tal manera, esas cosas. Mucha gente se piensa que me comporto como una ama de casa de Logro?o, pero no, yo no soy de Logro?o, soy obsesivo compulsivo. As¨ª que no me puedo ver, porque me estoy puteando todo el d¨ªa siguiente. Desde el principio no he visto ninguna pel¨ªcula. Eso me ha costado discusiones graves, porque todos estos genios son unas divas. ?Cuidado con ellas! [Adolfo] Aristarain est¨¢ cabread¨ªsimo porque yo no he visto Mart¨ªn (Hache) (1997). Aristarain es amigo, lo voy a ver estos d¨ªas. Pero estoy harto de explicarles esto, que me parece una cosa de lo m¨¢s razonable.
?Hay en el contexto actual del cine espa?ol espacio para trabajos como los que hizo con De la Iglesia o Zulueta? Las cosas han cambiado much¨ªsimo. Si te digo la verdad, no veo nada de cine espa?ol. Muy poca gente me llama la atenci¨®n ahora mismo. Cuando voy repasando las plataformas, nada de lo que hay de cine espa?ol me llama la atenci¨®n, paso de verlo como pasar¨ªa de ver a un asesino en serie de Dinamarca. No s¨¦ si hay directores interesantes ahora en el cine espa?ol, pero me gustar¨ªa que los hubiera y enterarme de qui¨¦nes son para que este vejestorio los seduzca.
Se le conoce afici¨®n al ejercicio. ?Es una manera de enfrentarse al paso del tiempo o compromiso con el oficio? No, no, yo adoro el paso del tiempo. Estamos hablando de una persona que es bastante inteligente. No estoy en contra del tiempo, ser¨ªa un gilipollas. Estoy a favor, muy a favor. De verdad. Adoro las edades, quitando la adolescencia, que te va creciendo la clav¨ªcula y no sabes qu¨¦ pasa. Las dem¨¢s edades han sido maravillosas para m¨ª. Bienvenido sea el paso del tiempo. ?Ol¨¦ sus huevos el tiempo! Estoy a favor de la salud. Hago ejercicio porque me gusta mucho la salud. Sin salud no haces nada. Mi padre ya era deportista. De mi padre mam¨¦ el socialismo y el deporte, ¨¦l abogaba por un socialismo deportivo. Hay que tonificar el mu?eco. Pensar que te pones peor con el paso del tiempo es uno de los mayores errores que puedes cometer.
?Por qu¨¦ se fue de Madrid? Madrid me gusta, me ha gustado siempre mucho. Pero sal¨ª huyendo, no de Vallecas, que es donde crec¨ª, sino del centro. No me daban tregua, la gente cuando se pone pesada con droguer¨ªa no te deja en paz. Mi casa parec¨ªa la de Keith Richards. Ahora llevo como 20 a?os en el campo. Por eso no voy tampoco al cine. Para ver pel¨ªculas tendr¨ªa que irme a Villalba, que est¨¢ en el quinto co?o.
Lleva tiempo tambi¨¦n prefiriendo el teatro y la televisi¨®n. ?Le gusta mantener un ritmo de trabajo continuado? Qu¨¦ va, a m¨ª me gusta mucho desaparecer, viajar y tocarme los huevos. No estoy inactivo en cine porque no reciba ofertas, sino porque no eran relevantes. Meterme la paliza de estar en un equipo con 50 personas que no conozco haciendo algo que creo que no tiene fundamento, pues no me motiva nada. El teatro me ha estimulado m¨¢s las sustancias del cerebro.
?Qu¨¦ necesita tener un papel para que usted lo escoja? Depende del d¨ªa. Lo interesante es que haya cierta coherencia en la propuesta, que el creador o la creadora sea interesante. No es tampoco cuesti¨®n de g¨¦neros, aunque nunca me llamen para comedia porque me vean cara de yonqui o de t¨ªsico. Lo ¨²ltimo que he hecho que no era teatro fue la segunda temporada de Merl¨ª: Sapere aude. Eso lo hice porque estaba harto de estar encerrado en la pandemia. No me acuerdo qui¨¦n era el productor, uno de los gordos, pero vino y le ped¨ª una pasta gansa. Los guiones me parec¨ªan flojos, pero hab¨ªa dos cosas que me llamaban la atenci¨®n. Una era Mar¨ªa Pujalte, que es una muchacha estupenda, y otra cantar una canci¨®n de Mari Trini que yo eleg¨ª. Con eso bast¨®.
Habl¨¢bamos antes de La semana del asesino, pel¨ªcula de culto internacional entre aficionados al terror. ?Qu¨¦ me dice de Tuno negro (cinta al estilo slasher estrenada en 2001)? (Risas) ?No! Para mucha gente es la peor de mi filmograf¨ªa. No la he visto, pero me lo pas¨¦ muy bien haci¨¦ndola. Entiendo que la gente solo la recuerda porque es cutre. Y me alegro de que la disfruten as¨ª, ?eh? Tengo un recuerdo muy agradable del rodaje en Salamanca, el equipo era estupendo y los dos directores eran muy simp¨¢ticos. Hice Tuno negro solo por la pasta, para qu¨¦ te voy a enga?ar. Era uno de esos momentos en los que estaba yo un poco matarile. Si hubiera estado en mis cabales, no la hubiera hecho.
?Qu¨¦ tal se lleva con las pel¨ªculas que hizo junto a Almod¨®var? De puta madre, ?c¨®mo no me voy a llevar bien con esas pel¨ªculas? Con Almod¨®var no pasa nada, no tengo ning¨²n problema. Lo que ocurre es que, como soy muy bocazas y no apetece callarme, a veces los medios hacen un estereotipo de m¨ª. Pero ya est¨¢, no pasa nada, las relaciones en este oficio se diluyen. De pronto son apasionadas, todo es la hostia, y de pronto dejas de verte. Pasa todo el rato, quitando alguna excepci¨®n como Adolfo Aristarain, con quien todav¨ªa tengo relaci¨®n. Que eso ocurra es un milagro. Lo normal, y lo digo con toda la bondad y pese a estar a favor del tiempo, es que se diluyan. Nos vamos a diluir todos. No pasa nada. No vamos a pensar en trenes que pasaron hace 40 a?os. Mi relaci¨®n con Almod¨®var fue fabulosa. Nos cagamos de risa y todo fue maravilloso hasta que se termin¨®.
?Le parece bien si La ley del deseo acaba siendo su pel¨ªcula m¨¢s recordada? Parece que Arrebato est¨¢ ganando. Mira, aqu¨ª en mi pueblo me romp¨ª tres costillas. Estaba harto del confinamiento y, a escondidas, como vivo al lado de la monta?a, me fui. Me puse las zapatillas equivocadas y, al ir de roca a roca, me escurr¨ª y me pegu¨¦ un hosti¨®n tan grande que me romp¨ª tres costillas. Llegaron los de la ambulancia con la camilla, estaba a 1.500 metros de altura. Y ?sabes qu¨¦ me pregunt¨® el de la camilla mientras me llevaba malherido al hospital? Que si le pod¨ªa explicar el final de Arrebato, que no lo hab¨ªa entendido. ?Te lo puedes creer? Ten¨ªa 22 a?os el pavo, pod¨ªa ser mi nieto. Yo pensaba: ?c¨®mo es posible esto que me est¨¢ pasando a m¨ª? Se me est¨¢n llevando muerto y este pavo me est¨¢ preguntando por el final de Arrebato. Despu¨¦s de eso, me qued¨® claro. Ha trascendido. Es m¨¢s minoritaria, menos conocida, pero estoy viendo que tiene un camino m¨¢s largo. Si vas a Sudam¨¦rica, Mart¨ªn (Hache) es gigantesca all¨ª. Se ponen de rodillas a recordarme lo de: ¡°Hay que follarse a las mentes¡±. Si me pongo a pensar en todas las pel¨ªculas que he hecho que van a seguir vi¨¦ndose cuando yo no est¨¦, me salen unas cuantas.
Muchos de los nombres que hemos mencionado, Eloy de la Iglesia, sus elencos, Vicente Parra, Iv¨¢n Zulueta o Will More, su compa?ero en Arrebato, son los grandes malditos del cine espa?ol. Todos o dejaron de trabajar, o murieron prematuramente por adicciones, o fueron marginados por su orientaci¨®n. ?C¨®mo escap¨® usted de eso? Bueno, a ver. ?Qu¨¦ preguntas me haces, t¨ªo! No lo s¨¦. Todo lo que se me ocurre es muy narcisista, as¨ª que paso de cont¨¢rtelo. Dej¨¦moslo en que no tengo ni idea. Al recoger el premio a mi trayectoria, dije que ahora estaba empezando. Y es verdad. Ahora quiero empezar otra vez con fuerzas renovadas, una vez m¨¢s. Ahora mismo estoy viendo un arco¨ªris desde la casa donde vivo que es la hostia. Tengo unas vistas impresionantes.
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