Un milagro kurdo en el f¨²tbol sueco

Su padre estuvo en el frente combatiendo a Sadam Husein, el dictador que gase¨® a miles de kurdos en el norte de Irak. Peshraw Azizi, de 30 a?os, ha optado por continuar esa lucha aunque con un bal¨®n de f¨²tbol de por medio: "?l combati¨® por la independencia del Kurdist¨¢n. Yo he decidido seguir su guerra de una manera mucho m¨¢s pac¨ªfica", explica el capit¨¢n del Dalkurd, el equipo fundado por refugiados kurdos que este lunes debut¨® en la m¨¢xima categor¨ªa del f¨²tbol sueco.

En un pa¨ªs donde casi el 20% de sus 10 millones de habitantes son de origen extranjero, la haza?a del Dalkurd es excepcional pero no ¨²nica. El f¨²tbol sueco ¡ªcon clubes que han ganado t¨ªtulos continentales y una selecci¨®n absoluta subcampeona en el Mundial de 1958 y tercera en los de 1950 y 1994¡ª ha visto c¨®mo tres equipos fundados por inmigrantes han sido capaces de alcanzar la m¨¢xima categor¨ªa. Adem¨¢s, el m¨¢ximo goleador de su historia, Zlatan Ibrahimovic, de origen bosnio, tambi¨¦n comenz¨® en un club que fomentaba la integraci¨®n de los migrantes y refugiados, el FBK Balkan de Malmoe.

El pionero fue el Assyriska FF ¡ªuno de los m¨¢s de 20 clubes suecos con ra¨ªces asirias, una minor¨ªa ¨¦tnica con una cultura milenaria que vive principalmente en Siria e Irak¡ª, que ascendi¨® a la primera divisi¨®n?en 2005, dos a?os despu¨¦s de haber sido finalista de copa. Solo lograron ganar cuatro partidos en su ¨²nica temporada en la m¨¢xima categor¨ªa. Cuatro a?os despu¨¦s, en 2009, fue el FC Syrianska, de or¨ªgenes similares, el que ascendi¨® a la Allsvenskan. Aguant¨® dos temporadas al filo del descenso y en la tercera solo cosech¨® tres victorias. Hoy, tanto el Syrianska como el Assyriska, ambos de S?dert?lje (la ciudad de 70.000 habitantes en la que creci¨® Peshraw Azizi), juegan en la tercera categor¨ªa sueca.

El relevo lo ha tomado el Dalkurd. Con siete ascensos en 13 a?os de historia, a¨²n cuenta con cinco jugadores kurdos en la primera plantilla. En la recta final de su carrera, Peshraw Azizi, mediocentro muy f¨ªsico, encara su octava temporada en el club. Nacido en Suleimaniya (segunda ciudad m¨¢s poblada del Kurdist¨¢n iraqu¨ª), jug¨® en el Syrianska, y un par de a?os en equipos menores tambi¨¦n con ra¨ªces asirias, hasta que recal¨® en el Dalkurd en 2011. ¡°La causa asiria tiene algunas similitudes con la kurda¡±, explica por e-mail.

Azizi, que lleg¨® con 12 a?os a Suecia, viaja constantemente a su tierra. ¡°Siempre que el f¨²tbol me da un respiro intento estar cerca de los kurdos que m¨¢s sufren¡±, comenta. Recientemente ha visitado a los peshmerga que combaten al autodenominado Estado Isl¨¢mico en sus ¨²ltimos escondrijos de Irak, y a ni?os kurdos en los campos de desplazados cercanos a Mosul. ¡°Algunos me reconocen y se emocionan, pero los h¨¦roes son ellos¡±, apunta Azizi en un ingl¨¦s perfecto. El futbolista es consciente de que el ¨²nico objetivo del primer a?o en la ¨¦lite debe ser la permanencia. Aun as¨ª, sue?a con jugar competici¨®n europea: ¡°Ser¨ªa genial viajar a estadios en los que nos recibieran centenares o miles de kurdos¡±.

No ser¨ªa el primer equipo fundado por inmigrantes que jugar¨ªa competici¨®n continental. En Chile, el Palestino ha ganado ligas, copas y alcanzado las semifinales de Libertadores. El club con m¨¢s campeonatos de Brasil, el Palmeiras, fue fundado por italianos. Y en Canad¨¢, el Toronto Croatia y el Serbian White Eagles son dos de los mejores equipos del pa¨ªs.

El Dalkurd no tiene sede fija. Ha jugado en tres ciudades distintas. Sus ingresos se han multiplicado gracias al merchandising. ¡°Kurdos de todo el mundo compran nuestro material. Y cada vez va a m¨¢s¡±, explica Cihan Dalaba, jefe de prensa del club. ¡°Probablemente tengamos el presupuesto m¨¢s bajo de la categor¨ªa, pero ning¨²n otro club tiene a millones de personas detr¨¢s¡±, remacha.

Su estreno en la ¨¦lite no fue el so?ado, aunque s¨ª muy digno. Frente al subcampe¨®n, el AIK Solna, y en el estadio m¨¢s grande de Escandinavia, perdieron (2-0), pero tuvieron la posesi¨®n y llegaron m¨¢s que el rival. Algo es algo.

El proyecto The New Arrivals est¨¢ financiado por el European Journalism Centre con el apoyo de la Fundaci¨®n Bill & Melinda Gates.