Aforismos ante la sede vacante

Am¨¦n.

Vanitas vanitatis. Papanatas papanatatis, y que no se tome como un insulto, que en su acepci¨®n de la RAE no lo es. La carne es d¨¦bil y es f¨¢cil caer en ellas.

Quien busca la gloria divina se desvive por la terrenal. Poder escuchar sin volverse loco las enso?aciones de lo que se habr¨ªa dicho cuando no est¨¦, el otro d¨ªa escuch¨¦ un caso de alguien que celebraba su funeral por anticipado para conocer qu¨¦ habr¨ªan dicho de ella en tal caso. ?Ser¨¢ el Papa un caso igual?

Y esa es otra, presentar la renuncia como una proeza. Seguro que los mismos que aplauden, de ser otro, pitar¨ªan por no haberse quedado hasta el final. Aparte de que si Juan Pablo II levantara la cabeza le recriminar¨ªa su abandono, eso si no lo tildaba de cobard¨ªa. El Papa cobarde no supo resistir a la tentaci¨®n, y da m¨¢s la sensaci¨®n de que ha dicho en lat¨ªn a su curia, a su reba?o, lo que no se atrev¨ªa a decirles en rom¨¢n paladino: ?qu¨¦ os follen a todos!

Nunca me gustaron los aforismos por ser, a menudo, el intento de forzar al verdadero pensamiento, llev¨¢ndolo a los extremos, transform¨¢ndolo en extractos conceptuales simplificados, inacabados y vac¨ªos. Bah, los cl¨¢sicos topicazos...Deber¨ªamos hacer una distinci¨®n (por lo menos te¨®rica) entre funcionarios pol¨ªticos -dentro de los cuales podr¨ªamos incluir al rey- y por el otro lado a la supuesta misi¨®n espiritual que conlleva en s¨ª misma asumir el sacrificio de las consecuencias por la disputa del poder hasta sus ¨²ltimas consecuencias ?no?

Como dec¨ªa mi abuela: "Si pasas te orino y si no pasas te meo". Hablar por hablar y sin conocimiento de causa es de bobos. Que aforismos ni que ni?o muerto. Cero informaci¨®n.

Adib¨² bad¨¢. Con perd¨®n de ustedes.P.d. ?Quieren saber lo que es el poder? Lean a Nicol¨¢s de Maquiavelo... "El Pr¨ªncipe " era el libro de cabecera de Napole¨®n. Y en muchos casos, sigue siendo un libro certero como pocos, que describe muy bien como se llega, como se sostiene y que se espera del poder ( hablo del poder real, no el figurado o bien pensante). En cierto modo, un libro terror¨ªfico por las conclusiones que saca. Y uno de los primeros en los que se advierte de la "ceguera del trono". Esa ceguera que por cierto, ataca de ra¨ªz a nuestra clase pol¨ªtica, muy amagada, pero que incapaz de soltar el lastre que la enterrar¨¢, prefiere nadar en el cenagal antes que purificarse y regenerarse, aunque su n¨²mero disminuya. La idea que tienen de que los partidos son como grandes clanes donde la lealtad partidaria prima debe perecer. Lo que prima son los derechos del ciudadano, y ¨¦ste exige que se facilite la investigaci¨®n independiente de la corrupci¨®n, adem¨¢s de que cambie el sistema pol¨ªtico hacia uno m¨¢s transparente y abierto. Si se est¨¢ retrasando esto, es porque evidentemente, no hay inter¨¦s en que suceda desde el estamento pol¨ªtico. Conclusi¨®n peligrosa para ellos, pues los convierte en un obst¨¢culo m¨¢s que en una pieza fundamental para transformar la realidad pol¨ªtica. Est¨¢n pues, en un punto muy delicado, y jug¨¢ndose mucho el futuro de nuestra sociedad. Se espera mucho de ellos, y una cosa fundamental en estos tiempos ( y que falta a muchos pol¨ªticos europeos, por cierto) es la probidad y la agilidad para actuar en pro de los ciudadanos. Si fallan, podemos imaginar que el ciudadano pensar¨¢ en no mucho tiempo, que quiz¨¢ deba tomar la riendas en vez de delegar en otros ( en otras palabras, un escenario a la islandesa) . Un ejemplo de este hartazgo lo podemos ver en el resurgimiento de los nacionalismos, que justifican su horizonte como la posibilidad de acercar la pol¨ªtica al ciudadano y sus intereses. No olvidemos que la econom¨ªa es un motor poderoso para justificar muchas cosas. Econom¨ªa y derechos, intereses.... Si las cosas fueran bastante peor de lo que ya van, vascos y catalanes no dudar¨ªan en buscar la manera de irse. Por eso digo, que nuestra clase pol¨ªtica est¨¢ un poco "ciega" ... Y no ve el mar de fondo que se est¨¢ gestando.

Algunas personas al ser nombradas para un determinado cargo adquieren poder, otras en cambio son nombradas gracias a que previamente ya ten¨ªan mucho poder.

?Pero se va o le echan? Porque no he o¨ªdo a nadie pidi¨¦ndole que se quede. Y no me creo que sea por respeto.

Gran art¨ªculo. Interesante, profunda y triste reflexi¨®n acerca de la naturaleza del poder. Chap¨®

Sr. Bassets, imitar los aforismos de Yoda es una debilidad impropia de alguien tan inteligente como usted. Pero lo entiendo. A veces la realidad se parece tanto a una pel¨ªcula de caballeros "jedi" que es dif¨ªcil resistirse. Ah¨ª va otro: Del poder solo conocemos las sombras que proyecta.