La polic¨ªa de un Estado mexicano, acusada de la muerte de un ni?o

A Jos¨¦ Luis Tehuatle, un ni?o ind¨ªgena de 13 a?os, lo mat¨® la polic¨ªa del Estado mexicano de Puebla. Es la conclusi¨®n de la Comisi¨®n Nacional de Derechos Humanos de M¨¦xico (CNDH) sobre la muerte del menor, que recibi¨® el impacto de un proyectil con gas lacrim¨®geno disparado por los cuerpos de seguridad durante una manifestaci¨®n en San Bernardino Chalchihuapan (en Puebla, en el centro de M¨¦xico) el pasado 9 julio. El titular de la CNDH, Ra¨²l Plascencia, present¨® este jueves los resultados de la investigaci¨®n sobre el caso, un informe que refleja mentiras y omisiones del Gobierno de Puebla.

Lo sucedido ese d¨ªa ¡ªuna protesta que se torn¨® violenta¡ª hab¨ªa dejado una estela de versiones? variadas y contradictorias pero, hasta ahora, sin responsables. El Gobierno estatal se?al¨® a los manifestantes como responsables de la muerte de Tehuatle porque, seg¨²n su versi¨®n, hab¨ªa sido herido en la cabeza por explosivos utilizados por los habitantes de Chalchihuapan para atacar a la polic¨ªa. Las autoridades no presentaron pruebas para sustentar la acusaci¨®n y los habitantes dijeron que la polic¨ªa, amparada por una nueva ley aprobada en mayo pasado para el uso de la fuerza, hab¨ªa utilizado granadas de gases lacrim¨®genos para dispersar a la multitud.

El informe de la CNDH, de 170 p¨¢ginas, detalla con testimonios y pruebas forenses que el ni?o muri¨® por el impacto de un objeto, posiblemente un proyectil de largo alcance, usado por la polic¨ªa para esparcir gas lacrim¨®geno. ¡°Se puede concluir que el menor no fue lesionado por alguna explosi¨®n u onda expansiva por la acci¨®n de un cohet¨®n tipo ca?¨®n a contacto con la regi¨®n anat¨®mica del cr¨¢neo¡±, explica el documento. Adem¨¢s, un dictamen de los forenses federales, contin¨²a el texto, indica que en el cuerpo de Tehuatle no se encontraron residuos de explosivos, ni marcas relacionadas con el uso de ¨¦stos.

La versi¨®n oficial queda sepultada por este informe, que tambi¨¦n asegura que las autoridades de Puebla no agotaron el di¨¢logo con los manifestantes antes de comenzar los enfrentamientos. El Gobierno local hab¨ªa argumentado que la agresividad de la poblaci¨®n le oblig¨® a actuar, aunque ¡ªseg¨²n recoge el escrito redactado por la CNDH¡ª la polic¨ªa fue quien dispar¨® el primer proyectil. ¡°Los elementos de la Polic¨ªa Estatal que participaron en los acontecimientos emplearon de manera excesiva y con una marcada negligencia la fuerza p¨²blica¡±. Plascencia ha pedido al Gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, que repare el da?o a las v¨ªctimas ¡ªla familia de Tehuatle y otros 49 lesionados¡ª seg¨²n los est¨¢ndares de la Ley General de V¨ªctimas. Elia Tamayo, madre del ni?o, acudi¨® a la presentaci¨®n del informe y pidi¨® la renuncia de Moreno Valle.

El proyectil que mat¨® a Tehuatle apuntaba en direcci¨®n horizontal hacia el ni?o, cuando el disparo debe hacerse al aire.

La investigaci¨®n tambi¨¦n ha echado luz en cuanto a la responsabilidad que los altos cargos del Gobierno de Puebla tuvieron en la muerte del ni?o. La polic¨ªa limpi¨® de casi toda evidencia el lugar de las manifestaciones antes de que la Fiscal¨ªa comenzara sus propias investigaciones. La CNDH se?ala que la Fiscal¨ªa local, a cargo de V¨ªctor Carranc¨¢, no recab¨® pruebas en el sitio de la manifestaci¨®n y difundi¨® hip¨®tesis (como la de los explosivos) sin ning¨²n sustento. El secretario de Seguridad P¨²blica, Facundo Rosas, dijo que el uso de proyectiles con gas lacrim¨®geno hab¨ªa sido de 232 unidades pero la CNDH comprob¨® que fueron detonados unos 478: el doble. Incluso el informe explica que los polic¨ªas no contaban con el adiestramiento necesario para usar este tipo de armas: el proyectil que mat¨® a Tehuatle apuntaba en direcci¨®n horizontal hacia el ni?o, cuando el disparo debe hacerse al aire.