Una nueva ola de protestas se extiende por una decena de ciudades tunecinas
Las manifestaciones contra la subida de impuestos han desembocado en disturbios con la Polic¨ªa
Convocados por la plataforma Fesh nastanneu? (¡°?A qu¨¦ esperamos?), varios centenares de personas se han concentrado este martes al mediod¨ªa en el centro de la capital tunecina para protestar por los aumentos de los precios recogidos en Ley de Presupuestos de 2018, y que abarcan desde la gasolina a las llamadas telef¨®nicas o la compra de coches. La noche anterior se registraron protestas en al menos una decena de ciudades, la mayor¨ªa en regiones marginadas del interior, que desembocaron en disturbios con la Polic¨ªa. En Tebourba, una localidad situada a unos 35 kil¨®metros de T¨²nez, muri¨® un manifestante de 43 a?os por inhalar gas lacrim¨®geno, y en todo el pa¨ªs fueron arrestadas 44 personas, seg¨²n el Ministerio del Interior.
Esta es la en¨¦sima ola de protestas sociales impulsadas por j¨®venes desempleados desde que T¨²nes se desembaraz¨® del r¨¦gimen de Ben Al¨ª en 2011, desencadenando las llamadas primaveras ¨¢rabes. Aunque el pa¨ªs magreb¨ª ha sido capaz de completar con ¨¦xito las principales fases de su transici¨®n democr¨¢tica, habiendo celebrado ya varias elecciones libres, algunos de los males que llevaron a la ca¨ªda de la dictadura contin¨²an bien presentes. Los sucesivos Gobiernos electos no han sido capaces de reducir las hirientes desigualdades regionales, frenar la corrupci¨®n que gangrena la administraci¨®n p¨²blica o aminorar el paro juvenil, que en algunas zonas se eleva al 40%.
Ante este panorama, la pol¨ªtica de recortes del Ejecutivo para el nuevo a?o ha servido de acicate para la reaparici¨®n de las protestas. ¡°?El pueblo quiere la ca¨ªda del presupuesto!¡±, fue uno de los esl¨®ganes antigubernamentales m¨¢s coreados en la manifestaci¨®n. ¡°El presupuesto condensa los problemas del pa¨ªs: el encarecimiento de los productos b¨¢sicos, el paro, el deterioro de las administraciones p¨²blicas. Por eso, nuestra principal demanda es su retirada¡±, declara Wael Nauar, uno de los fundadores de Fesh nastanneu?, un movimiento social creado el pasado 3 de enero y que se ha extendido con rapidez entre la juventud tunecina m¨¢s activa pol¨ªticamente.
¡°Esta manifestaci¨®n es tambi¨¦n contra la represi¨®n policial. Simplemente, por haber escrito algunos comunicados y haber llamado a manifestaciones pac¨ªficas, unos 50 de nuestros activistas han sido arrestados¡±, denuncia Nauar, un funcionario del Ministerio de Educaci¨®n tocado con un viejo gorro de lana. Despu¨¦s de su discurso frente a la multitud, toma la palabra Zeinab Bin Ahmed, una activista de Tebourba, donde se produjo la ¨²nica v¨ªctima mortal de la revuelta.
¡°La manifestaci¨®n era pac¨ªfica hasta que la polic¨ªa empez¨® a dispersarnos con gases lacrim¨®genos ... No es cierto, como ha dicho Interior, que Jomsi al-Yerfeni muriera como consecuencia de una enfermedad cr¨®nica. ?Lo atropellaron frente a nuestros ojos!¡±, grita enfervorizada. ¡°El Ministerio del Interior, es un Ministerio terrorista¡±, estalla la multitud al terminar su testimonio.
Limitado margen de maniobra para el Gobierno
La reacci¨®n del Gobierno se ha mantenido dentro de los par¨¢metros habituales, combinando la criminalizaci¨®n de los manifestantes con algunas frases de compresi¨®n por el malestar de amplias capas de la sociedad tunecina. ¡°La gente debe entender que la situaci¨®n es extraordinaria, y el pa¨ªs pasa por dificultades, pero creemos que el 2018 ser¨¢ el ¨²ltimo a?o dif¨ªcil para los tunecinos¡±, asegur¨® el primer ministro, Yusuf Chahed, que record¨® el asalto a un supermercado en una barriada de T¨²nez y los desperfectos causados en varios edificios p¨²blicos. ¡°Por la noche, no hemos visto protestas, sino gente que rompe cosas, roba y agrede a los tunecinos¡±, declar¨® a la emisora Radio Mosaique.
El margen de maniobra del Gobierno es limitado. Despu¨¦s de siete a?os con un d¨¦ficit p¨²blico anual cercano al 10% del PIB para hacer frente a la ca¨ªda de las inversiones extranjeras y el turismo, la deuda supera ya el 70% y amenaza con precipitar al pa¨ªs en la bancarrota. De ah¨ª, la pol¨ªtica de austeridad del Ejecutivo, que en 2016 firm¨® un pr¨¦stamo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por valor de 2.400 millones de euros.
Por su parte, el principal partido de la oposici¨®n, el izquierdista Frente Popular, ha anunciado su intenci¨®n de intensificar las movilizaciones para forzar un cambio de rumbo en las pol¨ªticas gubernamentales.Sin embargo, su capacidad de presi¨®n es limitada, pues el Gobierno de gran coalici¨®n entre los islamistas de Ennahda y los conrservadores de Nid¨¢ Tunis goza de una c¨®moda mayor¨ªa en el Parlamento.
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