Ai Weiwei: ¡°El capitalismo ha llegado a su fin¡±
El artista chino m¨¢s importante, c¨¦lebre disidente del r¨¦gimen comunista, critica la gesti¨®n de su pa¨ªs de la pandemia: ¡°Si este desastre pudo expandirse, se debe en gran parte a que se ocult¨® la verdad¡±
Ai Weiwei es uno de los disidentes chinos que m¨¢s ha hecho por denunciar la falta de derechos humanos que impera en el mundo, as¨ª como el da?o que la falta de libertad de expresi¨®n causa en China. El artista vivo m¨¢s importante del pa¨ªs asi¨¢tico encabeza el ranking mundial de autores que m¨¢s visitantes atraen a los museos: el a?o pasado 1,1 millones de personas asistieron a una de sus exposiciones itinerantes en Brasil, por encima de Van Gogh, Klimt o Munch.
La relaci¨®n entre Ai Weiwei y el Partido Comunista Chino fue durante a?os como la del perro y el gato. Tras estar detenido durante 81 d¨ªas acusado de evasi¨®n fiscal, el artista, al volver a su casa, respondi¨® a la vigilancia a la que era sometido retransmitiendo su vida a modo de protesta. En 2015, finalmente, abandon¨® su pa¨ªs y ha recalado en Cambridge, Inglaterra. En estos momentos est¨¢ confinado, aunque esta vez comparte los motivos. Ai Weiwei (Pek¨ªn, 1957) habla con Ideas acerca de la crisis mundial sin precedentes que ha provocado la Covid-19. Se?ala el v¨ªnculo entre los desastres que azotan al planeta y la falta de valores humanistas durante una entrevista que empieza por tel¨¦fono y termina por correo electr¨®nico. Son temas clave en su obra y los enarbola con vehemencia. Quiz¨¢ sean las experiencias de su infancia las que han forjado su car¨¢cter cr¨ªtico: acompa?aba a su padre, el poeta Ai Qing, a realizar trabajos forzados en el campo y a limpiar letrinas como castigo por sus cr¨ªticas al Partido Comunista. Lo m¨¢s probable es que no pueda regresar a su pa¨ªs. Acusa al Gobierno de haber destruido su estudio de Pek¨ªn sin previo aviso. Acaba de publicar un libro de aforismos en Espa?a: Humanidad (Paid¨®s, febrero de 2020).
PREGUNTA.?El llamado coronavirus est¨¢ azotando al mundo como si fuera una gran tormenta, cambiando nuestra manera de interactuar y vivir. ?C¨®mo ve lo que estamos experimentando?
RESPUESTA.?La epidemia lleg¨® repentinamente, nadie estaba preparado para esto. Se dice que es un virus muy democr¨¢tico porque ataca a todos por igual. Los desastres que hemos visto antes, incluyendo las guerras, eran de car¨¢cter regional. Esta es la primera vez que me topo con un desastre con car¨¢cter global.
P.?El virus ha desatado olas de racismo. El presidente de Estados Unidos ha llegado a llamarlo el ¡°virus chino¡±. ?Usted qu¨¦ piensa de esto?
R.?No es extra?o nombrar un virus bas¨¢ndose en su lugar de origen. Es como una persona, puede tener un nombre y un apodo. Covid-19 ser¨ªa su nombre oficial. No creo que exista discriminaci¨®n racial en este tema. Adem¨¢s, todas las culturas tienen un grado de prejuicio hacia otras. Mientras estos prejuicios no da?en la dignidad nacional o la de los individuos, no creo que sea un problema. Lo grave es que el virus brot¨® y se propag¨® debido a la falta de transparencia del Gobierno chino. La p¨¦rdida de vidas global ha sido enorme. Por ello, no veo mal que se le llame ¡°virus chino¡±. Espero que llamarle as¨ª sirva para que ciudadanos y pol¨ªticos chinos se den cuenta de que la ¨²nica manera de contar con un mundo justo y seguro es garantizando la libertad de expresi¨®n.
P.??Qu¨¦ rol ha desempe?ado la libertad de expresi¨®n en la propagaci¨®n del virus en China y luego en el mundo?
R.?Ha habido tantos desastres en China, cada uno de ellos ha estado vincu?lado a una coerci¨®n de la libertad de expresi¨®n. Su falta es en s¨ª un desastre humanitario. Es harto conocido. De lo contrario, no me habr¨ªa quedado en el extranjero. La libertad de expresi¨®n es como un virus, y puede ser ofensivo para algunos organismos. El Partido Comunista Chino es una organizaci¨®n m¨¢s fuerte que cualquier otra en el mundo y ejerce su autoridad a trav¨¦s del control del pensamiento y el discurso de las personas. Si este desastre pudo expandirse se debe en gran parte a que China ocult¨® la verdad. La Organizaci¨®n Mundial de la Salud fue part¨ªcipe de esto al restarle gravedad y magnitud al problema, negando que estuvi¨¦ramos frente a una epidemia.
¡°Los refugiados confinados en campamentos de los que no pueden moverse deber¨ªan recibir ayuda prioritaria¡±
P.?El Gobierno chino est¨¢ acudiendo en ayuda de muchos pa¨ªses, donando mascarillas y material m¨¦dico. ?Qu¨¦ piensa de esta estrategia?
R.?China, al encarar un desastre, en vez de asumir sus responsabilidades, hace intercambios de favores pol¨ªticos, politizando los principios humanitarios. Se est¨¢ distorsionando el esp¨ªritu humanitario. Y me refiero tambi¨¦n a todos los ni?os en campos de refugiados. No pueden moverse, est¨¢n confinados en campamentos, deber¨ªan recibir ayuda prioritaria, y a?ado a los presos. Ir¨¢n ha ordenado la liberaci¨®n de los suyos mientras dure el virus, pero sigue siendo un pa¨ªs sancionado por Estados Unidos. Cuando la ideolog¨ªa y la animosidad pol¨ªtica obstruyen la soluci¨®n de los desastres humanitarios puede considerarse un delito. En la actualidad, ning¨²n pa¨ªs puede condenar a otro, el mundo est¨¢ en el caos. ?Por qu¨¦ el Reino Unido no libera a Assange? Es una figura clave en la libertad de prensa y de expresi¨®n; sin embargo, ahora tiene que enfrentarse a una posible extradici¨®n a Estados Unidos y a una pena de hasta 175 a?os. Mantener una coherencia ¨¦tica no es f¨¢cil, las personas solo perciben los desastres que afectan a sus regiones, pero los desastres est¨¢n interconectados.
P.?Se debate en estos momentos si, para hacer cara a la crisis, la democracia es menos eficiente que un sistema autoritario. ?Qu¨¦ opina usted?
R. Visto desde la superficie, China ha logrado controlar r¨¢pidamente la epidemia. Pero ha pagado un precio que no es visible: la salud emocional de toda su gente, a quienes encerraron en jaulas como animales, obligados a la fuerza a estar confinados durante m¨¢s de dos meses. Una sociedad que vive bajo un r¨¦gimen autoritario funciona como un ej¨¦rcito y las personas son como animales cautivos. Despu¨¦s de haber vivido bajo fuerte control por m¨¢s de 70 a?os, han perdido el valor de rebelarse. Si Occidente cree que mantener esta situaci¨®n es beneficioso, se deber¨¢ a la estupidez o a motivos subrepticios. A muchos les interesa hacer negocios con China. Basta con negar la existencia de Taiw¨¢n y no relacionarse con el Dal¨¢i Lama.
P.?Se dice que la gente de pa¨ªses como Corea del Sur, Jap¨®n o China es m¨¢s sumisa. Que el confucionismo ha hecho que los individuos acaten mejor las ¨®rdenes.
R.?Si realmente se practicara el pensamiento de Confucio, el r¨¦gimen no ser¨ªa tan violento. Los chinos no somos nada sumisos. No hay m¨¢s que ver c¨®mo tratamos a los animales o la brutalidad de ciertos cr¨ªmenes. El Gobierno tampoco es d¨®cil con su pueblo. Promueve esa imagen para guardar las apariencias.
¡°Los chinos no somos nada sumisos, no hay m¨¢s que ver c¨®mo tratamos a los animales o la brutalidad de ciertos cr¨ªmenes¡±
P. ?Qu¨¦ piensa del modelo chino? ?Est¨¢ en crisis?
R.?[El Estado chino] es un grupo de inter¨¦s que se ha hecho cada vez m¨¢s fuerte con la introducci¨®n del capital, se ha convertido en capitalismo de Estado. La libre competencia y la econom¨ªa de mercado bajo la premisa de la libertad individual no existen, todo est¨¢ bajo el control del Partido. Occidente ha perdido su ventaja competitiva, se ha topado con un competidor poderoso e incontrolable porque desobedece las reglas. Lo que est¨¢ sucediendo es una gran lecci¨®n, pero ?podemos aprender de esta lecci¨®n? Nos movemos por intereses. Emprendemos proyectos solo cuando nos traen beneficios, olvid¨¢ndonos de los principios. Europa y Estados Unidos han apoyado al r¨¦gimen chino, han hecho caso omiso al asesinato de un periodista en una embajada de Arabia Saud¨ª con sede en Turqu¨ªa. Cuando uno permite la impunidad, pierde el derecho de hablar sobre lo que es justo o injusto. Si Occidente se deja guiar solo por los beneficios o los intereses, cuando sufra p¨¦rdidas se lo tendr¨¢ bien merecido.
P.??Considera que el capitalismo est¨¢ en crisis?
R.?El capitalismo ha llegado a su fin. No puede continuar desarroll¨¢ndose moral y ¨¦ticamente. Hace da?o a las naciones peque?as, se apodera de los recursos del planeta, saquea sin freno. China alimenta los intereses de las grandes empresas occidentales y estas han hecho que China sea cada vez m¨¢s poderosa. Estas compa?¨ªas no est¨¢n restringidas por ning¨²n Estado, naci¨®n o cultura. China est¨¢ dispuesta a hacer cosas que no se pueden hacer en Occidente. La globalizaci¨®n se est¨¢ llevando a cabo sobre la base del desarrollo del capitalismo y el colonialismo. La crisis subyacente es palpable, y los desastres por venir ocurrir¨¢n m¨¢s de una vez. ?C¨®mo lograr el desarrollo libre de un pa¨ªs de 1.400 millones de personas bajo un r¨¦gimen autoritario? El desarrollo de una sociedad depende de la legitimidad de sus Gobiernos. Y despu¨¦s de 70 a?os en el Gobierno, el partido no ha resuelto a¨²n este problema. Esta es la verdadera crisis a la que se enfrenta China.
P.?Muchos pa¨ªses han cerrado sus fronteras, incluso se empieza a cuestionar la globalizaci¨®n: se le achaca la rapidez con la que se ha desplazado el virus. ?C¨®mo ve usted esto?
R.?Si Estados Unidos construye un muro que lo separe de M¨¦xico, ?d¨®nde est¨¢ entonces la liberalizaci¨®n y la globalizaci¨®n? Para el capital no existen barreras, el capital circula libremente en el mundo. El sue?o de la globalizaci¨®n es resolverlo todo con dinero. Los refugiados llegaron a tierras europeas y se les trat¨® peor que a prisioneros. ?Acaso abandonaron sus hogares voluntariamente? Los desastres no se detendr¨¢n, vendr¨¢n uno tras otro, porque los humanos hemos violado demasiados principios morales.
P.?Usted sabe lo que es estar confinado. Lo vivi¨® a la fuerza en China. ?Est¨¢ usted acostumbrado al aislamiento? ?Qu¨¦ hace Ai Weiwei confinado en casa?
R.?Entiendo al aislamiento, es una medida que responde a la desconfianza de las personas hacia el orden social existente. La libertad individual solo puede basarse en la confianza p¨²blica. Personalmente, no me afecta en nada. Paso m¨¢s tiempo con mi familia, lo cual es una raz¨®n de alegr¨ªa. Me permite reflexionar sobre los temas que generalmente me interesan. Pienso mucho en el humanismo, mi ¨²ltimo libro se titula Humanidad. Este desastre nos ha hecho comprobar que en este mundo ya no existen regiones ni una libertad regional. Esta epidemia nos ha alertado de que el enriquecimiento de grupos empresariales o regionales a trav¨¦s de la globalizaci¨®n debe cesar. Y si no, las desgracias por venir ser¨¢n a¨²n mayores.
¡°Es mi tierra, mi idioma, pero mientras China sea solo un concepto pol¨ªtico, no tengo ning¨²n deseo de regresar¡±
P.??Qu¨¦ echa de menos de China? ?Podr¨ªa regresar a su pa¨ªs o se encuentra en estado de exilio absoluto?
R.?No puedo regresar, me es imposible expresar mis opiniones all¨ª. La expresi¨®n es vital para la creaci¨®n. No poder hacerlo es como perder la vida. No tengo nostalgia. Echo de menos a mi madre, a mis hermanos. Es mi tierra, me es familiar. Es mi idioma y tengo amigos all¨ª. Pero, mientras China sea solo un concepto pol¨ªtico, no tengo ning¨²n deseo de regresar.
P.??C¨®mo ha impactado su infancia en su arte? Estuvo marcada por las experiencias de su padre, que fue enviado a trabajar al campo durante la revoluci¨®n cultural, donde limpi¨® ba?os, vivi¨® en hoyos excavados en el suelo.
R.?Los recuerdos de la infancia nos marcan, es como cuando un ¨¢rbol crece, siempre estar¨¢ ligado a sus ra¨ªces. Es innegable que mi capital vivencial est¨¢ vinculado a las experiencias de la generaci¨®n de mi padre. Todo aquello me ayud¨® a comprender mejor el valor de lo humano y la importancia de preservar la vida. ?Cu¨¢l es el significado de los derechos humanos? Es una pregunta que me hago constantemente. Y este tema ha influido en mis obras. Mi vida es una obra: mi vida y la vida misma.
M¨¢s represi¨®n
La censura a los disidentes se ha intensificado con la crisis del coronavirus. Xu Zhiyong, acad¨¦mico cr¨ªtico con el Gobierno, fue detenido el 15 de febrero en el sur de China despu¨¦s de asistir a una reuni¨®n con activistas. Est¨¢ en paradero desconocido, investigado por ¡°incitaci¨®n a subvertir el poder del Estado¡±. Fundador del movimiento Nuevos Ciudadanos, public¨® un art¨ªculo a principios de febrero alegando que Xi, el presidente de China, era ¡°incapaz de manejar¡± la crisis del coronavirus. La doctora Ai Fen, directora de emergencias en el hospital central de Wuhan, figura que particip¨® en las alertas lanzadas sobre el brote cuando el Partido Comunista Chino (PCCh) estaba desesperado por ocultarlo, tambi¨¦n ha dejado de hacer declaraciones.
¡°Las redes sociales est¨¢n siendo sujetas a un mayor escrutinio, la polic¨ªa nos ha visitado por comentarios que hicimos en grupos de chat de Internet¡±, declara una escritora disidente residente en Pek¨ªn que pidi¨® mantener el anonimato.
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