Los relojes enloquecen en Chile
El Gobierno de Bachelet anuncia que repondr¨¢ el horario de invierno por tres meses en 2016
El Gobierno chileno de Michelle Bachelet, por medio de su ministro de Energ¨ªa, M¨¢ximo Pacheco, ha anunciado que Chile repondr¨¢ su horario de invierno por tres meses, entre el 14 de mayo y el 13 de agosto. La medida representa un cambio de opini¨®n a lo que el propio Ejecutivo hab¨ªa defendido hasta hace solo 45 d¨ªas.
Basado en argumentos como el ahorro de energ¨ªa y la disminuci¨®n de la delincuencia, a comienzos de 2015 se hab¨ªa determinado que hasta 2017 estar¨ªa vigente un horario ¨²nico de verano, que permite que la poblaci¨®n de una zona importante del pa¨ªs aproveche la luz natural por la tarde. El anuncio no solo ha dejado la sensaci¨®n de que la Administraci¨®n toma decisiones err¨¢ticas influidas por las encuestas, sino que ha vuelto a encender un debate caliente entre partidarios del horario de invierno y de verano.
¡°Esto no fue una discusi¨®n ideol¨®gica, ni de valores, ni pol¨ªtica. Esta es una discusi¨®n principalmente ciudadana¡±, se?al¨® el ministro Pacheco el pasado domingo. En el debate han participado m¨¦dicos especialistas en trastorno del sue?o, expertos en delincuencia, ciudadanos mediante cartas a la prensa escrita y las redes sociales, organismos internacionales, editorialistas de los medios y el Gobierno.
Con el horario de invierno (-4 GTM), la gente se levanta con luz natural y anochece m¨¢s temprano. Con el horario de verano (-3 GTM), por el contrario, amanece m¨¢s tarde y el d¨ªa se extiende. Dependiendo de las circunstancias personales de cada ciudadano, como la hora en que se despierta junto a su grupo familiar y la zona de Chile donde vive, cada cual tiene sus propias preferencias. Pero el Gobierno ha tenido en cuenta diferentes encuestas antes de tomar su ¨²ltima decisi¨®n. El sondeo de agosto del Centro de Estudios P¨²blicos (CEP), por ejemplo, indicaba que a un 58% le gusta m¨¢s el horario de invierno. Aunque decenas de pa¨ªses del mundo cambian de hora dos veces al a?o, el problema es especialmente complejo en pa¨ªses como Chile, que tiene un territorio muy largo y angosto. En el extremo norte de Chile continental, por ejemplo, con el horario de invierno atardecer¨¢ a las 19.15 horas. En el extremo sur, en cambio, a las 17.58. Precisamente en Magallanes y la Ant¨¢rtica es donde est¨¢n m¨¢s molestos con la nueva decisi¨®n del Gobierno, que ha descartado un horario diferenciado para esta regi¨®n.
Un horario de verano permanente significaba para ellos una hora m¨¢s de sol. La historia del cambio de hora en Chile tiene casi medio siglo. Tras una profunda sequ¨ªa que afect¨® al pa¨ªs sudamericano en 1968, el Gobierno de la ¨¦poca, del democristiano Eduardo Frei Montalva, decidi¨® implementar medidas para que la luz natural fuera mejor aprovechada por la poblaci¨®n y evitar el racionamiento el¨¦ctrico. El Ejecutivo decidi¨® entonces que los relojes se adelantar¨ªan una hora, lo que fue bautizado como horario econ¨®mico. La medida se extendi¨® por un a?o m¨¢s y finalmente, en 1970, Chile estableci¨® mediante una ley que comenzar¨ªa a utilizar dos tipos de husos horarios anualmente: el de invierno arrancaba el segundo domingo de marzo y el de verano, el segundo de octubre. Salvo algunos a?os de excepciones, funcion¨® de esta forma hasta 2010, cuando el Gobierno de Sebasti¨¢n Pi?era prolong¨® el horario de verano a causa del terremoto. En los a?os consecutivos el Ejecutivo replic¨® la medida, hasta que finalmente la segunda Administraci¨®n de Bachelet (2014-2018) decidi¨® tener solo el horario de verano.
Por encargo del Ministerio de Energ¨ªa, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) form¨® el Comit¨¦ de Monitoreo del Cambio de Horario, que en enero pasado present¨® sus conclusiones. De acuerdo con el informe, un 45,5% apoyaba un horario ¨²nico de verano, un 12% respaldaba un horario ¨²nico de invierno y un 38,8% estaba a favor de un sistema mixto. Este ¨²ltimo grupo, aunque minoritario respecto del resto, instal¨® ¡°el tema del horario como un problema del pa¨ªs, hasta el punto de que en los medios de comunicaci¨®n quedaron pocos defensores del horario de verano permanente¡± decretado por el Gobierno de Michelle Bachelet.
De acuerdo con el PNUD, esta situaci¨®n ¡°genero? la impresi¨®n media?tica de que la decisi¨®n hab¨ªa sido un error evidente¡±. A horas de que el ministro Pacheco hiciera el anuncio, los chilenos se despertaron el domingo confundidos: muchos m¨®viles y ordenadores se configuraron autom¨¢ticamente al horario de invierno, como hist¨®ricamente se produc¨ªa en esta fecha. En cualquier caso, no es extra?o que el problema de los husos horarios ti?a la agenda p¨²blica de los gobiernos latinoamericanos cada cierto tiempo. El caso m¨¢s extremo se produjo en 2007 cuando el fallecido presidente Hugo Ch¨¢vez cambi¨® la hora de Venezuela en treinta minutos.
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