La OPEP debate compensar la falta de petr¨®leo de Libia

El precio del barril de Brent cerr¨® finalmente con una ligera subida del 0,09%, hasta los 111,36 d¨®lares, aunque, durante la ma?ana, el petr¨®leo del mar del Norte, de referencia en Europa, roz¨® los 120 d¨®lares alentado por la crisis libia.

Son cada vez m¨¢s los temores que asaltan al mercado: preocupa que Libia suspenda sus env¨ªos; inquieta sobremanera que las revueltas se extiendan a otros grandes productores como Argelia, Ir¨¢n y Arabia Saud¨ª; y a?ade incertidumbre el hecho de que los miembros de la Organizaci¨®n de Pa¨ªses Exportadores de Petr¨®leo (OPEP), a la que pertenecen los cuatro pa¨ªses citados, no hayan anunciado ya un aumento de la producci¨®n para compensar la posible escasez. Y es que no solo el precio del barril para entrega en este mes sube, tambi¨¦n lo hacen los contratos a futuro, lo que significa que el mercado no cuenta con que la crisis en el mundo ¨¢rabe vaya a remitir a corto plazo.

Arabia Saud¨ª y los Emiratos ?rabes son partidarios de subir la producci¨®n

En el seno de la OPEP -responsable del 45% de la producci¨®n mundial de crudo y propietaria de m¨¢s del 70% de las reservas-, hay un debate abierto sobre la necesidad de aumentar la extracci¨®n para compensar la falta de crudo libio. Ir¨¢n y Venezuela se oponen tajantemente, mientras que Emiratos ?rabes Unidos y Arabia Saud¨ª no descartan la medida. La lucha, como siempre, est¨¢ entre los halcones antiamericanos, como se conoce a los dos primeros, y las palomas del Golfo, mote para los segundos. En Riad se reunieron ayer los 12 pa¨ªses de la OPEP y 28 pa¨ªses consumidores de petr¨®leo, entre ellos los de la UE, China, India y Brasil; y se firm¨® un acuerdo para que el mercado petrolero sea m¨¢s transparente y estable. Y aunque no hubo un pacto sobre precios, transcendi¨® que el reino saud¨ª, la mayor potencia petrolera del mundo, est¨¢ a favor de estabilizar el coste del barril entre los 70 y 80 d¨®lares.

La pr¨®xima reuni¨®n de la OPEP para analizar las cuotas de producci¨®n est¨¢ prevista para junio en la sede de Viena y, de momento, tanto venezolanos como iran¨ªes se resisten a convocar una sesi¨®n extraordinaria en vista de la crisis libia y su posible propagaci¨®n a otros pa¨ªses miembros. Teher¨¢n insiste en que el flujo de crudo libio no se ha interrumpido. Prueba de ello es que ayer un buque-tanque carg¨® 600.000 barriles en dos puertos libios, los de Zawia y Es Tsahalis, seg¨²n inform¨® a la organizaci¨®n el armador griego propietario del nav¨ªo. Pero el mercado cree que este barco puede ser el ¨²ltimo, ya que las informaciones tanto de la agencia Reuters como de medios ¨¢rabes afirman que las autoridades del pa¨ªs ya han dicho que por fuerza mayor no podr¨¢n cumplir con los contratos de env¨ªo suscritos.

Analistas del banco Nomura de Jap¨®n, que como pa¨ªs muy dependiente del crudo sigue el mercado con lupa, publicaron ayer un informe en el que advierten que si hay una interrupci¨®n de las ventas de Libia y Argelia, el precio del barril superar¨¢ los 200 d¨®lares. El c¨¢lculo es catastrofista pero no descabellado, sobre todo teniendo en cuenta que la mayor¨ªa de los analistas creen que el crudo se mantendr¨¢ entre los 105 y 110 d¨®lares por barril durante varias semanas. Jose Maria Botelho, ministro de Energ¨ªa de Angola -cuarto mayor productor africano detr¨¢s de Nigeria, Argelia y Libia-, declar¨® ayer que la crisis libia a?ade unos 10 d¨®lares a la cotizaci¨®n en los mercados de Londres y Nueva York.

Mientras crece la especulaci¨®n acerca de qui¨¦n ser¨¢ el pr¨®ximo pa¨ªs de la OPEP en ser arrollado por la ola de cambio en el mundo isl¨¢mico, todas las miradas se dirigen hacia Arabia Saud¨ª, el pa¨ªs que tiene la llave de la espita del crudo mundial. Riad puede compensar r¨¢pidamente cualquier amenaza de desabastecimiento y sus socios del golfo P¨¦rsico, Kuwait y Emiratos ?rabes, tambi¨¦n. Sin embargo, los conatos de protesta que ya ha vivido el reino y la convocada para el 11 de marzo, a?adidos al hecho de que el rey regres¨® al pa¨ªs con un paquete de generosos est¨ªmulos econ¨®micos para mitigar el descontento popular, alientan la idea de que la dinast¨ªa de los Saud no las tiene todas consigo para mantenerse en el poder tan c¨®modamente como desde la fundaci¨®n del reino en 1932. De momento, la protesta resuena muy cerca: en Yemen y Bahr¨¦in.