El jefe de la polic¨ªa secreta de Pinochet vuelve a la c¨¢rcel en medio de una monumental bronca

Diez a?os despu¨¦s de ir a prisi¨®n por el asesinato del ex ministro de Exteriores chileno Orlando Letelier, el general Manuel Contreras, jefe de la polic¨ªa secreta de Augusto Pinochet, vuelve a la c¨¢rcel, esta vez por la desaparici¨®n de un modesto sastre. Al igual que en 1995, aunque de forma menos aparatosa, el otrora poderoso jefe de la Direcci¨®n de Inteligencia Nacional (DINA) ha tratado de resistirse la acci¨®n de la justicia, al negarse a concurrir a los tribunales para ser notificado de una sentencia en su contra, lo que ha obligado al juez Alejandro Sol¨ªs a ordenar su detenci¨®n. Contreras ha sido condenado a 12 a?os y conducido a prisi¨®n en medio de una lluvia de huevos y piedras.

En el caso Letelier, Contreras se atrincher¨®, protegido por numerosos guardaespaldas, en una finca a 1.000 kil¨®metros al sur de Santiago, de la que huy¨® subrepticiamente para reaparecer, tras varios d¨ªas de tensi¨®n, internado en un Hospital Naval. Finalmente fue detenido y trasladado a la c¨¢rcel, donde pas¨® los siguientes siete a?os. Esta vez, Contreras ha esperado en su casa, rodeado de parientes, a los agentes que han acudido a detenerle y, seg¨²n fuentes policiales, ha cogido una pistola de un escritorio, por lo que ha tenido que ser neutralizado por la fuerza, mientras sus familiares agred¨ªan a los polic¨ªas con pu?os y pies.

El ministro del Interior, Jos¨¦ Miguel Insulza, ha asegurado, sin embargo, que "no hubo riesgo de enfrentamiento" en el cumplimiento de la diligencia judicial. Insulza ha admitido, en todo caso, que "ha sido una jornada bastante tensa porque el momento es significativo y es un acontecimiento hist¨®rico que la c¨²pula de este organismo de seguridad (DINA) vaya a cumplir su sentencia". Por su parte, el abogado defensor del general, Juan Carlos Manns, ha negado que su cliente se hubiera resistido o esgrimido un arma, al tiempo que ha acusado a los polic¨ªas, unos 25, de irrumpir violentamente en el domicilio y de agredir a los familiares.

Justicia a los 30 a?os de la desaparici¨®n

La segunda condena a prisi¨®n del ex jefe de la DINA se produce exactamente 30 a?os despu¨¦s de la desaparici¨®n de Miguel Angel Sandoval, un sastre de 26 a?os y miembro del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), que fue detenido en enero de 1975 por agentes del organismo. Los otros condenados en este caso son el coronel Marcelo Moren Brito, a 11 a?os de c¨¢rcel; el brigadier Miguel Krasnoff, a 10 a?os; el coronel Fernando Laureani, a cinco, y el ex oficial de Carabineros Gerardo Godoy, tambi¨¦n a cinco a?os. Los cuatro, a diferencia de Contreras, han comparecido ante el juez Sol¨ªs para recibir la notificaci¨®n y posteriormente han sido trasladados a prisi¨®n. Mientras, su antiguo jefe, ha pasado un par de horas en un cuartel policial tras su detenci¨®n, donde se le ha fichado y se han constatado las lesiones sufridas en su casa, antes de ser llevado al Palacio de Justicia para el tr¨¢mite de notificaci¨®n.

En las afueras del juzgado, varios centenares de familiares de v¨ªctimas de la dictadura de Pinochet (1973-90) se han manifestado durante varias horas en contra de los condenados. La llegada de Contreras al tribunal ha sido tumultuosa, en medio de una lluvia de huevos y otros objetos lanzados por los manifestantes, que por momentos han sobrepasado el anillo de seguridad policial. Los familiares ten¨ªan adem¨¢s otro motivo para manifestarse, pues hoy se han conocido las condenas de primera instancia contra otros 15 ex agentes, sentenciados por una matanza de 12 opositores perpetrada en 1987 y conocida como Operaci¨®n Albania o Matanza de Corpus Cristi.

La mayor pena dictada por el juez Hugo Dolmetsch ha reca¨ªdo en el general retirado Hugo Salas Wenzel, ex jefe de la Central Nacional de Informaciones (CNI), organismo que sucedi¨® a la DINA como responsable de la represi¨®n durante la dictadura. Dolmetsch, que absolvi¨® a otros 11 encausados, ha condenado tambi¨¦n a 15 a?os y un d¨ªa de prisi¨®n al ex mayor Alvaro Corbal¨¢n, y a 10 a?os y un d¨ªa al ex coronel de Carabineros Iv¨¢n Quiroz. Los dem¨¢s condenados, entre los que hay militares, polic¨ªas y civiles, han recibido sentencias de entre tres y cinco a?os y un d¨ªa. Los familiares de las v¨ªctimas consideran que, salvo la de Salas Wenzel, las dem¨¢s condenas son irrelevantes, por lo que han anunciado que las apelar¨¢n.