Derechas, izquierdas y pueblos ind¨ªgenas

En el libro M¨¦xico racista. Una denuncia, el historiador Federico Navarrete habla de Manuel Lozada, el famoso Tigre de ?lica, quien comand¨® un ej¨¦rcito mayormente integrado por ind¨ªgenas coras y tambi¨¦n poblaci¨®n mestiza que, entre 1855 y 1870, tuvo el control de una regi¨®n del occidente mexicano. Estas comunidades se opon¨ªan a las leyes liberales que los despojaban de las tierras que hist¨®ricamente hab¨ªan tenido en propiedad comunal. En ese contexto, liberales y conservadores peleaban por el control del pa¨ªs y estos ¨²ltimos hab¨ªan logrado traer a Maximiliano de Habsburgo a gobernar M¨¦xico estableciendo lo que ha llamado el Segundo Imperio Mexicano. En la historia nacionalista, los liberales son identificados con la izquierda y los conservadores con la derecha. ?Por qu¨¦ entonces el ej¨¦rcito y las comunidades que luchaban con Manuel Lozada contra el despojo de sus tierras se aliaron a Maximiliano?

La defensa de los derechos ind¨ªgenas se ha identificado siempre con la izquierda, sin embargo, un acercamiento m¨¢s profundo nos comienza a develar que esta afirmaci¨®n tiene sus complejidades a considerar. En principio, categor¨ªas como izquierda y derecha no son tan sencillas de definir. Por ejemplo, para ciertas personas el anarquismo es claramente identificado con la izquierda mientras que para otras personas juega fuera del espectro izquierda-derecha. En algunos contextos, las guerrillas son identificadas con la izquierda como tambi¨¦n lo son algunos partidos pol¨ªticos aunque sus m¨¦todos y formas sean muy distintos. La derecha tambi¨¦n es un entramado complejo y como sucede con la izquierda ir¨¢n cambiando sus manifestaciones seg¨²n el periodo hist¨®rico. Dentro de esta complejidad, lo que es verdad es que estas categor¨ªas surgieron y se desarrollaron dentro de cierta tradici¨®n espec¨ªfica, dentro del Estado moderno y no dentro de la historia pol¨ªtica y de pensamiento de los pueblos ind¨ªgenas.

Como dice el poeta guaran¨ª El¨ªas Caurey, para los pueblos ind¨ªgenas ¡°el Estado es el gran otro¡±. Esto no quiere decir que en muchas ocasiones no se establezcan alianzas que luego pueden tener sus l¨ªmites o que no haya individuos de pueblos ind¨ªgenas o colectividades que se adscriban y operen dentro de ese espectro. No es posible negar, por ejemplo, el gran respaldo y cobijo de la izquierda mexicana al Ej¨¦rcito Zapatista de Liberaci¨®n Nacional, sobre todo en los d¨ªas cruciales en los que hubo que evitar mayores masacres, pero con el tiempo, cuando el EZLN comenz¨® un proceso auton¨®mico que se alej¨® de las din¨¢micas del Estado, una gran parte de esa misma izquierda, sobre todo la partidista, acus¨® al EZLN de hacer el juego a la derecha e incluso de ser producto de ella.

Tradicionalmente se asume que, si dices que no eres ni de izquierda ni de derecha, es que eres de derecha, pero en el caso de los pueblos ind¨ªgenas es importante entender que nuestras tradiciones y estructuras sociopol¨ªticas no pueden ni deben leerse solo dentro de ese espectro. El movimiento encabezado por Manuel Lozada hizo una alianza moment¨¢nea con Maximiliano porque era necesaria para defender la tierra que las leyes liberales les estaban despojando y no porque la poblaci¨®n cora se identificara con el bando conservador. Si leemos en clave izquierda-derecha, este movimiento se uni¨® al bando conservador, si analizamos sus luchas pol¨ªticas desde su propia historia y tradici¨®n lo que hicieron fue defender su territorio como lo hab¨ªan hecho por siglos.

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