Bruselas propone ampliar a tres a?os los controles en el ¨¢rea Schengen

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Los controles internos en el ¨¢rea europea de libre circulaci¨®n ser¨¢n cada vez menos excepcionales. La Comisi¨®n Europea ha propuesto este mi¨¦rcoles ampliar a un m¨¢ximo de tres a?os el periodo en el que los Estados pueden reintroducir chequeos en las fronteras internas del espacio Schengen. Los Gobiernos solo podr¨¢n apelar a esa medida en casos de amenaza a la seguridad. "Debemos hacer todo lo posible por preservar el delicado equilibrio entre la libre circulaci¨®n y la seguridad", ha sugerido el comisario europeo de Migraci¨®n, Dimitris Avramopoulos, en conferencia de prensa.

La circulaci¨®n sin control de documentos de identidad, uno de los principales s¨ªmbolos del proyecto europeo, se ha visto restringida desde 2015 por motivos antiterroristas y principalmente para supervisar los flujos migratorios. En la actualidad, el plazo m¨¢ximo de controles por riesgos para la seguridad del pa¨ªs se limita a seis meses (aunque en la pr¨¢ctica se convierte en dos a?os si se pueden demostrar deficiencias en las fronteras exteriores de la UE). El Ejecutivo comunitario sugiere ahora ampliar ese primer plazo a un a?o y a?adir otros dos adicionales si persiste la misma amenaza. Transcurrido ese a?o inicial, las renovaciones no ser¨¢n autom¨¢ticas. Habr¨¢ una evaluaci¨®n cada seis meses y ser¨¢ el Consejo Europeo ¡ªrepresenta a los Estados miembros¡ª quien decida si siguen existiendo razones para mantener la excepci¨®n a Schengen.

Con estas precauciones, Bruselas quiere evitar que los Estados empleen esa medida excepcional como una herramienta ordinaria de control interno de fronteras. "Si muere Schengen, ser¨¢ el principio del fin de Europa", ha vaticinado solemnemente Avramopoulos. El endurecimiento de fronteras, pese a todo, se ha convertido en una constante en los ¨²ltimos a?os.

En la pr¨¢ctica, los Estados ya cuentan con una posibilidad de mantener los controles internos hasta dos a?os, una opci¨®n a la que ahora est¨¢n acogidos cinco pa¨ªses del ¨¢rea de libre circulaci¨®n. Pero las bases para ese par¨¦ntesis a Schengen son m¨¢s amplias. Se trata de las deficiencias encontradas en 2016 en las fronteras exteriores de la UE (en particular en Grecia), que se consider¨® pon¨ªan en riesgo a todo el club comunitario.

Lo que hace este mi¨¦rcoles Bruselas es abrir la mano a las excepciones por cuestiones antiterroristas (con una ampliaci¨®n de los seis meses actuales hasta un m¨¢ximo de tres a?os en el control fronterizo) a cambio de cerrarla en cuestiones de flujo migratorio. A partir de noviembre, cuando expiren las actuales limitaciones a Schengen para Alemania, Austria, Suecia, Dinamarca y Noruega, no habr¨¢ m¨¢s renovaciones, ha advertido el comisario.

Contra los abusos

Aun as¨ª, los pa¨ªses tienen la opci¨®n de entrelazar las dos opciones. Alemania ya ha avisado varias veces de que cree necesario seguir manteniendo los chequeos en algunas de sus fronteras internas. Si la Comisi¨®n da por concluido el actual periodo porque considera que no existen m¨¢s razones migratorias que lo avalen, Berl¨ªn siempre puede alegar motivos antiterroristas para controlar a los viajeros. Fuentes del Ejecutivo comunitario advierten de que no debe haber abusos.

La iniciativa de Bruselas es algo menos ambiciosa de que lo que ped¨ªan Berl¨ªn y Par¨ªs. Sus Gobiernos, junto a los de Austria, Dinamarca y Noruega, se hab¨ªan dirigido a la Comisi¨®n a principios de mes para solicitar un m¨¢ximo de cuatro a?os de controles fronterizos ampar¨¢ndose en la amenaza terrorista que sufre Europa. La diferencia es que estos pa¨ªses tomaban como punto de partida los dos a?os que en la pr¨¢ctica se pueden otorgar actualmente y solicitaban otros dos m¨¢s. Bruselas, en cambio, ha utilizado como referencia los actuales seis meses de chequeos por amenaza para la seguridad, los ha convertido en un a?o y ha dispuesto, con muchas cautelas, dos a?os adicionales. El resultado es que la Comisi¨®n sugiere un m¨¢ximo de tres a?os, mientras esos Estados abogaban por cuatro.