La era de los museos activistas. Hay que ir m¨¢s all¨¢ del almac¨¦n de arte
El modelo prepand¨¦mico del arte apostaba por el turismo. Ahora, con falta de fondos y de p¨²blico, se apuesta por lo local y por su potencial como instrumento transformador
La luz turquesa que cubre la escena con Cleopatra muerta en sus aposentos va a salir de la oscuridad. Ser¨¢ la primera vez que se exhiba en el recorrido permanente del Museo del Prado una muestra de la amplia colecci¨®n filipina, una treintena de cuadros que saldr¨¢n de los almacenes como parte de una reordenaci¨®n de colecciones sin precedentes. Se rectificar¨¢ el silencio que cubr¨ªa la pintura social y pol¨ªtica del siglo XIX, el arte de las colonias de ultramar del mismo siglo, as¨ª como el magisterio art¨ªstico de las mujeres. Si nada cambia, antes del verano podr¨¢ verse por primera vez en sala Cleopatra, el espl¨¦ndido lienzo con el que Juan Luna y Novicio (Badoc, Islas Filipinas, 1857-Hong-Kong, 1899), un artista de ¨¦xito comercial internacional, fue premiado con una medalla de segunda clase en la Exposici¨®n Nacional de 1881. La salida de este artista espa?ol m¨¢s all¨¢ de Espa?a rompe con el canon nacionalista y colonialista que se ha mantenido como criterio fundacional en los museos de Bellas Artes internacionales desde su creaci¨®n, hace m¨¢s de dos siglos.
Tambi¨¦n abandonar¨¢ los s¨®tanos Una huelga de obreros de Vizcaya (1892), obra de Vicente Cutanda ignorada por el museo y que supone un gui?o a la clase trabajadora. Es este un gesto con el que pretende resultar m¨¢s cercano y accesible, menos elitista.
Con la exposici¨®n Invitadas del a?o pasado, en la que se revis¨® la figura de la mujer a finales del siglo XIX, el Prado ha llegado a un p¨²blico que, hasta ahora, no se sent¨ªa representado en el museo. Este y otros museos empiezan a responder as¨ª a las demandas de una comunidad que quiere participar. En el horizonte aparecen museos m¨¢s inclusivos y polif¨®nicos, destinados al di¨¢logo cr¨ªtico sobre el pasado y el futuro, capaces de escuchar, reconocer y abordar los conflictos y desaf¨ªos de la ciudadan¨ªa. Ser¨¢ bienvenida cualquier estrategia que rompa el aislamiento en el que se hab¨ªan instalado.
La colaboraci¨®n y la conversaci¨®n con la ciudadan¨ªa es m¨¢s urgente que nunca porque los espacios art¨ªsticos quieren ser relevantes. Una mayor transparencia, igualdad y diversidad pueden contribuir a ello. ¡°Profundizar la relaci¨®n con la comunidad significa aumentar la sostenibilidad del museo en el futuro¡±, asegura Julia Pagel, Secretaria General de Red Europea de Organizaciones de Museos (NEMO, por sus siglas en ingl¨¦s). El 70% de 600 museos encuestados reconoce que sufrir¨¢ recortes en las aportaciones p¨²blicas a sus presupuestos anuales, seg¨²n un informe de hace unos d¨ªas publicado por esta asociaci¨®n. Y m¨¢s del 40% cree que no recuperar¨¢ la antigua normalidad antes del verano de 2022. El anuncio del Metropolitan de Nueva York, avisando de que vender¨¢ fondos para reducir el d¨¦ficit de ingresos (que estima en 125 millones de euros), termin¨® de confirmar que estos templos de la cultura atraviesan la era m¨¢s complicada desde su creaci¨®n, a finales del siglo XVIII. Desaparecen los ingresos de taquilla, toca reinventarse.
La definici¨®n del Consejo Internacional de Museos (ICOM) dice que los museos est¨¢n al servicio de la sociedad. Ahora, m¨¢s. El modelo prepand¨¦mico apostaba por el turismo. La alternativa es hacerlos m¨¢s accesibles al entorno m¨¢s pr¨®ximo. Los museos necesitan abrirse pol¨ªticamente, descentrar su sujeto hegem¨®nico, ser despatriarcalizados y descolonizados. Y deben ser los p¨²blicos quienes intervengan en esta construcci¨®n, desde dentro, como agentes activos que defiendan la representaci¨®n de minor¨ªas pol¨ªticas. El camino de la participaci¨®n comunitaria excede el control institucional y recala en la incertidumbre al abrirlos al debate y la cr¨ªtica. Pagel reclama que sean los curadores, los artistas y los p¨²blicos los que imaginen juntos la nueva instituci¨®n. As¨ª sucedi¨® con el resurgimiento en el Prado de El Cid, de Rosa Bonheur, cuadro que sali¨® de los almacenes por petici¨®n popular v¨ªa Twitter.
Como se?ala el manifiesto para el aprendizaje y la participaci¨®n en los museos, publicado hace unas semanas por la Asociaci¨®n de Museos (MA, por sus siglas en ingl¨¦s), es el momento de una ¡°innovaci¨®n social radical¡±. La organizaci¨®n recoge las inquietudes de los profesionales de estas instituciones en el Reino Unido y explica que las artes y la cultura han tenido un papel menor en el proceso de renovaci¨®n civil y cambio social. Es momento de comprometerse con la reconstrucci¨®n de nuestras sociedades. El asesinato de George Floyd y la reacci¨®n del movimiento Black Lives Matter, indica la MA, han puesto al descubierto el racismo que todav¨ªa afecta a la sociedad y a los museos, donde las exposiciones no representan la diversidad de la sociedad del siglo XXI.
En ese manifiesto se pide museos ¡°valientes y desafiantes¡±, es decir, ¡°activistas¡±, por ejemplo, en la narraci¨®n y lectura de sus colecciones. Que se posicionen contra el racismo, el machismo o el cambio clim¨¢tico. Porque ¡°los museos no son neutrales¡±, sostienen. La MA tiene en marcha una campa?a Los museos cambian vidas, en todo el Reino Unido, con la que crean espacios de reflexi¨®n, debate y compromiso a partir de las preguntas de nuestros d¨ªas. El objetivo es escuchar lo que necesitan las comunidades y ayudarlas a lograrlo. Aseguran que los museos aumentan la sensaci¨®n de bienestar gracias a la inspiraci¨®n, desaf¨ªo y estimulaci¨®n que promueven. ¡°Existen claras evidencias de que los museos pueden mejorar la salud y el bienestar de las personas si se les da voz en lo que sucede en las salas¡±, indica v¨ªa correo electr¨®nico Sharon Heal, directora de la MA.
En este paso de ruptura con el modelo decimon¨®nico, la incorporaci¨®n de la voz de la mujer es esencial. En el Reino Unido, una red de feministas en museos llamada Museum Space Invaders promueve un manifiesto de tres puntos: igualdad de poder e influencia (m¨¢s mujeres en las direcciones), condiciones laborales justas y representaci¨®n real de las mujeres en las colecciones y las narrativas de las historias
La idea del museo que conserva y custodia queda atr¨¢s y es superada por la actividad social. El reto es potenciar su papel como instrumento cultural transformador, que deje de ser un mero almac¨¦n seguro que cuida de nuestro patrimonio. ¡°Garantizar que los museos reflejen de forma precisa y accesible las comunidades a las que sirven es primordial para reforzar su posici¨®n como actores en la creaci¨®n de un tejido social fuerte y sostenible. Su labor es importante en la erradicaci¨®n de los prejuicios y las desigualdades¡±, explica Alberto Garlandini, presidente del ICOM (asesores de Unesco). El responsable de ICOM subraya que estos centros son proveedores de informaci¨®n, creadores de contenidos y comunicadores del conocimiento, as¨ª que tienen ¡°responsabilidad clave en la lucha contra la desinformaci¨®n¡±. Los imagina convertidos en referentes capaces de hacer frente a la desinformaci¨®n, de neutralizar los prejuicios de los antivacunas o el escepticismo sobre el cambio clim¨¢tico.
El museo que est¨¢ por construirse quiere erradicar prejuicios, adem¨¢s de desigualdades. Crecer¨¢ como centro de comunicaci¨®n y educaci¨®n. Ahora falta la participaci¨®n, que los p¨²blicos sean escuchados. Pero esto no se resuelve con directos en Instagram.
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