Repensar la prevenci¨®n del terrorismo

Hace una d¨¦cada, en Reino Unido se localizaba el principal escenario del terrorismo yihadista en Europa Occidental. Entonces, el epicentro del yihadismo global estaba en el noroeste de Pakist¨¢n y Al Qaeda pudo movilizar numerosos adeptos de ascendencia paquistan¨ª nacidos o residentes en territorio brit¨¢nico. Fue cuando individuos ¡ªprincipalmente de ese origen surasi¨¢tico¡ª?cometieron los atentados del 7 de julio de 2005 en Londres o prepararon los que en 2006 ten¨ªan como objetivo al menos siete aeronaves en la ruta desde Heathrow hacia otros tantos aeropuertos de Canad¨¢ y Estados Unidos. Afortunadamente, este ¨²ltimo plan pudo, al igual que un buen n¨²mero de otros, ser desbaratado a tiempo.?

Al trasladarse el epicentro del terrorismo yihadista a Siria e Irak, con el auge de Estado Isl¨¢mico, el principal escenario europeo del terrorismo yihadista pas¨® a reubicarse entre B¨¦lgica y Francia. Ello obedeci¨® a la intensidad con que la movilizaci¨®n yihadista iniciada en 2012 afect¨® en ambos pa¨ªses a j¨®venes musulmanes, en su gran mayor¨ªa ¡ªaunque no s¨®lo¡ª pertenecientes al segmento social de las segundas generaciones, descendientes de inmigrantes procedentes sobre todo del Magreb. Ahora bien, Reino Unido ha continuado siendo blanco del terrorismo yihadista y en los dos ¨²ltimos a?os sus servicios de seguridad han podido impedir la ejecuci¨®n de al menos una decena de atentados.?

Reino Unido ha continuado siendo blanco del terrorismo yihadista y en los dos ¨²ltimos a?os

Sin embargo, el del mi¨¦rcoles en Londres no pudo ser evitado porque, al margen de las circunstancias bajo las cuales fue posible que un individuo nacido en el Reino Unido, cuya radicalizaci¨®n era conocida por el MI5 desde hace unos a?os, pudiera cumplir sus cruentos planes junto al edificio brit¨¢nico m¨¢s emblem¨¢tico, en ning¨²n pa¨ªs cabe anticiparse con ¨¦xito a todas las tentativas de atentado. Es, con todo, un caso que obliga a repensar cuestiones relacionadas con la prevenci¨®n del terrorismo yihadista. Por ejemplo, los criterios ¡ªincluido el de la edad¡ª con que se elaboran listas de individuos capaces de perpetrar atentados y c¨®mo se decide a qui¨¦nes vigilar especialmente.?

Obliga tambi¨¦n a repensar qu¨¦ ocurre dentro de las comunidades musulmanas donde, como en el Reino Unido, quienes predican la incompatibilidad entre islam y democracia acallan a sus oponentes y fomentan una fractura entre musulmanes y no musulmanes explotable por los terroristas. No m¨¢s de la mitad de los musulmanes brit¨¢nicos ¡ªseg¨²n dos sondeos llevados a cabo en 2016 por ICM Unlimited y Policy Exchange¡ª advertir¨ªan a la polic¨ªa si un conocido se radicaliza o implica en actividades terroristas. As¨ª es impensable que algunos de los pocos musulmanes residentes en pa¨ªses occidentales que deciden matar infieles, instigados por Al Qaeda o Estado Isl¨¢mico, no lo logren.?

Sin olvidar que quienes act¨²an como terroristas m¨¢s o menos solitarios son, en nuestras sociedades, s¨®lo una de las expresiones posibles de la amenaza yihadista.

Fernando Reinares es director del Programa sobre Terrorismo Global en el Real Instituto Elcano.