Idles: ¡°Cuando era un gilipollas nuestras canciones eran de gilipollas tambi¨¦n¡±
Con su nuevo disco y su reciente gira por Espa?a han confirmado su talento para mezclar poes¨ªa, activismo y post punk. Y con esta entrevista, su capacidad de autocr¨ªtica y su gusto como catadores de batidos de chocolate
¡°?Qu¨¦ haces? No apagues. Enciende de nuevo la grabadora, que no he acabado¡±. Joe Talbot (Newport, Gales, 39 a?os), el l¨ªder de la banda de post punk Idles se?ala amenazante el m¨®vil con el que estamos registrando esta entrevista en una sala del Wikink Centre de Madrid, horas antes de que el grupo se suba al escenario ante unas 6.000 personas para presentar en directo su quinto ¨¢lbum, Tangk. ¡°Si alguien me lanza sobre el escenario una bandera palestina esta noche, la coger¨¦, la ondear¨¦ y gritar¨¦ (en espa?ol) ¡®?viva Pelastina libre!¡¯. Y bueno, no hace falta que me lancen nada, lo voy a gritar igualmente, como hice ayer en Oporto y como voy a hacer durante toda la gira, mientras este genocidio indecente siga. No tengas ninguna duda¡±. Al vocalista, visto lo timorato que se ha vuelto el mundo de la m¨²sica con las causas pol¨ªticas, se le hab¨ªa dado la opci¨®n de manifestarse off the record. Vehemente ha declinado la posibilidad.
Horas m¨¢s tarde, sobre el escenario, Talbot llamar¨¢ a la libertad palestina y tambi¨¦n proferir¨¢ soflamas contra la monarqu¨ªa. Una parte del p¨²blico responder¨¢ entusiasmada; otra, considerable, callar¨¢, como si asumiera que el compromiso pol¨ªtico de un grupo en el a?o 2024 no es un plus para hacerse seguidor del mismo, sino un peque?o peaje que hay que pagar para poder seguir bailando. Ya saben, Bella ciao no puede ser un tema politizado porque La casa de papel es una serie de Netflix que le gusta a toda la familia y La zona de inter¨¦s es una pel¨ªcula sobre jardiner¨ªa.
Media hora antes de la llamada a la resistencia palestina, Talbot ha entrado junto a Mark Bowen (Exeter, Inglaterra, 37 a?os), el guitarrista y gur¨² musical del combo, en la sala como un torbellino. Se ha quejado de un molesto dolor de espalda, ha recordado que todos los carteles que decoran el backstage los ha dise?ado ¨¦l y ha sacado de la bolsa una de las dos botellas de Cacaolat que las chicas del sello le han comprado. Tras dejar de beber, el vocalista se dedic¨® durante la pasada gira europea a valorar las bebidas de chocolate m¨¢s populares de cada territorio que Idles visitaba. Parece que una de las ganadoras fue este elixir creado por la familia Viader en Barcelona a principios del siglo XX. ¡°Mmmm. Vanos a ver. No s¨¦ si me va a gustar¡±, informa ante nuestra sorpresa. Le recordamos que hace nada era una de las cosas que m¨¢s le gustaban en el mundo. ¡°Ya, pero la prob¨¦ en cristal. Esto es pl¨¢stico¡±.
Idles se form¨® en Bristol en 2009. Tras varios EPs en los que la banda, en vez de pulir, parec¨ªa que embrutec¨ªa su sonido, y de actuar en todas las salas mal ventiladas y sin salida de incendios de Reino Unido, en 2017 lanzaban su disco de debut, Brutalism. Aclamado por la cr¨ªtica, el consenso alrededor de aquel bestial artefacto de un post punk que rozaba lo hardcore, era que el siguiente ¨¢lbum ser¨ªa el que les har¨ªa estrellas. Esta profec¨ªa, que normalmente no se cumple, en su caso si se materializ¨®. Al a?o siguiente vio a la luz Joy as an act of resistence, un disco mucho m¨¢s rico en el nivel compositivo, aunque igual de brutal. Fue ese largo en el que Talbot hall¨® su voz como poeta, mezclando lo social con los sentimental y presentando lo pol¨ªtico como un gesto de amor al pr¨®jimo, de empat¨ªa. El ¨¦xito les sent¨® regular, y su siguiente trabajo, Ultra mono (2020), fue una broma que a¨²n espera sus risas. Un a?o m¨¢s tarde lo remediaron con el musculoso Crawler, precedente de este nuevo Tangk, en el que los gui?os electr¨®nicos y los pasajes m¨¢s pausados de aquel disco se llevan casi a la perfecci¨®n. Producido por Nigel Godrich (Radiohead, Beck, REM, U2) junto a Kenny Beats, productor especializado en hip hop (Schoolboy Q, Denzel Curry) que ya se hiciera cargo de Crawler y que hoy Idles acepta como sexto miembro del grupo, Tangk es la confirmaci¨®n de que esta banda pod¨ªa ser capaz de deshacerse de lo redundante y rellenar ese espacio con algo sorprendente.
¡°Con Nigel quer¨ªamos explorar m¨¢s¡±, interviene Bowen. ¡°En Crawler lo hicimos un poco y nos gust¨®. Quer¨ªamos que se involucrara lo m¨¢ximo posible. Tensionar el rock y la electr¨®nica. Nigel me dijo que todo es rock, pero que se puede hacer algo el¨¢stico y sin l¨ªmites como se hizo en Kid A. Nos llev¨® hacia sitios poco c¨®modos y nos dej¨® all¨ª hasta que nos sentimos bien. Algo muy bueno tambi¨¦n fue juntarlo con Kenny Beats. Nigel no sab¨ªa qui¨¦n Kenny era y Kenny admira a Nigel. Se cre¨® una din¨¢mica muy guai. Nigel no hab¨ªa trabajado nunca junto a otro productor¡±. Talbot interviene. ¡°Amo a Mark¡±, dice se?alando al guitarrista. ¡°Un d¨ªa ¨¦l ser¨¢ un gran productor. No tengo ninguna duda de que alg¨²n d¨ªa los discos de Idles los producir¨¢ ¨¦l¡±.
Trazos del sonido primigenio de Idles remiten a bandas como Gang Of Four, Bauhaus o Joy Division. En Crawler se introdujeron, gracias a Kenny Beats, elementos propios del grime, Bowen insiste a¨²n ad¨ªa de hoy de que la principal influencia en su Brutalism fue el Yeezus de Kanye West. En Dancer, el primer single de Tangk, colaboraban LCD Soundsystem y en cortes como Pop Pop Pop se intuye la sombra de Talking Heads. Toda esta macedonia redunda en un sonido que es propio y que ya de por s¨ª les eleva por encima de otras propuestas actuales en la misma onda. Pero lo que realmente dota de una personalidad intransferible a Idles es Joe Talbot, su forma de entender el mundo y el arte, la manera de gestionar su masculinidad. Da la sensaci¨®n de que, en ocasiones, su propuesta ha sido excesivamente complicada para un mundo que a los artistas solo les reclaman sentimientos primarios. Aliade de palo. Pijo vestido de obrero. Arribista. Narcisista.
¡°?Que si a¨²n temo que me malinterpreten? ?Qu¨¦ tipo de mierda insegura de persona ser¨ªa si me subiera al escenario pensando eso? Todo est¨¢ abierto a interpretaci¨®n. He sido malinterpretado cada puta vez y eso es magia. Si soy honesto, si soy sincero, siempre ser¨¦ yo. Mira, mi hija iba el otro d¨ªa por primera vez iba a clase de gimnasia. No quer¨ªa llevar pantalones largos, sino shorts y unos leggins debajo. Cuando se lo puso, me dijo que se iban a re¨ªr de ella. ¡®?Por qu¨¦?¡¯, le pregunt¨¦. ¡®Porque parezco boba¡¯, me respondi¨®. Le dije: ¡®Si te digo que eres p¨²rpura, ?eres p¨²rpura? Si te sigo que eres un tigre, ?eres un tigre? No, ?verdad? Pues eso. Sabes qui¨¦n eres y no eres boba¡¯. Y yo s¨¦ qui¨¦n soy. Lo bonito es que cuando me miras a m¨ª, ves tu infancia, tus mierdas, tu vida. No eres m¨ªo, sino que te propongo algo que despierta cosas en ti, cosas que hacen que te sientas vivo. Si alguien te ama, te dejar¨¢ siempre ser quien eres, explotar si lo necesitas¡ A ver, cu¨¢l es tu banda preferida¡¡±, nos inquiere finalmente Talbot. Se lo decimos. ¡°Vale, ?y qu¨¦ significa para ti esa banda?¡±. Soltamos media docena de adjetivos. ¡°Pues esa banda es justamente eso¡±.
Tangk es un disco que trata del amor. Porque, seg¨²n Talbot, todo es amor. No solo en lo musical han logrado encontrar la forma de traducir todas las ideas, incluso las mejores, en canciones lo m¨¢s fieles posible a lo que sonaba en sus cabezas. En lo l¨ªrico, afirma haber conseguido tambi¨¦n dejar atr¨¢s un periodo en el que ¡°era una mierda de persona, pido perd¨®n¡± y lograr escribir desde el amor y hacia el amor, tome este la forma que tome, porque amor en el diccionario de Talbot es un t¨¦rmino con infinidad de acepciones. Eso s¨ª, siempre nace de la necesidad. ¡°Empec¨¦ el grupo porque estaba muy solo y muy perdido¡±, rememora. ¡°Quer¨ªa ser parte de algo y que ese algo me llevara. Necesitaba hacer cosas, dialogar con el mundo y conectar con ¨¦l. Crear algo el¨¦ctrico y hacer a otros sentir lo que me hicieron sentir tantas bandas antes. Todo nace del amor¡ y de la violencia, porque la violencia es importante. Toda gran historia tiene mucho de eso. A veces cuesta entender c¨®mo nuestro gobierno rompe el pa¨ªs. Y si escribo de eso en realidad estoy escribiendo de amor por la gente que merece algo mejor que esa mierda. La gente a la que debe llegar el dinero de los impuestos. Eso es amor, no es pol¨ªtica. Intento ser inocente y que la gente se sienta vulnerable. Y esa inocencia es a veces bomb¨¢stica, a veces infantil. Y ahora soy padre y todo tiene m¨¢s sentido, m¨¢s empat¨ªa, m¨¢s fe. Cuando era un gilipollas las canciones eran de gilipollas tambi¨¦n. Pero ya no soy esa persona. Me la he comido. No quiero aburrirme porque no soy aburrido, porque soy un tipo interesante. Lo soy porque me interesa la gente. Me voy a seguir moviendo junto a mi grupo. Ellos me ayudan a moverme. No vamos a mirar atr¨¢s, no vamos a pedir perd¨®n. Siempre vamos a ir hacia adelante¡±.
La banda, afirman Bowen y Talbot, ha llegado a un punto en el que las din¨¢micas est¨¢n claramente definidas. Ellos dos lideran y los otros tres juegan tres roles secundarios perfectamente determinados, compatibles y no redundantes. ¡°Es que es as¨ª¡±, interviene Bowen al ver cierta sorpresa ante un arrebato de sinceridad no muy com¨²n en las bandas de rock. Talbot mira al techo. Describir a este se?or, o transcribir sus palabras, es una tarea ¨ªmproba y que sabemos que, por mucho que intentemos, no lograremos acometer con ¨¦xito. Hay que verlo y hay que escucharlo, porque si no puede parecer un simple fantoche o un visionario de feria. Habla bajito, intimida en el susurro y en vez de encajar los golpes, responde con otros de inmediato. ?Cu¨¢ndo supo que pod¨ªa ser todo esto? ¡°Me di cuenta de que pod¨ªa hacer esto cuando ten¨ªa siete a?os y lograba que la clase y el profesor se mearan de risa. Los ten¨ªa comiendo en la palma de mi mano. Cuando estaba muy gordo, tuve con mi madre una conversaci¨®n. Ella me anim¨® a dedicarme a hacer que la gente se sintiera bien y poderosa. Eso me hac¨ªa poderoso a m¨ª tambi¨¦n. Siempre he podido hacer esto de gobernar la sala. Era entonces tan enigm¨¢tico como ahora, incluso m¨¢s¡±.
¡°La m¨²sica no puede arreglar problemas pol¨ªticos y creo que su postura sobre eso es un clich¨¦. Se han apropiado de la voz de la clase obrera¡±. Esto dijo Jason Williamson, de la banda Sleaford Mods, sobre Idles en 2019. Las declaraciones levantaron cierta polvareda en Reino Unido. Sleaford Mods eran aut¨¦nticos, Idles eran de pl¨¢stico. El pasado 14 de noviembre, cuando Sleaford Mods actuaron en Madrid, un miembro del p¨²blico lanz¨® una bandera palestina al escenario. Williamson no solo no la recogi¨®, sino que par¨® el concierto, abandon¨® el escenario y nunca volvi¨®. ¡°?Ah! Co?o. Me has preguntado lo de la bandera por esto¡±, dice Talbot mientras Bowen sacude la cabeza y murmura: ¡°Esto no fue exactamente as¨ª¡¡±. Talbot se?ala de nuevo la grabadora. ¡°Enciende de nuevo. Graba. Ese tipo es un ser maravilloso y cr¨¦eme, ¨¦l quiere la paz y que termine el genocidio tanto como nosotros. No es justo con ellos creer que, tras eso, ahora nosotros podemos estar del lado bueno y ellos del malo, cuando antes muchos creyeron lo contrario. No hay lados buenos ni malos. Eso s¨ª, ?viva Palestina libre!¡±.
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