Elecciones generales, ?qu¨¦ se juega hoy Alemania?
Gu¨ªa para seguir las elecciones legislativas de este domingo de la gran potencia europea
Los electores alemanes, 61,5 millones de ciudadanos, est¨¢n llamados este domingo a renovar el Bundestag, la C¨¢mara baja del Parlamento, el ¨®rgano responsable de elegir el Gobierno federal. EL PA?S responde a las preguntas m¨¢s importantes para seguir la jornada electoral.
?Cu¨¢l es la gran duda de la jornada?
Dando por hecho que los democristianos de Angela Merkel ser¨¢n la fuerza m¨¢s votada, interesa sobre todo saber hasta qu¨¦ punto la crisis de refugiados de 2015 ha desgastado a la canciller ¨Ccuyo bloque conservador logr¨® hace cuatro a?os el 41,5% de los votos-, la magnitud de la derrota del socialdem¨®crata Martin Schulz y, quiz¨¢s lo m¨¢s importante de todo, qui¨¦n ser¨¢ el pr¨®ximo socio de Gobierno de Merkel.
Seg¨²n las encuestas ahora disponibles, solo hay dos alternativas: o reeditar la gran coalici¨®n con el Partido Socialdem¨®crata (SPD) o intentar una in¨¦dita coalici¨®n a tres: democristianos, liberales y verdes. Tambi¨¦n interesa la fuerza con la que entrar¨¢n en el Parlamento los ultraderechistas de Alternativa para Alemania.
?Qu¨¦ consecuencias puede tener para Merkel?
Todas las encuestas anticipan un cierto castigo para la Uni¨®n Cristianodem¨®crata (CDU) y sus hermanos socialcristianos b¨¢varos de la CSU, aunque manteniendo un apoyo en el entorno del 36%, nada desde?able tras 12 a?os de Gobierno ininterrumpido. La nueva legislatura se presenta complicada para la canciller, que seguramente deber¨¢ gobernar con una mayor¨ªa m¨¢s exigua que la actual y con los ultraderechistas sentados en el Parlamento, quiz¨¢s como tercera fuerza.
Merkel ha prometido que, de salir elegida, se mantendr¨¢ en el cargo los cuatro a?os de legislatura, siempre que la salud se lo permita. Pero desde muy pronto deber¨¢ empezar a pensar en preparar su sucesi¨®n si no quiere verse abocada en 2021 a presentarse por quinta vez.
?Y Para Schulz?
El l¨ªder que llen¨® de euforia al SPD llega desfondado al final de campa?a. Las encuestas le anticipan una derrota hist¨®rica. Para salvar la cara, Schulz est¨¢ obligado al menos a quedar cerca del 25% de las ¨²ltimas elecciones, que ya supuso el segundo peor resultado de la historia moderna del SPD. Si logra salvar los muebles, puede plantearse el puesto de vicecanciller en una nueva gran coalici¨®n. Si no, todas las opciones est¨¢n abiertas.
?Y para Europa?
La UE est¨¢ muy pendiente del equilibrio de poderes que salga hoy de las elecciones. El presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, tendr¨¢ mucho m¨¢s f¨¢cil sacar adelante su programa de reformas si Merkel comparte el poder con un socialdem¨®crata profundamente europe¨ªsta como Schulz. Si, por el contrario, el liberal Christian Lindner entra en el Gobierno, ser¨¢ mucho m¨¢s dif¨ªcil impulsar cualquier medida que huela a mayor integraci¨®n y, por lo tanto, a que los alemanes compartan m¨¢s riesgos con el resto de europeos. Seg¨²n Le Monde, Macron habr¨ªa dicho que un Gobierno alem¨¢n con los liberales le parec¨ªa ¡°una pesadilla¡±.
?Qu¨¦ supone la entrada de los ultraderechistas en el Bundestag?
No hay duda de que AfD entrar¨¢ en el Parlamento, pero es importante saber si logra su objetivo de establecerse como tercera fuerza y de superar el umbral del 10%. El ¨¦xito de AfD certifica que la CDU y la CSU ya no unifican, como hab¨ªan hecho desde los a?os sesenta, a todo el espectro del centro a la derecha alemana. La llegada al Parlamento de un partido rabiosamente nacionalista, antiinmigraci¨®n y antiislam acaba con el viejo dogma de que no pod¨ªa haber un partido a la derecha de la CDU. Pese a negar su car¨¢cter extremista, sus l¨ªderes han lanzado proclamas que en ocasiones recordaban al lenguaje neonazi.
La duda es si este partido acabar¨¢ siendo v¨ªctima de sus propias guerras fratricidas o lograra consolidarse como una fuerza parlamentaria establecida, y si su ret¨®rica xen¨®foba marcar¨¢ la agenda del pa¨ªs.
?C¨®mo ser¨¢ el nuevo Parlamento alem¨¢n?
M¨¢s conservador y euroesc¨¦ptico ¨Ccon la llegada de dos nuevos grupos: liberales y ultranacionalistas-, m¨¢s grande ¨Cel complicado sistema electoral alem¨¢n puede hacer que, con la entrada de dos fuerzas el n¨²mero de diputados pase de los actuales 631 a m¨¢s de 680- y, seguramente, m¨¢s inestable.
?Se vota hoy algo m¨¢s?
En Berl¨ªn, s¨ª. Los ciudadanos de la capital deben decidir si mantienen abierto su peque?o, y muy querido, aeropuerto de Tegel una vez que entre en funcionamiento el mil veces aplazado BER. La idea inicial era que el nuevo gran aer¨®dromo sustituyera a los tres que hasta entonces funcionaban. Pero una iniciativa impulsada por los liberales reclama mantener abierto Tegel incluso cuando BER abra por fin abra sus puertas, algo que no ocurrir¨¢, por lo menos, hasta finales de 2019. Muchos berlineses siguen esta votaci¨®n con mucho m¨¢s inter¨¦s que la del Bundestag.
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