M¨¢s de 500 millones de mujeres no tienen protecci¨®n legal contra el acoso sexual en el trabajo
En m¨¢s de la mitad de los pa¨ªses del planeta a las mujeres se les impide trabajar en ciertos empleos simplemente por raz¨®n de su g¨¦nero, seg¨²n datos de un informe elaborado por el Banco Mundial
Todos celebramos el progreso alcanzado por las mujeres en el mundo y en el campo laboral, pero ?no ser¨ªa mejor si estos progresos hacia la igualdad no siempre fueran generados por momentos dram¨¢ticos? De Hollywood hasta Londres, las revelaciones este a?o acerca del acoso sexual y la brecha salarial, han dado lugar a grandes titulares, indignaci¨®n moral y una acci¨®n r¨¢pida para rectificar pr¨¢cticas y comportamientos injustos.
No puede negarse que, al representar la mitad de la poblaci¨®n del mundo, las mujeres cumplimos un papel equivalente al de los hombres en la generaci¨®n del crecimiento econ¨®mico. Es m¨¢s, algunos opinan que las mujeres controlan la mayor parte del gasto mundial de los consumidores. Mediante la eliminaci¨®n de obst¨¢culos que constituyen discriminaci¨®n en contra de la mujer se podr¨ªa aumentar la participaci¨®n de este colectivo en la fuerza laboral y al hacerlo, elevar la productividad laboral hasta un 25 % en algunas econom¨ªas.
Sin embargo, en m¨¢s de la mitad de los pa¨ªses del mundo, a las mujeres se les impide trabajar en ciertos empleos simplemente por raz¨®n de su g¨¦nero. Eso no es todo. En 123 pa¨ªses no hay leyes sobre el acoso sexual en el sector de la educaci¨®n. En 59 no existen leyes sobre el acoso sexual en el lugar de trabajo. Y en 18 pa¨ªses los maridos pueden impedir legalmente el trabajo a sus esposas.
La justicia colombiana determin¨® que las prohibiciones al trabajo de la mujer en la miner¨ªa son discriminatorias. Bulgaria, Kiribati y Polonia tambi¨¦n eliminaron todas las restricciones al empleo de la mujer
Estas estad¨ªsticas desalentadoras se encuentran en un informe del Banco Mundial titulado Mujer, empresa y la ley 2018, que en los ¨²ltimos 10 a?os ha evaluado los obst¨¢culos jur¨ªdicos a la actividad econ¨®mica de la mujer. Gracias a este informe tenemos una mejor comprensi¨®n de c¨®mo las leyes influyen en las decisiones de las mujeres de crear empresas o de participar en la fuerza laboral.
En el informe se examinan siete ¨¢reas: el acceso a las instituciones, el uso de la propiedad privada, la obtenci¨®n de empleo, los incentivos para trabajar, el acceso a los tribunales, la creaci¨®n de historiales crediticios y la protecci¨®n contra la violencia. El estudio califica a los pa¨ªses en los siete indicadores y, mientras que ninguna naci¨®n alcanza una calificaci¨®n perfecta, Espa?a est¨¢ entre las 20 naciones con puntuaciones m¨¢s altas en cada apartado.
En dicho informe se documenta tambi¨¦n cu¨¢les son los pa¨ªses donde las mujeres no tienen los mismos derechos de propiedad que los hombres y lo que dificulta a las mujeres dar bienes como garant¨ªa para acceder a cr¨¦ditos.
El informe muestra c¨®mo las leyes pueden crear dificultad para la obtenci¨®n de empleo y la creaci¨®n de empresas por parte de las de las mujeres. Primero, las restricciones al empleo dificultan que la mujer pueda conseguir trabajo. En el mundo hay 104 naciones que tienen alg¨²n tipo de restricci¨®n para el empleo de la mujer: en industrias como la miner¨ªa, la manufactura, la construcci¨®n, la energ¨ªa, la agricultura, el agua y el transporte. De hecho, como resultado de estas limitaciones, unas 2.750 millones de mujeres no tienen las mismas oportunidades que los hombres por el simple hecho de ser mujeres. En Am¨¦rica Latina y el Caribe, hay 17 pa¨ªses, incluidos Argentina y Brasil, donde a¨²n se observan restricciones al trabajo de este colectivo.
Segundo, es m¨¢s probable que las mujeres sean propietarias de empresas en los pa¨ªses donde existe protecci¨®n contra el acoso sexual. Calculamos que m¨¢s de 500 millones de mujeres en todo el mundo no cuentan con protecci¨®n legal contra el acoso sexual en el trabajo. Es lo que sucede en 11 naciones de Am¨¦rica Latina y el Caribe, incluidas Guatemala, Hait¨ª y Jamaica. Las leyes tal vez no resuelvan el problema, pero son un primer paso importante para hacerlo, y la realidad demuestra que es m¨¢s probable que las mujeres sean propietarias de empresas cuando existen dichas leyes.
Tercero, es menos probable que las mujeres ocupen puestos de liderazgo en la vida p¨²blica cuando las leyes restringen su capacidad para actuar de manera independiente y su libertad de movimiento. El estudio desvela que casi 850 millones de mujeres viven en pa¨ªses donde existen dichas restricciones. Por ejemplo, en 31 pa¨ªses aquellas no pueden elegir d¨®nde vivir de la misma manera que lo hacen los hombres.
Sin embargo, se est¨¢n produciendo cambios y contamos con datos que demuestran que, cuando hay igualdad de g¨¦nero en las leyes laborales, un mayor n¨²mero de mujeres trabaja y gana m¨¢s que los hombres. La Corte Constitucional de Colombia determin¨® que las prohibiciones al trabajo de la mujer en la miner¨ªa son discriminatorias. Bulgaria, Kiribati y Polonia tambi¨¦n eliminaron hace poco todas las restricciones al empleo de la mujer.
Fen¨®menos en las redes sociales, como el movimiento #MeToo, que resaltan la prevalencia del acoso sexual y la violencia en el lugar de trabajo est¨¢n haciendo una valiosa contribuci¨®n. Los beneficios de lograr la igualdad de g¨¦nero son econ¨®micos: todos nos beneficiar¨ªamos gracias a una mayor prosperidad y estabilidad.
?No ser¨ªa magn¨ªfico que las desigualdades que afectan la mujer en todo el mundo tambi¨¦n se corrigieran porque los Gobiernos que aplican leyes malas se vieran sujetos a rendir cuentas de su historial? El informe titulado Mujer, empresa y la ley 2018 puede contribuir a impulsar el avance m¨¢s r¨¢pido de las reformas.
Kristalina Georgieva es directora gerente del Banco Mundial.
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