Trece muertos en los enfrentamientos entre cristianos y musulmanes en El Cairo
La quema de una iglesia provoca un enfrentamiento entre ambas comunidades
La violencia sectaria ha vuelto a las calles de Egipto. Trece personas fallecieron la madrugada del martes y m¨¢s de 140 resultaron heridas durante un choque entre cristianos y musulmanes registrado en Moqqatam, un suburbio de El Cairo. El enfrentamiento, en el que participaron m¨¢s de 1.300 personas, se origin¨® cuando un grupo de cristianos coptos bloquearon una de las principales autopistas de la zona sur de la ciudad que transcurre junto al barrio en una sentada pac¨ªfica de protesta contra la quema de una iglesia d¨ªas antes en otro barrio cairota. Un portavoz de la iglesia en la zona afirm¨® que un par de centenares de musulmanes al grito de ?Al¨¢ es grande! vinieron de Sayeda Aisha y les atacaron con piedras. Horas despu¨¦s disparos al aire, c¨®cteles molotov y un n¨²mero creciente de individuos de ambas confesiones protagonizaron una batalla.
En la monta?a del Moqqatam, uno de los barrios m¨¢s deprimidos de la capital egipcia se hacinan miles de cristianos que viven de la recogida y reciclaje de las toneladas de basuras que los 20 millones de habitantes de El Cairo generan cada d¨ªa. De una de las casas salen gritos y lamentos y al rato un f¨¦retro que es llevado en volandas, mientras las mujeres, de negro riguroso, se abrazan y sostienen unas a otras. Los vecinos acusan al Ej¨¦rcito de ser c¨®mplice de las muertes. Un hombre afirma que los agresores se parapetaron en los tanques para atacarles. Otro muestra los bidones de gasolina de metal, similares a los que portan los tanques y que supuestamente habr¨ªan sido usados para incendiar cinco f¨¢bricas de reciclaje de cart¨®n y pl¨¢stico y otras tantas villas. "?Qui¨¦n de nosotros puede coger algo del Ej¨¦rcito sin su permiso?", a?ade el hombre insinuando la connivencia de los militares.
Entre los edificios quemados hay dos que han sobrevivido a las llamas. "Son de musulmanes", explica una mujer que tiene lo poco que ha podido salvar en el incendio metido en una camioneta. A su alrededor, media docena de chiquillos descalzos y comidos de moscas se sorbe los mocos. "?D¨®nde vamos a ir ahora, a Am¨¦rica? Lo hemos perdido todo. La ropa, el oro..."
"Una mezcla de matones con palos y machetes y algunos barbudos atacaron a los cristianos", explica Badri Makra que llam¨® personalmente a los militares que "se tomaron su tiempo para acudir a acabar con la protesta". "Vinieron cinco tanques que se supone que iban a separarles y no lo hicieron".
En un comunicado que los Hermanos Musulmanes hicieron ayer a trav¨¦s de su p¨¢gina web acusaban al depuesto Gobierno de instigar la tensi¨®n religiosa para provocar el caos. Los Hermanos instaron a los egipcios a no dejarse atrapar en la trampa de la sedici¨®n sectaria por el peligro que entra?ar¨ªa la desestabilizaci¨®n del pa¨ªs para la joven revuelta iniciada el 25 de enero pasado. El comunicado apelaba al orgullo nacional sin diferencia de "religi¨®n, color o credo" y destacaba que no se gana nada sin renunciar a algo y que la fuerza de la naci¨®n y el triunfo de la revoluci¨®n resid¨ªan en el respeto mutuo.
Es el segundo d¨ªa que la capital egipcia vive enfrentamientos entre ambas comunidades despu¨¦s de que el pasado domingo fuera quemada una iglesia en el barrio de Helwan, a las afueras de la ciudad. Un grupo de musulmanes hab¨ªan prendido fuego al templo despu¨¦s de un enfrentamiento entre familias que hab¨ªa dejado dos muertos porque una musulmana ten¨ªa una relaci¨®n amorosa con un cristiano.
Egipto es un pa¨ªs de mayor¨ªa musulmana sun¨ª donde los cristianos coptos suponen apenas el 10 por ciento de una poblaci¨®n de 80 millones y peri¨®dicamente se producen enfrentamientos entre ambas comunidades. La pasada Navidad los ¨¢nimos volvieron a prender cuando un atentado contra una iglesia en Alejandr¨ªa dej¨® 23 muertos y m¨¢s de 90 heridos.
Un capit¨¢n que controla el acceso al suburbio asegura que "trataron de separarles pac¨ªficamente y que los militares no efectuaron "ni un disparo". "Si lo hubi¨¦ramos hecho habr¨ªa muchos m¨¢s muertos", afirma. S¨ª reconoce, sin embargo que oy¨® tiros, aunque no sabe "de donde proced¨ªan". En su opini¨®n lo que ocurri¨® ayer en Moqqatam fue "s¨®lo un malentendido". Un error que ha dejado a 13 madres sin sus hijos.
Mientras los diarios egipcios se hac¨ªan eco de la existencia de una "contrarrevoluci¨®n en las calles". Matones con machetes se mueven por distintos lugares de la cudad y estar¨ªan intentando sembrar el caos entre los ciudadanos. La plaza Tahrir fue ayer escenario de enfrentamientos, pero entre estos baltagu¨ªa, matones y los restos de manifestantes prodem¨®cratas que segu¨ªan en la plaza. Varias personas resultaron heridas en la batalla a pedradas. El Ej¨¦rcito desmantel¨® despu¨¦s "con violencia" el campamento que a¨²n quedaba en la glorieta del centro de la plaza, seg¨²n ha denunciado Amnist¨ªa Internacional. Esta organizaci¨®n denunci¨® de madrugada que algunos testigos afirmaban que el Ej¨¦rcito hab¨ªa permitido a los matones atacarles y que posteriormente m¨¢s de 100 personas fueron detenidas. A los periodistas que lo presenciaron se les quitaron sus tarjetas de memoria de las c¨¢maras.
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