Nicol¨¢s Maduro consuma con la Asamblea Constituyente su jaque a la democracia en Venezuela

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El r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro ha consumado su plan. La elecci¨®n de delegados para una Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, convocada con reglas del juego que favorecen al chavismo, acabar¨¢ este domingo con el Parlamento de mayor¨ªa opositora que los venezolanos votaron hace menos de dos a?os. Es decir, con el ¨²nico contrapoder del pa¨ªs. Se trata de una decisi¨®n que ni los partidos de la oposici¨®n, agrupados en la Mesa de Unidad Democr¨¢tica (MUD), ni la presi¨®n de Estados Unidos, la UE y muchos pa¨ªses de la regi¨®n han logrado detener y que amenaza ahora con perpetuar la deriva autoritaria del Gobierno. La nueva C¨¢mara se constituir¨¢ la primera semana de agosto.

Maduro ha decidido pegar un brinco hacia el vac¨ªo. La nueva C¨¢mara reconfigurar¨¢ la lucha de poder dentro del chavismo y va a enfrentar a Venezuela a una situaci¨®n in¨¦dita en su historia contempor¨¢nea: el desconocimiento casi absoluto de la comunidad internacional a las leyes que apruebe esa instancia. El primer paso lo ha dado Colombia. El presidente Juan Manuel Santos asegur¨® que no reconocer¨¢ los resultados de los comicios porque tienen ¡°un origen ileg¨ªtimo¡±. Esta circunstancia dejar¨ªa al r¨¦gimen tan aislado como alguna vez estuvo la Cuba castrista, su faro moral.

¡°Permitirle a Maduro avanzar con su Asamblea Constituyente ser¨ªa tr¨¢gico para Venezuela¡±, dice Jos¨¦ Miguel Vivanco, director para las Am¨¦ricas de Human Rights Watch. ¡°Le permitir¨ªa no s¨®lo perpetuarse en el poder, sino contar con un s¨¦quito de seguidores que se encargar¨¢n r¨¢pidamente de desmantelar las pocas instituciones independientes que quedan en pie, como la Asamblea Nacional o el ministerio p¨²blico, suspender elecciones y continuar con el espiral de violencia y represi¨®n¡±.

?C¨®mo se gest¨® esa decisi¨®n? El 1 de mayo, cuando se cumpli¨® un mes de las protestas opositoras, que a¨²n no han cesado y en las que han fallecido m¨¢s de 100 personas, Maduro convoc¨® al llamado ¡°poder originario¡± en una huida hacia adelante. Con la amenaza de liquidar a sus adversarios de la Mesa de Unidad Democr¨¢tica (MUD) y a los desertores de su propio bando, como la fiscal general Luisa Ortega D¨ªaz, el r¨¦gimen esperaba aplacar las manifestaciones contra dos sentencias del Tribunal Supremo de Justicia que despojaban al Parlamento de sus atribuciones. La MUD no acept¨® la oferta de Maduro.

El Gobierno fij¨® estas elecciones tras negarse a autorizar el refer¨¦ndum revocatorio solicitado por la oposici¨®n y posponer las elecciones regionales. Pero la oferta encerraba una trampa. Las bases comiciales de la Constituyente permit¨ªan al chavismo, que hoy es minor¨ªa, repartir entre los sectores afines un tercio de la Asamblea y sobrerrepresentar las provincias m¨¢s rurales del pa¨ªs, donde conserva la mayor¨ªa de sus apoyos. Las fuerzas opositoras no presentaron candidatos y Maduro trat¨® de presentar esa decisi¨®n como una prueba de que solo quieren derrocarle. Pero el excandidato presidencial Henrique Capriles afirm¨® lo contrario: ¡°Nosotros hicimos todo para que este Gobierno entrara en raz¨®n y no lo hicieron. Ellos todav¨ªa viven de la imagen del presidente [Hugo] Ch¨¢vez. Les toca dejar de esconderse detr¨¢s de Ch¨¢vez y asumir la responsabilidad¡±.

A pesar de ello, hasta ¨²ltima hora el Gobierno intent¨® suspender su propia propuesta, dice ?ngel Oropeza, coordinador del equipo pol¨ªtico de la MUD: ¡°El presidente se sent¨ªa atrapado en su propio invento, al que apel¨® para escapar de una consulta popular, y no sab¨ªa c¨®mo salirse de ¨¦l¡±. A trav¨¦s de sus emisarios, los hermanos Delcy y Jorge Rodr¨ªguez, excanciller y alcalde de Caracas, respectivamente, y con la mediaci¨®n del expresidente del Gobierno espa?ol Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, presentaron varias ofertas. Pero hasta el viernes no hubo posibilidad de lograr un acuerdo.

¡°Un Gobierno fracturado¡±

¡°Se hicieron todos los esfuerzos, se les plante¨® la inconveniencia de llevar adelante esta propuesta. Pero el Gobierno no es homog¨¦neo. Cuando cre¨ªamos que hab¨ªamos logrado un consenso resulta que la otra ala del r¨¦gimen, representada por el grupo que tiene m¨¢s cuentas pendientes con la justicia, se negaba a aceptar cualquier acuerdo. Ese es el problema de negociar con un Gobierno que est¨¢ fracturado¡±, dice Oropeza.

Oropeza cree que la Constituyente es la oportunidad que siempre ha estado esperando Diosdado Cabello, el n¨²mero dos del r¨¦gimen, para retar el poder de Maduro. De todos los aspirantes, el poderoso vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela fue el m¨¢s entusiasta en la campa?a. Recorri¨® el pa¨ªs, prometi¨® que la institucionalidad surgida de la nueva Constituci¨®n liquidar¨ªa la oposici¨®n y los tr¨¢nsfugas del chavismo. Cabello aspira a presidir esa nueva instancia. Si lo logra, es muy probable que termine convertido en el presidente de facto.

Nadie, en cualquier caso, se muestra dispuesto a ceder y las perspectivas comienzan a ser cada vez m¨¢s inciertas sobre Venezuela. Oropeza visualiza que las expectativas de Maduro de ponerle la l¨¢pida a la crisis venezolana no van a ser satisfechas. ¡°Esto va a ser mucho peor. Nos adentraremos en el terreno de la ingobernabilidad. Ojal¨¢ que las soluciones lleguen antes de que sigan cayendo las v¨ªctimas¡±.

Vivanco considera que ¡°la ¨²nica soluci¨®n para evitar este escenario es que contin¨²e la fuerte presi¨®n en las calles a trav¨¦s de masivas manifestaciones pac¨ªficas, de la mano de una presi¨®n internacional y multilateral cada vez mayor que implique, por ejemplo, la adopci¨®n de sanciones dirigidas contra funcionarios venezolanos que est¨¦n implicados en graves violaciones de derechos humanos¡±. La semana pasada, m¨¢s de 100 congresistas colombianos y chilenos presentaron ante la Corte Penal Internacional de La Haya una denuncia que responsabiliza a Caracas de cr¨ªmenes como el ¡°asesinato por instigaci¨®n directa e indirecta¡± o ¡°la privaci¨®n del acceso a alimentos o medicinas¡±. Vivanco opina que ¡°quienes cometen los grav¨ªsimos abusos que ocurren en Venezuela hoy deben saber que, tarde o temprano, rendir¨¢n cuentas por sus actos¡±.

El rechazo a las elecciones de hoy no proviene solo de la MUD. La Constituyente ha evidenciado una fractura dentro del chavismo. La fiscal general acus¨® abiertamente a Maduro de traicionar el legado de Ch¨¢vez. Y figuras como Nicmer Evans, del Movimiento por la Democracia y la Inclusi¨®n, tambi¨¦n rechazan la convocatoria. ¡°Estamos pidi¨¦ndole al presidente Maduro que se establezca un proceso de negociaci¨®n para que su renuncia permita que se vaya por la puerta de delante y que esa renuncia, que est¨¢ en el marco de la Constituci¨®n, nos pueda permitir de manera absolutamente certera generar un proceso democr¨¢tico de reorganizaci¨®n de las instituciones a partir de la convocatoria de una elecci¨®n presidencial¡±, concluye.