Estados Unidos no logra contener la llegada de ni?os indocumentados

Estados Unidos se enfrenta a la mayor crisis migratoria de las ¨²ltimas d¨¦cadas. Miles y miles de ni?os centroamericanos solos cruzando la frontera, un problema que tiene rostro y voz y que el gobierno estadounidense no ha logrado controlar, desatando una guerra pol¨ªtica y social en los estados fronterizos.

Los menores viajan por semanas desde El Salvador, Guatemala y Honduras, con la pobreza y violencia como sus banderas de escape. Si son capturados por la patrulla fronteriza estadounidense, son procesados al interior del pa¨ªs y luego pasan a manos de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados del Departamento de Salud.

Aunque todos los ni?os est¨¢n en proceso de deportaci¨®n, el Gobierno es responsable de mantenerlos y reunirlos con sus familias en Estados Unidos hasta que enfrenten a las cortes de inmigraci¨®n.

Hace 13 a?os la cantidad de ni?os dispuestos a enfrentar una situaci¨®n as¨ª no superaba un promedio de 6,700 al a?o. Las modestas proyecciones del Gobierno para este a?o bordean los 60,000. Entre octubre de 2013 y mayo de 2014 la Patrulla Fronteriza ya ha detenido a 46,188 menores de 17 a?os.

Entre octubre de 2013 y mayo de 2014 la Patrulla Fronteriza ya ha detenido a 46,188 menores de 17 a?os

Un escenario sin precedentes para Estados Unidos donde su capacidad financiera y de espacio se ha puesto en el l¨ªmite. La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA), se encuentra coordinando el trabajo de diferentes agencias gubernamentales para resolver la crisis. Pero el problema m¨¢s grande es que ahora el pa¨ªs no est¨¢ enfrentando una ola de mar o viento, sino una ola humana, que no se detiene de golpe, sino que crece sin un final cierto.

Hasta el momento ya se han abierto tres bases militares para hospedar provisionalmente a los ni?os en California, Oklahoma y San Antonio y es probable que se sumen m¨¢s en el futuro cercano. Los menores tambi¨¦n permanecen en centros de la Patrulla Fronteriza y en refugios. Esta semana la viceministra para los salvadore?os en el exterior, Liduvina Magar¨ªn, visit¨® varios establecimientos donde se mantiene a los ni?os en lugares como Harlingen y McAllen en Texas y Nogales, Arizona.

¡°En t¨¦rminos generales, vemos que hay un esfuerzo por atender las necesidades de los ni?os, pero donde est¨¢n en una condici¨®n deprimente y de total falta de espacio, higiene y alimentos es en el Centro de McAllen de la Patrulla Fronteriza. Los han separado de sus acompa?antes y eso es muy grave para su estado an¨ªmico y autoestima. Les genera mucha m¨¢s incertidumbre¡±, explic¨® en una entrevista con EL PA?S.

En McAllen se encuentran madres con beb¨¦s y ni?os menores de 10 a?os, alrededor de 150. Magar¨ªn asegur¨® que duermen en el suelo y que los m¨¢s peque?os no reciben una dieta adecuada para su edad. La meta del Gobierno es procesar a los ni?os en 72 horas y luego enviar a los menores a refugios adaptados para ellos, pero por ahora funcionarios de la Administraci¨®n han reconocido que no alcanzan ese ritmo.

Texas ha sido el estado que ha recibido el mayor influjo de ni?os indocumentados y eso llev¨® a que el gobernador Rick Perry, junto al presidente de la Asamblea estatal Joe Straus, ordenaran al Departamento de Seguridad P¨²blica (DPS) el inicio de operaciones de control en la frontera para combatir ¡°la ola de inmigraci¨®n infantil¡±, como lo describieron a nivel oficial. Para ello destinar¨¢n un presupuesto semanal de 1,3 millones.

¡°Texas no puede esperar a que Washington act¨²e en esta crisis y no nos sentiremos tranquilos mientras la seguridad de nuestros ciudadanos est¨¢ amenazada¡± declar¨® Perry.

El juego de la culpa ya empez¨® y esta crisis, en particular, tiene muchos padres. En Texas diversos pol¨ªticos locales han asegurado que la cancelaci¨®n de las deportaciones a menores indocumentados, otorgada por el presidente Barack Obama, adem¨¢s de las esperanzas de una posible reforma migratoria est¨¢n aumentando el cruce ilegal de ni?os.

En Washington, legisladores dem¨®cratas de Texas como Rub¨¦n Hinojosa presidente del Caucus Hispano en el Congreso aseguraron: ¡°no se puede dar la espalda a Centroam¨¦rica en esta crisis y hay que seguir trabajando para encontrar una soluci¨®n¡±, luego de reunirse con representantes de las embajadas.

Pero congresistas como el dem¨®crata Henry Cuellar de Texas y el senador republicano del mismo estado John Cornyn, han criticado fuertemente al gobierno por la falta de informaci¨®n en torno a esta crisis humanitaria y este mi¨¦rcoles enviaron una carta al secretario del Departamento de Seguridad Nacional Jeh Johnson donde se plantean preguntas b¨¢sicas. ?Cu¨¢ntos ni?os son en total; cu¨¢ntos han postulado a asilo; cu¨¢ntos tiene a antecedentes criminales; cu¨¢ntos han sido liberados y no se han presentado a las cortes de inmigraci¨®n? ?Cu¨¢l ha sido el impacto financiero para Texas y c¨®mo ser¨¢ reembolsado?

En Arizona la situaci¨®n no es mejor. Oficiales locales han amenazado -incluso con demandar al gobierno- por trasladar menores indocumentados al estado, por falta de espacio en Texas.

Al menos dos comit¨¦s del Congreso tendr¨¢n audiencias para analizar el impacto de la crisis para el pa¨ªs, pero m¨¢s all¨¢ de las preguntas y los n¨²meros, es dif¨ªcil que la ret¨®rica pol¨ªtica apague el silencio en el coraz¨®n de un ni?o, luego de cruzar la frontera solo. Menos a¨²n cuando son miles.