La mayor¨ªa de tunecinos da la espalda a las primeras elecciones locales libres
La participaci¨®n en los comicios municipales del pa¨ªs ¨¢rabe ha sido del 33% de los votantes registrados
A media ma?ana, en el patio del colegio electoral de la c¨¦ntrica calle de Marsella de T¨²nez, la cifra de periodistas y observadores presentes multiplicaba el de electores. La misma t¨®nica se observaba en el resto del pa¨ªs: centros de votaci¨®n vac¨ªos, interventores mirando las musara?as, y los pocos ciudadanos que ejerc¨ªan su derecho a voto, eran en su mayor¨ªa ancianos. Seg¨²n la Junta Electoral, la participaci¨®n fue del 33% de los votantes registrados (sobre el 20% del censo). Sin embargo, estas elecciones son consideradas un hito ya que son las primeras municipales libres en la historia del pa¨ªs magreb¨ª, que en 2011 vio c¨®mo se hund¨ªa la dictadura de Ben Al¨ª y se iniciaba un proceso de transici¨®n democr¨¢tica que se halla en su ¨²ltima fase.
Seg¨²n los resultados preliminares, el partido islamista Ennahda habr¨ªa sido el m¨¢s votado con alrededor del 28%, seguido por el conservador Nid¨¢ Tunis, que experimenta un fuerte retroceso en comparaci¨®n con los comicios de 2014, que le otorgaron la presidencia del pa¨ªs. Ambos comparten el Gobierno en una "gran coalici¨®n". Las listas independientes habr¨ªan obtenido un buen resultado. Un total de 5,3 millones de tunecinos se hab¨ªan registrado para votar sobre algo m¨¢s de 8 millones con derecho a voto. As¨ª pues, la participaci¨®n real se sit¨²a por alrededor del 20%.
¡°Es una aut¨¦ntica cat¨¢strofe. La participaci¨®n es baj¨ªsima. No tiene nada que ver con las elecciones legislativas de 2011 o de 2014¡±, comenta alarmado Lazaar, presidente de una mesa electoral en un barrio popular de la capital colindante con el casco antiguo. ¡°La gente est¨¢ muy decepcionada porque oy¨® muchas promesas que no se han cumplido. Sobre todo los j¨®venes, han perdido la confianza en toda la clase pol¨ªtica¡±, comenta An¨ªs, un enfermero de 27 a?os que monitorea el proceso para una ONG. Junto con los polic¨ªas apostados en la entrada de la escuela, es el ¨²nico menor de 30 a?os a la vista.
En la Marsa, un suburbio acaudalado de la capital, la situaci¨®n era bastante diferente. Por la ma?ana, se registraron colas, y a media hora de cerrar los colegios, la participaci¨®n superaba el 50%. Una de las particularidades de la Marsa es que cuenta con unas potentes listas independientes formadas por activos miembros de la sociedad civil. "Hemos votado a una lista independiente. Es necesario el cambio. Hay mucha corrupci¨®n", comenta una pareja de treinta?eros, que declaran que un factor clave para decantar su voto ha sido que conocen algunos miembros de una lista personalmente y les inspiran confianza.
¡°No ten¨ªa previsto votar. Pero hace una semana, conoc¨ª a una doctora candidata por una lista de independientes que me hizo cambiar de opini¨®n. Me dijo que no debemos perder la esperanza, y que si no nos gustan los que mandan, hay que dar la oportunidad a otros para que el pa¨ªs pueda progresar¡±, explica Sonia, una sonriente funcionaria de 49 a?os. En estos comicios, 860 listas, un 40% del total, son agrupaciones municipales que no pertenecen a ning¨²n partido.
Los grandes favoritos en estos comicios son Nid¨¢ Tunis, de ideolog¨ªa conservadora, y Ennahda, islamista moderado. Estas son las dos ¨²nicas fuerzas pol¨ªticas que presentaron candidaturas en los 350 municipios del pa¨ªs. ¡°Hemos votado pensando en el futuro de nuestros hijos y nietos. Hay que dar una oportunidad a este Gobierno, lleva solo tres a?os¡±, sostiene Fatima Rezgui, una jubilada que ha acudido al colegio acompa?ada de su marido.
Aunque no quiere revelar el sentido de su voto, deja entender que se trata de Nid¨¢ Tunis, en cuyas listas han encontrado cobijo numerosos pol¨ªticos del antiguo r¨¦gimen. ¡°Las cosas iban mucho mejor con Ben Al¨ª. Ahora tenemos muchos problemas: hay menos seguridad y m¨¢s paro, y sobre todo, el coste de la vida se ha encarecido¡±, a?ade Rezgui, ataviada con un velo isl¨¢mico de color lila.
Durante unos segundos, un creciente rumor rompe la calma de un domingo sopor¨ªfero. Se trata de los c¨¢nticos de decenas de j¨®venes seguidores del club de f¨²tbol Taraji, que se dirigen al estadio, indiferentes ante el proceso electoral en curso. ¡°Creo que estas elecciones son muy importantes, incluso m¨¢s que las legislativas, porque con la nueva ley, los consistorios han ganado muchas competencias¡±, asevera Ghazi, un hombre de 60 a?os que se define como ¡°conservador¡± antes de soltar una pararrada sobre los peligros que T¨²nez importe la libertad sexual de los europeos. Su elecci¨®n, como en otras ocasiones, es Ennahda, al que considera ¡°el partido m¨¢s limpio, menos corrupto¡±.
Algunas ONGs que monitoreaban las elecciones denunciaron varias irregularidades como compra de votos, la realizi¨®n de actos de propoganda en algunos colegios, y peleas entre candidatos. Fabiano Castaldo, vicepresidente del Parlamento Europeo y jefe de la misi¨®n de observaci¨®n de la Uni¨®n Europea, prefer¨ªa resaltar los aspectos positivos de la jornada. ¡°En general, la votaci¨®n est¨¢ transcurriendo con normalidad¡±, afirmaba este pol¨ªtico del partido Cinco Estrellas, que calific¨® las elecciones de ¡°muy importantes¡± para la transici¨®n democr¨¢tica. Con su abstenci¨®n, una mayor¨ªa de tunecinos parecen discrepar. Los resultados oficiales se esperan a partir del pr¨®ximo martes.
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