¡°Si pudi¨¦ramos cambiar el pasado...¡±. As¨ª escribe Zelenski en un libro que re¨²ne sus discursos
¡®Ideas¡¯ adelanta un texto escrito por el presidente de Ucrania, pr¨®logo de un compendio de 16 alocuciones. En varias anima a Ucrania a llegar hasta la ¡°victoria¡±
Ser¨ªa la persona m¨¢s feliz del mundo si el libro que tienes en las manos nunca se hubiera publicado. Si los discursos que pronunci¨¦ despu¨¦s del 24 de febrero de 2022 nunca se hubieran escrito ni dicho y si los que di despu¨¦s de la invasi¨®n nunca se hubieran escuchado ni le¨ªdo.
S¨¦ que es brusco empezar as¨ª esta introducci¨®n. En el caso de la gran mayor¨ªa de los libros, lo ser¨ªa demasiado. Este es la excepci¨®n. No escribo estas palabras para tratar de llamar la atenci¨®n ni para hacerme famoso. El motivo por el que necesito que me prest¨¦is atenci¨®n es demasiado doloroso; el precio de la ¡°fama¡±, demasiado alto. Es la guerra que se ha desatado contra Ucrania. Son los miles de vidas que se ha llevado Rusia.
Si pudi¨¦ramos cambiar el pasado¡ hay tantas cosas a las que renunciar¨ªa sin pensarlo. El aplauso y la admiraci¨®n de pa¨ªses de todo el mundo. Preferir¨ªa que cuando la gente oyera el nombre de Zelenski, preguntara: ¡°?Qui¨¦n?¡±. Me gustar¨ªa no haber o¨ªdo nunca la ovaci¨®n del Congreso de Estados Unidos, de la Casa de los Comunes brit¨¢nica o del Parlamento Europeo, y que Ucrania no hubiera escuchado nunca el ruido de las explosiones ni los disparos que se han producido en nuestra patria.
Si pudi¨¦ramos cambiar el pasado¡ preferir¨ªa que no fuese mi cara la que aparece en la portada de Time, sino la de un m¨¦dico dedicado a encontrar una cura para el c¨¢ncer; que las listas de las personas m¨¢s influyentes del mundo no se centraran en los pol¨ªticos, sino en los cient¨ªficos que exploran caminos para terminar con el hambre y con el calentamiento global, con la guerra qu¨ªmica y biol¨®gica, incluso con la amenaza nuclear a la que se enfrenta el planeta.
Si pudi¨¦ramos cambiar el pasado¡ renunciar¨ªa a todas las menciones que se han hecho de mi nombre en la prensa mundial, a todas las veces que se han compartido mis publicaciones en redes sociales. A mi coraz¨®n no le importa si consigo seguidores nuevos en Instagram y Facebook; todo lo que siento es c¨®mo se me parte de dolor por los miles de personas asesinadas en Bucha e Izium, por todos los ucranianos fallecidos.
Suponiendo que vivas en el planeta Tierra, seguramente sabr¨¢s lo que ha estado ocurriendo en Ucrania durante los ¨²ltimos ocho a?os. Suponiendo que est¨¦s en tus cabales ¡ªque tienes lucidez mental y un coraz¨®n emp¨¢tico¡ª, ya sabr¨¢s la importancia que tiene la fecha del 24 de febrero de 2022.
Quiz¨¢ entiendas por qu¨¦ escribir ¡°fr¡± con min¨²scula es, cuando menos, justo [federaci¨®n rusa; el Gobierno ucraniano no escribe con may¨²scula inicial el nombre de Rusia porque considera que si lo hiciera le estar¨ªa concediendo una legitimidad pol¨ªtica indebida]. Tal vez hasta comprendas por qu¨¦ he empezado la introducci¨®n de esta forma: abrupta, intensa, disonante.
As¨ª son los tiempos en los que se ha escrito. As¨ª es la guerra en la que se han pronunciado estas palabras. Tienes raz¨®n. En la gran mayor¨ªa de los libros, este comienzo habr¨ªa sido demasiado. Este libro es la excepci¨®n.
Pero este no es un libro que trate de lo incapaces que somos de cambiar el pasado. Trata de c¨®mo podemos construir el futuro. Y de c¨®mo Ucrania y su pueblo ya lo est¨¢n haciendo.
Este proceso no empez¨® el 24 de febrero. Ucrania no apareci¨® en el mapa del mundo a principios de 2022. Los ucranianos no nacieron en el momento de la invasi¨®n de la fr. Fuimos, somos y seremos; hemos existido, existimos y seguiremos existiendo. Y, por m¨¢s que agradezcamos la ayuda, el apoyo y la atenci¨®n que nos ha brindado el mundo, no hay que empezar a dar por sentada la valent¨ªa de nuestro pueblo. La guerra no debe convertirse en algo normal.
No te olvides de Ucrania. No te canses de Ucrania. No dejes que nuestra valent¨ªa ¡°pase de moda¡±.
Sobre todo, escuche nuestro mensaje: es el mismo que reson¨® fuerte y claro el d¨ªa de nuestra Independencia este a?o [el pasado 24 de agosto], y resonar¨¢ hasta que el ¨²ltimo soldado de ¡°fr¡± abandone nuestro territorio. ¡®?Qu¨¦ traer¨¢ el final de la guerra? Sol¨ªamos decir ¡°paz¡±. Ahora decimos ¡°victoria¡±.
Primer y ¨²ltimo discurso
¡°No somos los que empezamos esta guerra, pero somos quienes debemos terminarla. Y estamos preparados para dialogar con ese objetivo.
?Qu¨¦ ser¨¢ lo que traiga el fin de la guerra? Antes dec¨ªamos: ¡®La paz¡¯. Ahora decimos: ¡®La victoria¡±.
Estas palabras est¨¢n extra¨ªdas del primer discurso y del ¨²ltimo que recojo. Los separan tres a?os y tres meses: desde el 20 de mayo de 2019 hasta el 24 de agosto de 2022. Este es el periodo de la historia de Ucrania por el que te voy a guiar. Este es el camino que hemos recorrido como naci¨®n.
Las palabras anteriores describen sucintamente c¨®mo he cambiado, c¨®mo lo han hecho mi equipo y mi pueblo. No quer¨ªamos la guerra. Hicimos todo lo posible para evitarla. Estuve pronunciando palabras en ese sentido desde que jur¨¦ el cargo de presidente hasta las horas previas a la invasi¨®n rusa.
Cada vez que la ¡°fr¡± prend¨ªa fuego al polvor¨ªn, nosotros lo apag¨¢bamos. No respondimos a sus provocaciones ni emprendimos ninguna acci¨®n cuando violaron todos y cada uno de los acuerdos a los que hab¨ªamos llegado los dos pa¨ªses. Siempre hemos dirigido nuestros esfuerzos hacia la paz, siempre hemos confiado en la diplomacia, siempre hemos pedido dialogar y negociar.
A las cuatro en punto de la madrugada del 24 de febrero recibimos la respuesta de la ¡°fr¡±. Sus acciones la dejaban clara. Quer¨ªan destruir Ucrania, borrarnos de la faz de la tierra como Estado y como pueblo.
No era la primera vez, por supuesto, que los ucranianos o¨ªan esa respuesta. Muchos invasores la han pronunciado a lo largo de muchas ¨¦pocas y en muchas lenguas. Y para todos termin¨® de la misma manera. Al final, todos los ej¨¦rcitos invasores huyeron de vuelta por la frontera que hab¨ªan cometido el error de cruzar. Abandonaron las armas y los pertrechos a toda prisa y salieron de nuestro pa¨ªs a duras penas.
Esto es lo que han hecho tambi¨¦n las fuerzas de la ¡°fr¡±. Maldijeron el d¨ªa en que pusieron un pie en nuestra tierra y vieron c¨®mo el amable y tranquilo pueblo de Ucrania se convert¨ªa en un le¨®n dispuesto a destrozar a cualquier enemigo.
Han presenciado c¨®mo unas personas afables y hospitalarias se han convertido en guerreras y no les han ofrecido el grano de sus campos, sino el plomo de sus fusiles.
Han sido testigos de c¨®mo a los militares se les han unido estudiantes y cient¨ªficos, m¨²sicos y actores, profesores y doctores, ingenieros y campesinos.
De c¨®mo han vencido al segundo ej¨¦rcito m¨¢s poderoso del mundo, de c¨®mo han enviado al buque insignia de la flota rusa al fondo del mar, de c¨®mo han aprendido a utilizar los M270 MLRS y los HIMARS (el sistema de misiles construido en Estados Unidos que el ej¨¦rcito ucraniano empez¨® a usar a partir de junio de 2022) en menos de una semana, de c¨®mo han liberado miles de kil¨®metros de territorio en solo unos pocos d¨ªas.
?Qui¨¦nes son estos ucranianos?
(¡)
Descubre Ucrania. Conoce nuestros sue?os y de qui¨¦nes han tratado de aplastarlos. Descubre c¨®mo ¨¦ramos antes de la invasi¨®n, c¨®mo nos ha cambiado la guerra y por qu¨¦.
Lee sobre nuestra vida y nuestra historia de los ¨²ltimos tres a?os.
Y, sobre todo, escucha nuestro mensaje, aquel que son¨® con fuerza y claridad el d¨ªa de la Independencia de 2022 y sonar¨¢ hasta que el ¨²ltimo soldado de la ¡°fr¡± se marche de nuestro territorio.
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