Una red conservadora al servicio de Trump

Breitbart News era, hasta este verano, un medio digital de tendencia conservadora m¨¢s. Pero a mediados de agosto Donald Trump eligi¨® como director de campa?a al responsable de esta web, Steve Bannon, sellando una alianza que hasta ese momento se hab¨ªa basado en retweets y promoci¨®n de algunas de las teor¨ªas conspirativas m¨¢s extra?as del candidato. Bannon lleg¨® a la campa?a de Trump para sustituir a Paul Manafort, el experto estratega con ra¨ªces en Washington que tuvo como misi¨®n reconvertir al republicano en un candidato de perfil m¨¢s tradicional. La apuesta final por el director de Breitbart demostr¨® que Trump no ten¨ªa ninguna intenci¨®n de moderar sus apuestas y que, por el contrario, estaba dispuesto a ir un poco m¨¢s lejos.

As¨ª dio el salto a la pol¨ªtica este empresario de 62 a?os, ahora responsable de una campa?a presidencial que ha sido acusada de coquetear con la derecha supremacista m¨¢s radical de Estados Unidos. Lo que antes eran titulares pol¨¦micos cuyo alcance estaba limitado a la audiencia de una web minoritaria, ha saltado a la narrativa de una campa?a gracias a los enlaces de noticias y mensajes de Twitter que saltan desde las p¨¢ginas de Breitbart hasta las cuentas manejadas por el equipo de Donald Trump y los discursos de este.

Bannon no pod¨ªa haber contado con una estrategia mejor para difundir el trabajo de Breitbart News, una plataforma a la que se responsabiliza de haber extendido las ideas de la ¡°derecha alternativa¡±, la f¨®rmula con la que se conoce a los nuevos supremacistas. En Breitbart se public¨® la informaci¨®n sobre el juez Curiel, al que Trump acus¨® de imparcial ¡°por ser mexicano¡±, y la noticia sobre la supuesta celebraci¨®n de musulmanes en Nueva Jersey tras los ataques del 11 de Septiembre de 2001. En ambos casos se ha demostrado que la informaci¨®n no era cierta, pero tanto la campa?a de Trump como Breitbart han seguido difundi¨¦ndolas.