Macron pide una Alemania ambiciosa para refundar Europa

El presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, reina desde hace meses como el nuevo l¨ªder indiscutido de la Uni¨®n Europea, pero sabe que sin una Alemania fuerte y estable sus proyectos para refundar Europa se desvanecer¨¢n. En v¨ªsperas del congreso de los socialdem¨®cratas alemanes que debe permitir la negociaci¨®n de un nuevo gobierno con los democristianos, Macron recibi¨® el viernes a la canciller Angela Merkel para avalar el acuerdo de coalici¨®n y pedir ambici¨®n a Berl¨ªn. Macron dej¨® claro que necesita a Merkel sentar las bases de iniciativas que van desde la reforma de la zona euro hasta el refuerzo de las fronteras comunitarias. El motor franco-alem¨¢n intenta volver a arrancar.

¡°Nuestra ambici¨®n no puede realizarse sola¡±, dijo Macron junto a Merkel en el Palacio del El¨ªseo. ¡°Necesita conjugarse con la ambici¨®n alemana¡±, a?adi¨® antes de elogiar la ambici¨®n europea de Merkel, de los l¨ªderes del SPD y del texto provisional de la gran coalici¨®n.

En los 14 minutos que dur¨® la rueda de prensa, Macron practic¨® un juego sutil. Se trataba de evitar que, con sus palabras, pudiera parecer que se met¨ªa donde nadie le llamaba: en el congreso extraordinario que el Partido Socialdem¨®crata Alem¨¢n (SPD) celebra el domingo en la antigua capital, Bonn.

El congreso debe aprobar o rechazar el acuerdo preliminar alcanzado con la Uni¨®n Democristiana (CDU) de Merkel y su socio tradicional, la Uni¨®n Socialcristiana b¨¢vara (CSU). El contenido del acuerdo es m¨¢s europe¨ªsta ¡ªy por tanto m¨¢s af¨ªn con las ideas de Francia para reformar la UE¡ª que el anterior acuerdo de coalici¨®n de la CDU/CSU con el Partido Liberal y Los Verdes, acuerdo que finalmente se rompi¨®.

Para justificar su negativa a contemplar la posibilidad de un voto negativo del SPD, el presidente apel¨® a la pr¨¢ctica estoica de la premeditatio malorum, consistente en prepararse para los peores males, en este caso una derrota del plan de coalici¨®n con la CDU/CSU.

¡°Puede resultar ¨²til pero tambi¨¦n contraproducente¡±, coment¨®. ¡°As¨ª que me abstendr¨¦ de hacer un pron¨®stico sobre cualquier voto, y menos para un pa¨ªs que no es Francia¡±.

Merkel es optimista. ¡°Veo un amplio terreno de acuerdo, en particular en lo que respecta al compromiso europeo¡±, dijo. ¡°Estoy convencida de que esto exige un gobierno estable¡±.

Un resultado afirmativo el domingo no s¨®lo abrir¨ªa la puerta a un nuevo gobierno en Alemania, que lleva desde septiembre en un impasse pol¨ªtico. Tambi¨¦n dar¨ªa un nuevo impulso a la UE, que lleva casi cinco meses en suspenso.

Macron se encuentra en una situaci¨®n parad¨®jica. Una conjunci¨®n de circunstancias le ayuda a proyectar la imagen de liderazgo: las dificultades de Merkel, el Brexit la provisionalidad italiana hasta las elecciones de marzo, y el conflicto catal¨¢n, que ha rebajado la presencia del Gobierno espa?ol en los debates europeos. Hoy, entre los principales dirigentes de la UE, el franc¨¦s es el ¨²nico que aparece como l¨ªder con suficiente apoyo parlamentario y popular en casa, una notable credibilidad en el extranjero y una sobreabundancia de energ¨ªa e ideas.

Al mismo tiempo ¡ªy he aqu¨ª la paradoja¡ª sabe que todo este potencial es p¨®lvora mojada sin la complicidad de la primera econom¨ªa europea y el pa¨ªs que en la ¨²ltima d¨¦cada ha asumido poco a poco, y a veces con reticencias, la centralidad pol¨ªtica: Alemania. Y sabe que este a?o es una oportunidad ¨²nica para acometer las reformas, puesto que las elecciones al Parlamento Europeo y las fases finales de la negociaci¨®n del Brexit pueden ocupar la agenda en 2019.

De ah¨ª que el novato Macron (nueve meses en el cargo) sea el principal interesado en el ¨¦xito de la renovada gran coalici¨®n de la veterana Merkel (doce a?os en el cargo). Sus ideas sobre la refundaci¨®n de Europa seguramente no se realizar¨¢n plenamente, y las diferencias sobre su ejecuci¨®n son numerosas. Pero en la breve rueda de prensa en el El¨ªseo, Macron y Merkel exhibieron la sinton¨ªa franco-alemana, sellada en el Tratado del El¨ªseo de 1963, y que ahora Par¨ªs y Berl¨ªn quieren renovar.

¡°Lo que debe darnos impulso es la claridad en nuestros fines, m¨¢s que obsesionarnos con los instrumentos¡±, dijo Macron. ¡°En lo fundamental, no veo ninguna diferencia¡±, coincidi¨® Merkel. ¡°Es una Europa que debe tener una pol¨ªtica exterior com¨²n en cuestiones estrat¨¦gicas, una Europa que debe crear sus propias pol¨ªticas de desarrolla, una Europa de la defensa, una Europa que econ¨®micamente debe ser fuerte¡±.