Cuatro muertos y varios heridos en Hait¨ª en una nueva jornada de protestas que paraliza el pa¨ªs

Las protestas violentas en Hait¨ª por los resultados electorales del pasado 28 de noviembre amenazan con ahondar m¨¢s la inestable situaci¨®n en la que vive el pa¨ªs caribe?o, golpeado este a?o por un terremoto y una epidemia de c¨®lera. Cuatro personas han muerto y en torno a una decena han resultado heridas de bala en los disturbios ocurridos en Les Cayes, en el sur de Hait¨ª.

Los principales problemas se concentran en la capital, Puerto Pr¨ªncipe, donde otra persona ha resultado herida de bala en el ataque de cientos de manifestantes contra una sede del partido oficialista en Puerto Pr¨ªncipe. Provistos de palos y piedras, los atacantes, que llevaban pancartas del candidato derrotado, el cantante Michel Martelly, han saqueado la sede del partido Inite.

Las oficinas p¨²blicas y privadas no funcionan en Puerto Pr¨ªncipe y el comercio formal y los bancos est¨¢n cerrados, mientras que las calles est¨¢n obstaculizadas por barricadas, en muchos casos formadas por neum¨¢ticos incendiados, y por grandes piedras. Los supermercados y las estaciones de gasolina cerraron ayer sus puertas anticip¨¢ndose a los disturbios. American Airlines ha suspendido todos sus vuelos con salida y destino en Puerto Pr¨ªncipe, seg¨²n la propia compa?¨ªa. El aeropuerto de la capital se encuentra aparentemente cerrado, aunque ninguna fuente oficial ha confirmado este punto.

La polic¨ªa no ha tomado partido en los primeros instantes para frenar las marchas y por las calles apenas se ven patrullas. Tampoco han intervenido las fuerzas de paz de Naciones Unidas, en el punto de mira de la poblaci¨®n por supuestamente introducir en el pa¨ªs la epidemia de c¨®lera que ha provocado m¨¢s de 2.100 muertos.

El Consejo Electoral Provisional (CEP), m¨¢ximo ¨®rgano de elecciones del pa¨ªs, proclam¨® ayer vencedora de la primera vuelta a Mirlande Manigat con el 31,37 % de los votos, seguida del oficialista Jude Celestin, con el 22,48 % de los votos. Manigat y Celestin deber¨¢n disputar una segunda vuelta. La embajadora estadounidense ante la OEA, Carmen Lomellin, ha afirmado ante las informaciones de "protestas, incidentes y disputas", que se ha creado "una situaci¨®n dif¨ªcil" en Hait¨ª. "Junto con el secretario general adjunto de la OEA, Albert Ramdin, y nuestros socios internacionales estamos dispuestos a ocuparnos de verificar si ha habido o no irregularidades", ha asegurado.

El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, se ha mostrado "preocupado" por las denuncias de fraude y ha apuntado que Naciones Unidas mantiene su compromiso con la celebraci¨®n de elecciones "justas y libres" en el pa¨ªs caribe?o que "reflejen" el deseo de su poblaci¨®n.

Uno de los objetivos m¨¢s denostados por los manifestantes es el presidente saliente, Ren¨¦ Pr¨¦val, cuyo delf¨ªn, Jude Celestin, s¨ª consigui¨® un puesto en la segunda vuelta. "?Colgad a Pr¨¦val!", coreaban los participantes en la protesta.

El anuncio de los resultados provisionales era esperado con gran expectaci¨®n en Hait¨ª, cuya capital, Puerto Pr¨ªncipe, se vio ayer colapsada por grandes atascos a ¨²ltima hora de la tarde, cuando miles de ciudadanos se aprestaron a regresar a sus casas para conocer los datos oficiales, transmitidos en directo por la televisi¨®n local.

De resultar ganadora en segunda vuelta, Manigat, de 70 a?os, ser¨ªa la primera mujer en presidir el pa¨ªs. Por ahora despierta la simpat¨ªa incluso del resto de candidatos, mucho m¨¢s j¨®venes que ella, e hizo de la educaci¨®n uno de los pilares centrales a lo largo de toda su campa?a. Manigat es un personaje conocido por la poblaci¨®n, en 1988 se convirti¨® en la primera dama del pa¨ªs cuando su marido Leslie Manigat gan¨® la presidencia. Aunque cuatro meses despu¨¦s se vieron obligados a exiliarse.

Los mensajes durante la campa?a de Celestin, un ingeniero y tecn¨®crata de 48 a?os, pudieron da?ar sus opciones, al coincidir algunas con las del presidente saliente -que no puede repetir mandato-, lo que daba a la poblaci¨®n la idea de continuidad con las pol¨ªticas de un presidente al que acusan de no haber actuado con suficiente fuerza para hacer frente a los efectos del terremoto del principios de a?o.