El senador Men¨¦ndez se sienta en el banquillo acusado por corrupci¨®n

Arranca el juicio por corrupci¨®n contra el dem¨®crata Robert Men¨¦ndez y puede tener importantes repercusiones pol¨ªticas. No es solo la primera vez que un senador en funciones en Estados Unidos se sienta en el banquillo de los acusados en los ¨²ltimos 36 a?os, desde el esc¨¢ndalo Abscam. Si el pol¨ªtico hispano de Nueva Jersey, una de las figuras m¨¢s relevantes en los c¨ªrculos de poder en Washington, es considerado culpable o dimite, trastocar¨¢ el juego de fuerzas en el Capitolio.

Bob Men¨¦ndez, de 63 a?os, se enfrenta a una docena de cargos por fraude y sobornos. El dem¨®crata est¨¢ acusado de haber recibido 750.000 d¨®lares en forma de donaciones a su campa?a, regalos, viajes en avi¨®n privado y lujosas vacaciones pagadas por un benefactor a cambio de que defendiera sus intereses de negocio. En el centro de la controversia est¨¢ su relaci¨®n con Salomon Melgen, un oftalm¨®logo de Florida.

Men¨¦ndez se reuni¨®, de acuerdo con el pliego de cargos, con altos funcionarios del programa sanitario de asistencia p¨²blica Medicare. Estas gestiones buscaban, de acuerdo con la acusaci¨®n, que el doctor evitara pagar millones de d¨®lares a la agencia. Tambi¨¦n trat¨® que funcionarios del Departamento de Estado intervinieran para conseguir unos visados para una amigas de Melgen.

Las primeras sospechas surgieron en enero de 2013 y se complic¨® a comienzos de a?o, cuando Melgen fue condenado por un fraude masivo en Medicare. La sentencia se conocer¨¢ cuando concluya el juicio contra Men¨¦ndez. Los abogados del senador argumentan que estos regalos fueron fruto de la estrecha relaci¨®n de amistad que el pol¨ªtico y el doctor, y la conexi¨®n entre sus acciones oficiales y las contribuciones son pura coincidencia.

Un gran jurado emiti¨® los cargos penales el pasado 1 de abril contra Men¨¦ndez y Melgen. Cada uno de los ocho cargos por soborno est¨¢ penado con 15 a?os de prisi¨®n. Los dos acusados mantienen su inocencia y se declaran no culpables. La fiscal¨ªa deber¨¢ demostrar ahora durante el proceso que hay una relaci¨®n directa entre el incentivo financiero y sus actividades oficiales.

Precedentes

El caso puede sentar, por tanto, un importante precedente al perseguir a cargos pol¨ªticos por sobornos. El Tribunal Supremo adopt¨® el a?o pasado un fallo un¨¢nime por el que limitaba la definici¨®n legal de corrupci¨®n. En el origen estaba la condena al exgobernador Robert McDonnell de Virginia, que con su esposa acept¨® 175.000 d¨®lares en regalos y donaciones de un comerciante de suplementos diet¨¦ticos.

La conducta ingenua del pol¨ªtico, de acuerdo con la decisi¨®n de la Corte, ya no puede ser utilizada como prueba para una condena. Por eso decidi¨® en su fallo anular la condena a Robert McDonnell. Hace dos meses se cancel¨® tambi¨¦n la impuesta a Sheldon Silver, el poderoso l¨ªder de la Asamblea de Nueva York. La decisi¨®n del Supremo, por tanto, complica el trabajo a la fiscal¨ªa en Newark.

El proceso durar¨¢, previsiblemente, dos meses. El calendario, adem¨¢s, puede favorecer a los republicanos si la acusaci¨®n es capaz de probar sus argumentos ante el jurado. Si el senador fuera condenado o se viera forzado a dimitir por la presi¨®n de sus propios colegas dem¨®cratas, el gobernador Chris Christie tendr¨ªa que nominar a una sustituto. El republicano fue el primero que se alien¨® con Donald Trump.

Elecciones

El equilibrio de poder en Washington es muy ajustado y la resoluci¨®n de juicio, por tanto, podr¨ªa acabar dan a los conservadores el voto adicional que necesitan para superar el bloqueo de los liberales. Todo esto, en cualquier caso, deber¨ªa suceder antes de enero, cuando Christie abandone el puesto de gobernador. Las pr¨®ximas elecciones a medio mandato en EE UU son en noviembre de 2018.

Las partes presentan este mi¨¦rcoles sus argumentos en la misma semana que los legisladores vuelve a ocupar sus asientos en Washington tras el receso veraniego. Bob Men¨¦ndez sirve en el Senado desde 2006. Pese al proceso al que se enfrenta, tiene en marcha ya su campa?a para la reelecci¨®n. El anterior caso por corrupci¨®n contra un senador en funciones lo protagoniz¨® Harrison Williams, que tambi¨¦n representaba a Nueva Jersey. Aquel juicio se resolvi¨® en su contra.