El fantasma de tres asesinos planea sobre Long Island
Las playas de esta zona residencial, a pocos kil¨®metros de Nueva York, se han convertido en un cementerio de cad¨¢veres
La pesadilla de Long Island se multiplica. Las apacibles playas de esta zona residencial situada a pocos kil¨®metros de Nueva York no solo se han convertido en un macabro cementerio de cad¨¢veres de prostitutas si no que podr¨ªa haber al menos tres asesinos implicados en el misterio que rodea su muerte y la de otras seis v¨ªctimas que se han encontrado en el ¨¢rea y cuyos restos est¨¢n siendo identificados poco a poco. "Pese a lo desagradable que resulta pensarlo, no hay evidencia de que los restos que han aparecido sean obra de un solo asesino. Est¨¢ claro que la playa de Gilgo Beach se ha estado utilizando durante mucho tiempo para deshacerse de cad¨¢veres", declar¨® el lunes sombr¨ªamente Thomas Spota, fiscal de Suffolk County, en una rueda de prensa.
La polic¨ªa ha llegado a esta conclusi¨®n tras identificar los restos de Jessica Taylor, una prostituta de veinte a?os que desapareci¨® en 2003. Algunas partes de su cuerpo aparecieron aquel mismo a?o en Manorville, un pueblo rural del mismo condado. El pasado 29 de marzo su cabeza, sus manos y un antebrazo aparec¨ªan a menos de dos kil¨®metros de la playa de Gilgo Beach en la que el pasado diciembre se descubrieron los restos de cuatro prostitutas que sol¨ªan anunciar sus servicios en craigslist. Pero seg¨²n los responsables de la investigaci¨®n, su caso no parece relacionado puesto que el asesino de Taylor trat¨® por todos los medios de evitar que se la identificara, como demuestra el hecho de que su cuerpo fuera repartido por un ¨¢rea de m¨¢s de 40 kil¨®metros y que se intentara incluso de borrar uno de sus tatuajes. Las otras cuatro mujeres, en cambio, tras ser asesinadas, fueron enterradas en la arena sin preocupaci¨®n y la polic¨ªa pudo averiguar su identidad sin apenas esfuerzo, aunque sus asesinatos se cometieron con a?os de diferencia.
No obstante la muerte de Taylor s¨ª podr¨ªa estar relacionada con la de otra mujer a¨²n sin identificar y al que la polic¨ªa se refiere como Jane Doe. Su cabeza, manos y un pie se encontraron al este de Gilgo Beach el pasado 4 de abril. Sus restos se corresponden con un torso de mujer encontrado en el a?o 2000 en Manorville, el mismo pueblo en el que apareci¨® sin manos ni cabeza Jessica Taylor tres a?os despu¨¦s.
A este desasosegante puzzle humano hay que a?adirle el cad¨¢ver de un beb¨¦ de entre 18 y 24 meses que se encontr¨® a los pies de Jane Doe el mismo 4 de abril. Seg¨²n la polic¨ªa, el beb¨¦ no presentaba se?ales traum¨¢ticas aunque no se ha hecho p¨²blica la causa de su muerte. "Pero aunque el beb¨¦ estaba a pocos metros de ella, no parece haber ninguna conexi¨®n entre los dos" dijo el lunes la polic¨ªa. Adem¨¢s tambi¨¦n se han encontrado los restos de un hombre asi¨¢tico de unos veinte a?os al que alguien asesin¨® violentamente pero "con m¨¦todos radicalmente diferentes a los de las mujeres". Es decir, al menos tres asesinos diferentes para ocho v¨ªctimas distintas. Y eso sin contar con los dos cad¨¢veres desmembrados que siguen sin ser identificados y que la polic¨ªa encontr¨® en marzo en una playa de Nassau County, un condado vecino al de Suffolk.
Este siniestro rompecabezas humano es el resultado de una investigaci¨®n a¨²n abierta y que arranc¨® tras la desaparici¨®n de Shannan Gilbert el pasado a?o. Esta prostituta de 24 a?os fue vista por ¨²ltima vez en un motel en los alrededores de Gilgo Beach con un cliente en mayo de 2010. Su cuerpo a¨²n sigue en paradero desconocido mientras un equipo de m¨¢s de cien polic¨ªas y miembros del FBI contin¨²a rastreando la zona y tratando de desentra?ar las m¨²ltiples y oscuras inc¨®gnitas enterradas en la arena de sus playas.
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