Varios ataques con ¨¢cido a mujeres desaf¨ªan el reformismo en Ir¨¢n
El Parlamento debate una ley que cuestiona los t¨ªmidos avances de Rohan¨ª
Cuando lleg¨® la primera noticia de que una joven hab¨ªa sido atacada con ¨¢cido en Isfah¨¢n a mediados de octubre, todo el mundo pens¨® que se trataba de otra desafortunada v¨ªctima de un novio despechado. Pocos d¨ªas despu¨¦s ya eran cuatro (el doble, seg¨²n la prensa local) y su aleatoriedad ha hecho cundir el p¨¢nico entre las mujeres en todo Ir¨¢n. A pesar de la firme condena de las autoridades, su gesti¨®n de la crisis ha puesto de relieve las tensiones internas del r¨¦gimen iran¨ª y las zancadillas de los ultraconservadores al presidente Hasan Rohan¨ª.
Todos los ataques confirmados se han producido en Isfah¨¢n, la tercera ciudad iran¨ª y un importante destino tur¨ªstico. El m¨¦todo parece haber sido el mismo. Los agresores, en moto, se acercan a una joven que va conduciendo su coche; el que va de paquete le arroja el ¨¢cido antes de que su c¨®mplice d¨¦ un aceler¨®n y salga disparado. Seg¨²n las redes sociales, el ¨²nico elemento en com¨²n es que a las v¨ªctimas se les hab¨ªa ca¨ªdo hacia atr¨¢s el pa?uelo en contravenci¨®n con la ley iran¨ª que obliga a todas las mujeres a cubrirse la cabeza; las autoridades lo han negado.
El presidente prometi¨® el pasado domingo encontrar y castigar a los responsables. Tanto ¨¦l como el encargado de la investigaci¨®n, el fiscal general Gholamhosein Mohseni-Ejeie, han calificado los ataques de actos de ¡°corrupci¨®n sobre la tierra¡± (mofsed-e-filarz, en persa), una figura jur¨ªdica de la ley isl¨¢mica referida a ofensas graves que amenazan la paz social y castigada con la pena de muerte. Sin embargo, su retraso en reaccionar ha alentado las sospechas de que las agresiones son obra de grupos ultra que intentan minar las t¨ªmidas reformas de Rohan¨ª.
Los asaltos se achacan al rechazo de los ultras a los recientes progresos
¡°Es una acci¨®n de los sectores m¨¢s radicales para presionar al presidente tanto por su pol¨ªtica cultural como en las negociaciones nucleares¡±, asegura Taher¨¦ (nombre supuesto), una ingeniera el¨¦ctrica que se muestra convencida de que no van a lograr que se d¨¦ marcha atr¨¢s en los avances conseguidos. Se refiere a que Rohan¨ª ha relajado los controles sobre la vestimenta de las mujeres y aflojado la presi¨®n sobre la sociedad.
En apoyo de esa teor¨ªa, Shahla, una soci¨®loga que trabaja en una organizaci¨®n p¨²blica, apunta a la coincidencia de que el Parlamento est¨¦ debatiendo una ley de ¡°apoyo a quienes promocionan la virtud y combaten el vicio¡±. El pol¨¦mico texto pretende respaldar a los ciudadanos que animen a las mujeres a respetar el velo isl¨¢mico, aunque precisa que s¨®lo pueden ¡°aconsejarles verbalmente¡± y les proh¨ªbe cualquier otra acci¨®n.
El proyecto sigue a las soflamas que algunos cl¨¦rigos vienen lanzando desde sus p¨²lpitos desde que Rohan¨ª declar¨® que no era misi¨®n de la polic¨ªa ocuparse de c¨®mo visten las mujeres. El ayatol¨¢ Ahmad Yanati le respondi¨® que ¡°nadie tiene derecho a limitar a las fuerzas del orden en su lucha contra las mal veladas¡±.
Varios periodistas y activistas de los derechos humanos iran¨ªes han establecido el v¨ªnculo entre ese clima y los ataques, lo que ha llevado al fundamentalista Mohseini-Ejeie a lanzar una advertencia ¡°a los grupos contra revolucionarios¡± (en referencia a la oposici¨®n) y ¡°a los medios que se dedican a provocar¡±. Al menos un fot¨®grafo y cuatro reporteros de la agencia Isna fueron detenidos en Isfah¨¢n tras la manifestaci¨®n de protesta de la semana pasada. Otros, tanto en esa ciudad como en Teher¨¢n, han sido amenazados y se les ha ¡°prohibido seguir el asunto o escribir sobre ¨¦l¡±, seg¨²n Reporteros Sin Fronteras.
A la vez, algunos responsables intentan echar balones fuera y, en la mejor tradici¨®n conspiratoria del r¨¦gimen iran¨ª, buscan un culpable fuera de sus fronteras. Mohammad Javad Lariyan¨ª, representante de Ir¨¢n ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, mencion¨® en una entrevista en la televisi¨®n estatal ¡°la posibilidad de que un Estado extranjero est¨¦ implicado en el asunto de los ataques de ¨¢cido¡±. En esa misma l¨ªnea del complot se manifest¨® ayer, durante la plegaria de mediod¨ªa, el hoyatoleslam Kazem Sediqi, quien hace unos a?os atribuy¨® los terremotos a ¡°las mujeres que no visten con decoro¡±.
¡°No es obra de extranjeros como proclaman las autoridades sino de fan¨¢ticos que quieren poner en pr¨¢ctica las pr¨¦dicas de algunos cl¨¦rigos¡±, ha asegurado el polit¨®logo Sadegh Zibakalam durante una conferencia en la Universidad de Isfah¨¢n, grabada y difundida por una alumna.
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