¡°Si no soy el ideal de belleza de Hollywood, no me afecta¡±: Lili Taylor, la actriz demasiado rara para triunfar
La considerada reina del cine independiente ha hecho pr¨¢cticamente de todo y todo bien, pero su resistencia a someterse a las reglas de la industria ha evitado que se convierta en aquello que tal vez nunca quiso ser: una estrella
Variety la coron¨® como ¡°la reina del cine independiente¡± y hay un consenso entre la cr¨ªtica al valorar que su presencia mejora cualquier historia. Sin embargo, la carrera de Lili Taylor (Illinois, 57) no est¨¢ a la altura de su talento, tal vez porque, como afirm¨® Isabel Coixet, que la dirigi¨® en Cosas que nunca te dije (1996), ¡°merec¨ªa que las cosas le fuesen mejor, pero igual es demasiado rara para Hollywood¡±. Tambi¨¦n ha influido un f¨ªsico que Hollywood no sabe manejar y el escaso inter¨¦s de ella por ajustarse a los c¨¢nones de la industria. Cuando uno de sus primeros agentes le sugiri¨® que se operase la nariz se neg¨®. ¡°El est¨¢ndar de belleza de Hollywood es muy estricto y si no soy su ideal, no me afecta. Tengo la sensaci¨®n que los chicos que manejan el dinero en este negocio son los mismos chicos que no me encontraban atractiva en la escuela secundaria¡±, declar¨® a Entertainment Weekly.
Esos chicos no tardaron en dejarle claro qu¨¦ papeles le esperaban. En La ¨²ltima apuesta, una de sus primeras pel¨ªculas, la contrataron para interpretar a la chica m¨¢s fea que el protagonista pudiese encontrar. Curiosamente o no, la reina del cine independiente, una actriz que ha trabajado con directores como Robert Altman, John Waters, Abel Ferrara o Jim Jarmusch, jam¨¢s estuvo en la ¨®rbita del supuesto padrino del cine indie, Harvey Weinstein. ¡°Me odiaba. La gente me dec¨ªa que ni siquiera quer¨ªa verme. Nunca pude conseguir un trabajo en Miramax¡±, declar¨® a The Guardian. Cuando salieron a la luz las historias de abuso del productor, ella no se sorprendi¨®: ¡°Siempre supe que era un cerdo, pero no sab¨ªa que era un violador y un abusador en serie¡±.
Ella fue testigo de una supuesta edad de oro del cine independiente, antes de que fuese devorado por las majors y cayese v¨ªctima de la voracidad de los multicines que no dejan espacio para pel¨ªculas que no aseguren taquilla desde el primer fin de semana. A pesar de ser uno de sus rostros m¨¢s reconocibles, no lo idealiza, porque ¡°estaba plagado de sexismo¡±.
No considera que las cosas haya cambiado demasiado. En 2016 escribi¨® un art¨ªculo para Time en el que denunciaba la escasa presencia de mujeres tras las c¨¢maras y c¨®mo ese hecho influ¨ªa en lo poco sustanciosos que eran los papeles femeninos: ¡°Cuando una mujer est¨¢ frente a la c¨¢mara, a menudo est¨¢ parcialmente vestida y aparentemente desempleada.¡± S¨ª ha habido cambios en otros aspectos: hoy es dif¨ªcil que a un actor no le pase factura un caso de acoso, pero no suced¨ªa lo mismo en 1997, cuando el exnovio de Taylor, el actor Michael Rapaport, fue arrestado por acosarla. Se declar¨® culpable y recibi¨® una orden de alejamiento y la obligaci¨®n de asistir a terapia durante un a?o. Una condena que no afect¨® en absoluto a su carrera. El novio polic¨ªa de Phoebe en Friends es uno de los actores m¨¢s prol¨ªficos tanto en cine como en televisi¨®n.
La actriz, generalmente celosa respecto a su vida privada, lo ha mencionado alguna vez: ¡°Aquello fue dif¨ªcil. No me culpo, no es culpa m¨ªa haber elegido a esa persona, pero cuando pas¨® para m¨ª ten¨ªa sentido a nivel psicol¨®gico: me infravaloraba tanto que no sab¨ªa que ten¨ªa derecho a mi privacidad. Eso es una baja autoestima. Desde entonces he tratado de conseguir algo de autoestima, lo cual ha sido bastante dif¨ªcil¡±. Ahora puede ver fotos del actor en la prensa sin que la afecte ¡°y eso es realmente genial, porque hubo momentos en los que sent¨ª que eso no pasar¨ªa nunca. Y s¨ª, las cosas acaban pasando¡±.
Lili Taylor tambi¨¦n ha hablado de sus problemas de salud. Es bipolar, un trastorno que hered¨® de su padre y del que no fue consciente hasta que en 1997 se qued¨® bloqueada en el escenario durante una representaci¨®n de Tres hermanas. ¡°La ¨²nica frase que recordaba era: ¡®Quiero ir a Mosc¨²'. Amy Irving me mir¨® y grit¨®: ¡®?Conseguid una suplente ahora mismo!¡¯. He sufrido, pero la vida ha sido menos dura desde que comenc¨¦ a tomar la medicaci¨®n¡±.
¡°Eres una prisionera¡±
Siempre tuvo claro que quer¨ªa ser actriz y al acabar los estudios se apunt¨® a la academia de teatro, pero la echaron por falta de asistencia. Sobre las tablas demostr¨® que ya sab¨ªa suficiente. Su primer papel relevante le lleg¨® con la historia de tres amigas que trabajan en una pizzer¨ªa. Mystic Pizza (1988) se ha convertido en un peque?o cl¨¢sico y ha cumplido la profec¨ªa que lanz¨® el cr¨ªtico Roger Ebert: ¡°Alg¨²n d¨ªa ser¨¢ conocida por las actrices que participaron en ella antes de convertirse en estrellas¡±. Al lado de Taylor estaba una joven llamada Julia Roberts. Se hicieron amigas y siguieron en contacto. Taylor nunca entendi¨® que aceptase el papel de Pretty woman (1990), una historia que ofrec¨ªa una visi¨®n dulcificada de la prostituci¨®n. ¡°?Est¨¢s bromeando?¡±, le espet¨®. ¡°?Y lo est¨¢n haciendo bonito? Estaba furiosa. Entonces ten¨ªa veintitantos y estaba llena de odio¡±. Volvi¨® a coincidir con Roberts en Pret-¨¤-Porter (1994) de Robert Altman. ¡°Recuerdo que estaba en la parte trasera del auto con ella y los paparazzi nos persegu¨ªan. Ella estaba tirada en el asiento de atr¨¢s. Le dije: ¡®Eres una prisionera¡¯. Ella me mir¨® de reojo y solo asinti¨®¡±.
Pese a que Lili Taylor no sea una estrella de cine, el suyo de un rostro reconocible para cualquiera que haya visto un n¨²mero significativo de pel¨ªculas. Ha participado en pel¨ªculas que son peque?os cl¨¢sicos, como es el caso de Un gran amor (originalmente Say Anything, de 1989). Aunque en Espa?a pas¨® desapercibida, no fue as¨ª en Estados Unidos, donde es un referente del cine adolescente. La imagen de John Cusack sujetando sobre su cabeza un radiocasete en el que suena In your eyes de Peter Gabriel se ha parodiado decenas de veces. Ni el irreverente Deadpool se ha resistido.
Get a load of the #Deadpool photobombs on iTunes Movies. pic.twitter.com/DaveqJUz1e
— Deadpool Movie (@deadpoolmovie) April 28, 2016
Su camino se cruz¨® con el de otro icono del cine independiente, River Phoenix, en La ¨²ltima apuesta, donde fue consciente de los problemas que empezaban a acechar al actor. ¡°Todav¨ªa no se drogaba, s¨®lo beb¨ªa mucho¡±, record¨®. ¡°Le costaba entrar en un papel que era muy dif¨ªcil para ¨¦l porque era radicalmente diferente de lo que ¨¦l era. Era un hippie interpretando a un infante de marina. Le caus¨® mucha incomodidad.¡±
Su primer gran papel protagonista le lleg¨® con Yo dispar¨¦ a Andy Warhol (1996), el mejor ejemplo de lo que para ella fueron los buenos tiempos del cine independiente. La directora Mary Harron pens¨® que era la m¨¢s adecuada para el papel y no hubo imposiciones de los estudios ni sugerencias de los productores de buscar a una estrella m¨¢s taquillera. No era un papel amable, al contrario: interpretaba a Valerie Solanas, la autora del manifiesto SCUM (algo as¨ª como Organizaci¨®n para el Exterminio del Hombre) y que en 1968 le dispar¨® dos tiros a bocajarro a Andy Warhol. ¡°Es uno de mis papeles favoritos, pero tambi¨¦n fue dif¨ªcil porque pon¨ªa el list¨®n muy alto¡±. Gan¨® un merecido Gran Premio del Jurado en el Festival de Cine de Sundance, pero tambi¨¦n tuvo su contrapartida negativa. ¡°Tuve que darme cuenta de que no era personal cuando ese tipo de papel no volvi¨® a aparecer¡±.
En 1999 hizo lo que menos se esperaba: protagonizar una pel¨ªcula comercial de enorme presupuesto y cr¨ªticas desastrosas, la cinta de terror The Haunting. ¡°Intento mantener un equilibrio¡±, justific¨®, ¡°porque generalmente hago una obra de teatro en invierno y eso solo aporta unos quinientos d¨®lares a la semana si tienes suerte. Las pel¨ªculas que me gustan no pagan las facturas¡±.
Es m¨¢s f¨¢cil imaginarla en el rodaje de The addiction (1995), la historia de vampiros l¨¢nguidos de Abel Ferrara, o integrada en la troupe de Isabel Coixet en la deliciosa Cosas que nunca te dije, la segunda pel¨ªcula de la realizadora catalana. La Ann que graba las cosas que nunca le dijo al novio que la acaba de abandonar, que trata de suicidarse infructuosamente y que se desarma en un supermercado ante la falta de Chocolate Chocolate Chip (no, el Cappuccino Commotion no es lo mismo) es una de las mejores interpretaciones de su carrera y nadie que la haya visto puede evitar recordarla al entrar en una lavander¨ªa.
Hay papeles que se le escaparon: durante a?os intent¨® sacar adelante un biopic sobre Janis Joplin. Es dif¨ªcil pensar en una actriz que hubiese sido m¨¢s indicada para interpretarla, pero nunca encontr¨® financiaci¨®n. Que los nombres que sonaron posteriormente para protagonizar el proyecto fuesen los de Michelle Williams y Amy Adams explica muchas cosas sobre los papeles femeninos en el cine.
Taylor no se autoenga?a, sabe que el f¨ªsico ha sido determinante en su carrera y tambi¨¦n en la del resto de las actrices de una industria que tiene problemas con algo tan natural como el envejecimiento de las mujeres. ¡°Es un gran problema¡± ha reconocido. ¡°Est¨¢ llegando al punto en el que me pregunto si vamos a saber c¨®mo es una mujer mayor. Es realmente molesto y perturbador para m¨ª en muchos niveles. En 10 o 15 a?os va a ser muy aterrador porque entonces vamos a ver qu¨¦ pasa despu¨¦s de que te hayas sometido a toda esta cirug¨ªa pl¨¢stica. Todos sabemos que no mejora, que solo empeora¡±. Taylor siempre ha afirmado que no se someter¨¢ a cirug¨ªa, y por ahora parece haberlo cumplido. ¡°Cuando miras a alguien como Diane Keaton, tan hermosa, dices: ?guau! ?Una mujer con arrugas! Necesitamos actrices as¨ª para que una mujer pueda decir: tengo arrugas y soy normal¡±.
Taylor ha encontrado en la televisi¨®n la posibilidad de desarrollar personajes en profundidad. En A dos metros bajo tierra interpret¨® a la esquiva y oscura Lisa Fischer, tal vez uno de sus papeles m¨¢s populares. Tambi¨¦n la vimos en Expediente X y su paso por la antolog¨ªa American Crime hizo que todo el mundo se preguntase por qu¨¦ no hac¨ªa m¨¢s cine. Volver¨¢ en la segunda temporada de la intrigante Outer Range y este mes ha llegado a Apple TV como Mary Todd Lincoln en Manhunt, la serie sobre el asesinato de Abraham Lincoln.
Su rostro es uno de los m¨¢s conocidos entre los desconocidos, lo que le permite llevar una vida moderadamente relajada. Est¨¢ casada con el escritor Nick Flynn y tienen una hija, con la que acude a partidos de f¨²tbol o a observar p¨¢jaros en Central Park. Lo de la ornitolog¨ªa es algo m¨¢s que un hobbie: lleva a todos los rodajes sus binoculares de 600 euros, escribe sobre el tema y forma parte de la Asociaci¨®n Americana de Aves y de varios grupos de avistamiento y de conservaci¨®n. Una capa m¨¢s de una actriz excepcional que result¨® ¡°demasiado rara para Hollywood¡±.
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