El Gobierno de Monti aprueba un duro paquete de medidas de ajuste

Italia ha abierto la puerta del sacrificio. El Gobierno del tecn¨®crata Mario Monti ha aprobado una serie de duras medidas de ajuste que, en su parte m¨¢s dolorosa, afectar¨¢n a los derechos adquiridos por los pensionistas. Tan dolorosa que, al anunciarla, la ministra de Trabajo, Elsa Fornero, reconoci¨® un ¡°dolor psicol¨®gico¡± que la llev¨® a romper en llanto durante la conferencia de prensa. Unos minutos antes, Monti hab¨ªa querido amortiguar el impacto del golpe anunciando que renunciar¨¢ a su sueldo como primer ministro y titular de Econom¨ªa (conservar¨¢ el de senador vitalicio) y que adelgazar¨¢ los costes de la pol¨ªtica. El volumen del ajuste es de 30.000 millones de euros entre 2012 y 2014 ¡ªse reducir¨¢n gastos por valor de 12.000 millones y se aumentar¨¢ la recaudaci¨®n en 18.000¡ª, si bien se reinvertir¨¢n 10.000 millones para fomentar ¡°el crecimiento, el sistema productivo y el trabajo¡±.

Antes de entrar en detalles, el primer ministro quiso dejar tres cosas claras a los italianos. La primera, que su presencia al frente del Gobierno es temporal (hasta la primavera de 2013). La segunda, que Italia no se contagi¨® de la crisis, sino que se la ganaron a pulso los italianos por su mala forma de gobernarse y de contribuir al bien com¨²n. La ¨²ltima: ¡°Hemos querido distribuir los sacrificios de forma equitativa. Quiero dar un mensaje de gran preocupaci¨®n, pero tambi¨¦n de esperanza¡±. A continuaci¨®n, Monti y su equipo intentaron explicar ¡ªcon m¨¢s voluntad que acierto, debido tal vez al nerviosismo y a las pocas tablas¡ª sus duras medidas de ajuste.

Guerra a la evasi¨®n fiscal

El primer ministro italiano anunci¨® una guerra sin cuartel a la evasi¨®n fiscal y descart¨® cualquier tipo de condonaci¨®n de la deuda a los morosos. Mario Monti volvi¨® a insistir en que el paquete de medidas busca la igualdad, el crecimiento y la contenci¨®n del gasto p¨²blico. En este sentido, anunci¨® que reducir¨¢ ¡°profundamente¡± los ¨®rganos provinciales.

"Nadie debe sentirse satisfecho"

La parte gruesa de las medidas es la que, como tem¨ªan los sindicatos, afecta a las pensiones. La ministra Fornero ha explicado que, a partir de ahora, para poder optar a la pensi¨®n anticipada los hombres tendr¨¢n que cotizar 42 a?os y las mujeres, 41. El l¨ªmite, considerado sagrado por los sindicatos, estaba en 40 a?os. Tambi¨¦n se retrasa la edad de jubilaci¨®n, se cambia el sistema de c¨¢lculo y las pensiones superiores a 936 euros se quedar¨¢n sin subidas con cargo a la inflaci¨®n. Se subir¨¢ el IVA en dos puntos porcentuales a partir del a?o entrante y se establecer¨¢n fuertes impuestos para aviones y helic¨®pteros privados, embarcaciones y coches de lujo. ¡°Los sacrificios de hoy¡±, ha asegurado el ministro del Desarrollo Econ¨®mico, Corrado Passera, ¡°buscan construir el crecimiento, el desarrollo y la creaci¨®n de puestos de trabajo en los pr¨®ximos a?os¡±.

En cualquier caso, la filosof¨ªa del ajuste se resume en una frase del primer ministro: ¡°Nadie debe sentirse satisfecho¡±. Si bien, unos ya se declaran m¨¢s insatisfechos que otros. Mientras los principales partidos est¨¢n dispuestos a apoyar las medidas aun con la nariz tapada, los sindicatos se han declarado en contra.

Ante la dureza innegable de las medidas, hasta el presidente Giorgio Napolitano ¡ªverdadero amanuense de la operaci¨®n que sac¨® a Silvio Berlusconi del poder y coloc¨® en su lugar a Monti¡ª ha vuelto a salir a la arena para intentar tranquilizar a la izquierda. ¡°Haremos sacrificios¡±, ha dicho, ¡°pero Italia repartir¨¢. Es necesario que las medidas concilien el rigor y la equidad¡±. De nuevo, una voz importante del mundo sindical, la de Susanna Camusso, secretaria del principal sindicato, la Confederaci¨®n General Italiana del Trabajo (Cgil), ha zanjado diciendo: ¡°La equidad no se ve por ning¨²n lado¡±. Por su parte, Emma Marcegaglia, l¨ªder de la patronal Confindustria, admiti¨® tras reunirse con el primer ministro: ¡°Ciertamente, es un ajuste bastante fuerte¡±. Aunque luego a?adi¨®: ¡°Pero no hay otra opci¨®n. Es un ajuste fundamental para la salvaci¨®n de Italia y del euro. La alternativa est¨¢ clara. O un ajuste fuerte y emprender un nuevo camino o asumir el riesgo de caer. La situaci¨®n es muy grave. Hoy no es demagogia decir que los pr¨®ximos 10 d¨ªas decidir¨¢n si el euro sobrevive o no¡±.