China se distancia de Corea del Norte y estrecha lazos con el Sur
La visita del presidente Xi Jinping a Se¨²l es un desaire a Pyongyang, tradicional aliado
El presidente chino, Xi Jinping, y la jefa de Estado surcoreana, Park Geun-hye, reiteraron este jueves su oposici¨®n a la presencia de armas nucleares en la pen¨ªnsula coreana, en un calculado mensaje a Pyongyang, y expresaron su intenci¨®n de cerrar las negociaciones para un acuerdo de libre comercio bilateral para antes de fin de a?o. Los acuerdos subrayan la buena sinton¨ªa actual entre Pek¨ªn y Se¨²l, que contrasta con las tensiones entre ambas capitales y Tokio y con el distanciamiento entre China y Corea del Norte.
Ambos pa¨ªses prev¨¦n cerrar un acuerdo comercial antes de fin de a?o
¡°Los dos l¨ªderes compartimos la opini¨®n de que debemos lograr la desnuclearizaci¨®n de Corea del Norte sin posibilidad de fracaso, y nos oponemos resueltamente a cualquier prueba nuclear¡±, declar¨® Park en una comparecencia conjunta, citada por la agencia surcoreana Yonhap. Por su parte, Xi afirm¨® que los pa¨ªses implicados deben resolver la cuesti¨®n del programa nuclear norcoreano mediante ¡°el di¨¢logo y la coordinaci¨®n¡±.
La visita de Estado de dos d¨ªas de Xi a Se¨²l representa un desaire significativo para Pyongyang, el aliado tradicional de Pek¨ªn en la pen¨ªnsula coreana: con este viaje Xi rompe con la costumbre china de visitar Corea del Norte antes que el vecino del sur. Kim Jong-Un tampoco ha recibido a¨²n ninguna invitaci¨®n para acudir a Pek¨ªn desde su llegada al poder en 2011. Entre otras cosas, China hab¨ªa visto con alarma el trato de Kim a su t¨ªo, Jang Song-taek, ejecutado un a?o despu¨¦s de que ¨¦ste visitara la Rep¨²blica Popular como enviado de su sobrino.
Jap¨®n suaviza sanciones a Pyongyang
El primer ministro japon¨¦s, Shinzo Abe, anunci¨® el levantamiento de algunas de las sanciones que impon¨ªa hasta ahora al r¨¦gimen norcoreano ante la disposici¨®n que ha mostrado este a investigar los casos de ciudadanos nipones secuestrados y trasladados forzosamente a Corea del Norte durante los a?os setenta y ochenta para ense?ar el idioma y las costumbres de su pa¨ªs.
En declaraciones a la prensa, Abe indic¨® que, tras las conversaciones mantenidas en Pek¨ªn entre los dos Gobiernos, Corea del Norte ha demostrado la voluntad suficiente para resolver esos secuestros al crear un organismo encargado de ello que depender¨¢ de las autoridades m¨¢s altas del pa¨ªs. Por lo tanto, ¡°de acuerdo con el principio de acci¨®n por acci¨®n, levantaremos parte de las medidas impuestas por Jap¨®n¡±, declar¨® Abe.
Esas sanciones, que no guardan relaci¨®n con las que ha impuesto la comunidad internacional a Pyongyang por su programa nuclear, incluyen el levantamiento del veto de viajar a Corea del Norte y de las restricciones al dinero que se puede enviar sin necesidad de informar al Gobierno japon¨¦s. Tambi¨¦n se permitir¨¢ que los buques norcoreanos atraquen en puertos nipones por motivos humanitarios.
Corea del Norte reconoci¨® en 2002 el secuestro de 13 ciudadanos japoneses, cinco de los cuales regresaron a Jap¨®n. Seis a?os despu¨¦s se comprometi¨® a reabrir las investigaciones sobre los casos restantes y otros denunciados por Tokio, aunque nunca lleg¨® a cumplirlo.
Se¨²l ha reaccionado con indignaci¨®n a lo que cree un debilitamiento del r¨¦gimen de sanciones contra Pyongyang. Seg¨²n su Ministerio de Exteriores, ¡°cualquier medida que adopte el Gobierno japon¨¦s sobre este asunto debe ce?irse a l¨ªmites que no pongan en peligro el marco de cooperaci¨®n internacional en lo que respecta al programa nuclear y de misiles norcoreano¡±.
Corea del Norte ha dejado claro su desacuerdo con esta visita. Durante esta semana ha efectuado tres lanzamientos de misiles de corto alcance y amenaza con continuar.
Por contra, las relaciones entre Pek¨ªn y Se¨²l atraviesan uno de sus mejores momentos. China es el principal socio comercial surcoreano y los intercambios entre los dos pa¨ªses superan los 200.000 millones de euros anuales. Es una cifra que ir¨¢ a m¨¢s con el tratado de libre comercio, cuyas negociaciones comenzaron hace dos a?os. En su encuentro de este jueves, los dos presidentes firmaron tambi¨¦n un acuerdo para la creaci¨®n de un mercado directo de cambio de las respectivas divisas, el renminbi chino y el won coreano, en Se¨²l. Xi viaja acompa?ado de una amplia comitiva de empresarios, entre los que se cuentan el presidente de la empresa de comercio electr¨®nico Alibaba, Jack Ma, y el consejero delegado de la telef¨®nica Huawei, Ren Zhengfei.
El estrechamiento de lazos entre China y Corea del Sur no se limita ¨²nicamente al ¨¢rea comercial. Xi y Park, que se han reunido ya en cinco ocasiones, mantienen una excelente relaci¨®n personal, que incluye el env¨ªo de tarjetas de felicitaci¨®n de cumplea?os. La visita del jefe de Estado chino a Se¨²l devuelve la que la presidenta surcoreana efectu¨® a Pek¨ªn el a?o pasado. Park gan¨® entonces numerosos elogios cuando pronunci¨® en mandar¨ªn un tercio de su discurso en una universidad pequinesa.
Ambos pa¨ªses se ven tambi¨¦n unidos por sus suspicacias ante Jap¨®n, que esta semana ha modificado la interpretaci¨®n de su Constituci¨®n para permitir un papel m¨¢s activo de sus Fuerzas Armadas en la regi¨®n, una iniciativa que ha causado un tremendo malestar en Pek¨ªn y Se¨²l. Es un malestar que Xi quiere aprovechar para intentar un mayor acercamiento pol¨ªtico hacia la Casa Azul, la sede del Gobierno surcoreano, y conseguir posicionamientos comunes frente a Tokio, con quien Pek¨ªn mantiene un contencioso cada vez m¨¢s enconado en torno a la soberan¨ªa de las islas Diaoyu (Senkaku, en japon¨¦s) en el mar del Este de China.
En un art¨ªculo de opini¨®n en el diario surcoreano Chosun Ilbo, Xi Jinping hac¨ªa referencia a la reinterpretaci¨®n de la Constituci¨®n japonesa para afirmar que ¡°cualquier tipo de acci¨®n que perjudique la situaci¨®n general de estabilidad regional se encontrar¨¢ con nuestra oposici¨®n¡±. ¡°Ninguna naci¨®n por s¨ª sola se ver¨¢ libre de da?o en caso de inestabilidad¡±, agregaba.
El giro belicista de Tokio contribuye a reforzar los intereses bilaterales
Es dif¨ªcil, no obstante, que la conservadora Park vaya a convertir el cortejo de Pek¨ªn en algo m¨¢s que un coqueteo. Por mejoradas que est¨¦n sus relaciones con el gigante asi¨¢tico, su principal lazo estrat¨¦gico sigue siendo EE UU, que mantiene 26.000 soldados en territorio surcoreano. Y EE UU, que mira con atenci¨®n el desarrollo de las relaciones entre Corea del Sur y China, desalentar¨¢ cualquier cambio que pueda perjudicar a Tokio, su gran aliado en la regi¨®n.
Seg¨²n publica Scott A. Snyder en el blog Asia Unbound del estadounidense Council of Foreign Relations, ¡°sigue faltando un sentimiento estrat¨¦gico de prop¨®sito com¨²n y de intereses comunes compartidos [entre China y Corea del Sur]. Como resultado, aunque una relaci¨®n China-Corea del Sur m¨¢s intensa puede beneficiar los intereses mutuos en algunos casos, sigue habiendo l¨ªmites claros al desarrollo de la relaci¨®n pol¨ªtica y estrat¨¦gica entre los dos pa¨ªses¡±.
Parad¨®jicamente, mientras China y Se¨²l viven un momento dulce en sus relaciones, Jap¨®n experimenta a su vez con una aproximaci¨®n a Pyongyang. Este jueves anunci¨® que levantar¨¢ algunas de las sanciones que manten¨ªa contra Corea del Norte, a cambio de que este pa¨ªs investigue los casos de ciudadanos nipones que en los a?os setenta y ochenta fueron secuestrados y trasladados al ¡°reino ermita?o¡±.
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