M¨¦dicos sin Fronteras denuncia que las condiciones de vida de los haitianos "violan la dignidad humana"
La organizaci¨®n lamenta que dos meses despu¨¦s del terremoto cientos de miles de personas viven hacinadas y sin atenci¨®n sanitaria suficiente
Hait¨ª entra en una fase "crucial". Dos meses despu¨¦s del terremoto que devast¨® el pa¨ªs y caus¨® m¨¢s de 250.000 muertos, las necesidades m¨¦dicas contin¨²an siendo "enormes" y las condiciones de vida de la poblaci¨®n "extremadamente precarias", seg¨²n la organizaci¨®n M¨¦dicos sin Fronteras. "Cientos de miles de personas viven hacinadas en campos en condiciones muy dif¨ªciles que se est¨¢n agravando con la llegada de las lluvias", se?ala la ONG, que a?ade que la respuesta ante esta situaci¨®n es "insuficiente".
Colette Gardenne, encargada de gestionar la labor de M¨¦dicos sin Fronteras durante las ¨²ltimas semanas, subraya la labor de las organizaciones de ayuda en atenci¨®n m¨¦dica, pero echa de menos que la solidaridad no se refleje realmente "sobre el terreno", especialmente en los saneamientos y refugios para las v¨ªctimas.
"La falta de refugio y las deficientes condiciones de higiene constituyen una afrenta a la dignidad humana para miles de haitianos que se han quedado en la calle", se?ala Christopher Stokes, director general de la organizaci¨®n en Bruselas. "Muchos haitianos me hablaron de que est¨¢n abandonados, no se les informa acerca de lo que les ocurrir¨¢ o lo que recibir¨¢n. No saben ad¨®nde ir", explica.
El futuro de Hait¨ª
Otro de los principales problemas, seg¨²n M¨¦dicos sin Fronteras, es la inseguridad. Apenas hay iluminaci¨®n por las noches, destacan los responsables de la ONG, que inciden en el aumento de casos de violencia sexual.
Para M¨¦dicos sin Fronteras, comienza ahora una ¨¦poca decisiva en la que miles de heridos van a necesitar atenci¨®n m¨¦dica a largo plazo. Destaca que han ampliado su capacidad para ofrecer cuidados postoperatorios especializados y reforzar la atenci¨®n primaria en ambulatorios y la secundaria, como obstetricia de emergencia, tratamiento terap¨¦utico intensivo para ni?os con desnutrici¨®n y cuidados hospitalarios de pediatr¨ªa y de adultos.
Stokes describe la incertidumbre y el miedo que la poblaci¨®n siente ante el futuro. "Hace dos meses, un compa?ero haitiano me pregunt¨® llorando: '?Qu¨¦ vamos a hacer con este pa¨ªs? Hay tantos amputados y heridos'. En ese momento fue cuando me di cuenta de que nos ¨ªbamos a quedar all¨ª mucho tiempo".
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