Las familias de los 44 marinos del submarino exigen que siga la b¨²squeda: ¡°Sabemos que est¨¢n vivos¡±
El ministro de Defensa argentino escucha los reclamos en una reuni¨®n que termina a los gritos
El dolor inicial ha dado paso a la furia. Los familiares de los 44 tripulantes del ARA San Juan exigieron a los gritos que el Gobierno argentino no suspenda la b¨²squeda de supervivientes, como anunci¨® ayer la Armada tras 15 d¨ªas de rastrillajes fallidos. El ministro de Defensa, Oscar Aguad, fue el encargado de recibir el enojo de las familias. Enviado por el presidente Mauricio Macri, viaj¨® a la base naval de Mar del Plata para explicarles de primera mano porqu¨¦ ya no habr¨¢ rescate. Pero Aguad apenas pudo hablar: el encuentro se convirti¨® enseguida en una tensa sucesi¨®n de reclamos.
¡°Nosotros sabemos que est¨¢n vivos¡±; ¡°Los han condenado a la muerte. Ustedes son los culpables de todo esto. Mentira tras mentira¡±; "La Armada dice que no abandona a sus marinos. Cortando el rescate, est¨¢n abandonando a los marinos. O usted quiere que me vaya al medio de mar a buscarlo para llorarlo". El tono de los reclamos puso en evidencia el creciente malestar de las familias, que sumidas en el dolor no quieren que los barcos de rescate vuelvan a puerto. El Gobierno se ha comprometido a buscar al ARA San Juan debajo del mar, est¨¦ donde est¨¦, pero desde el jueves trabaja como si ya no hubiese posibilidad alguna de vida. Aguad lo dijo como pudo a las familias: ¡°Se han agotado los d¨ªas, no hay condiciones de que haya vida. Entonces hemos tenido que declarar el fin del SAR¡±, el protocolo de b¨²squeda de vidas humanas en peligro. "El compromiso absoluto es no dejar de buscar¡±, agreg¨® el ministro, ¡°hasta que agotemos todos los recursos. Estados Unidos, Chile y Rusia van a seguir brindando ayuda¡±.
La reuni¨®n fue privada, dentro de la base naval adonde el Ara San Juan debi¨® amarrar hace dos semanas. Pero algunos familiares la grabaron con sus tel¨¦fonos celulares y entregaron los v¨ªdeos a la prensa. El cambio de actitud ha sido notable, tras 15 d¨ªas respetando a rajatabla un acuerdo de confidencialidad que evitara filtraciones.
Aguad fue la ¨²nica voz del Ejecutivo tras el fin del SAR, luego de que Macri desistiera de enviar un mensaje grabado a las familias, como se especul¨® luego de que la Casa Rosada levantara, sin aviso, la agenda presidencial de la ma?ana. Pero no hubo nada de eso. A cambio, Macri envi¨® a su ministro, ya cuestionado por las familias por sus escasas apariciones p¨²blicas durante la crisis, adem¨¢s de algunos errores. El 18 de noviembre, el ministro public¨® en Twitter que hab¨ªa "7 se?ales de llamadas satelitales que provendr¨ªan del submarino San Juan¡±. Y enseguida dijo que estaban ¡°trabajando arduamente para localizarlo y transmitimos la esperanza a las familias de los 44 tripulantes: que en breve puedan tenerlos en sus hogares". Horas despu¨¦s, la Armada confirm¨® que las llamadas no pertenec¨ªan al submarino.
De hecho, no fue Aguad la cara visible de la crisis, sino el portavoz de la Armada, Enrique Balbi. En su parte diario ante la prensa, el marino confirm¨® hoy que los equipos de rescate buscan el casco del Ara San Juan, pero ya sin esperanzas de encontrar vida en su interior. Tambi¨¦n dijo que la ayuda de los 18 pa¨ªses que han aportado buques, aviones y otros equipos continuar¨¢ y que la Armada analiza el hallazgo por sonar de dos elementos sumergidos que no pudieron ser identificados.
Una novedad semejante habr¨ªa disparado en el pasado todo tipo de especulaciones m¨¢s o menos optimistas, pero a 16 d¨ªas de la desaparici¨®n del submarino son pocas las buenas noticias. Balbi aclar¨® que otros dos hallazgos resultaron ser barcos hundidos y no descart¨® que los que resta identificar tambi¨¦n lo sean. ¡°La zona es el principal caladero del cono sur¡±, dijo, y cientos de buques pesqueros trabajan cada d¨ªa al l¨ªmite de la plataforma marina argentina, el sitio donde se perdi¨® el Ara San Juan.
El ARA San Juan se perdi¨® en el mar el mi¨¦rcoles 15 de noviembre, cuando envi¨® a la base su ¨²ltima ubicaci¨®n. Ahora se sabe que en aquel parte, el comandante advirti¨® a la base de un principio de incendio en sus bater¨ªas, producto de una entrada de agua a trav¨¦s del snorkel, el tubo que se saca a la superficie para permitir el ingreso de aire. La Armada no consider¨® el incidente de gravedad y orden¨® al capit¨¢n que abandone sus tareas de control de pesa ilegal y ponga rumbo a Mar del Plata, su puerto final a 400 kil¨®metros al sur de Buenos Aires. Desde entonces no se supo nada m¨¢s.
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