Bruselas excluye a las firmas de EE UU de los proyectos de defensa de la Uni¨®n

La autonom¨ªa estrat¨¦gica de Europa en defensa constituye una aspiraci¨®n que irrita a EE UU. Pero la creciente desconfianza europea hacia su te¨®rico aliado acelera los planes para despegarse poco a poco de Washington. La Comisi¨®n Europea presenta esta semana los tres instrumentos que pretenden mejorar el m¨²sculo militar de la UE al margen de la OTAN. El principal es un fondo de 13.000 millones de euros para desarrollar equipos que excluye a empresas extranjeras (salvo excepciones) con el fin de reforzar la industria europea. La UE se colocar¨¢ as¨ª entre los cuatro primeros inversores del continente en tecnolog¨ªa de defensa.

La cooperaci¨®n militar pesa cada vez m¨¢s en la agenda europea. Superadas las reticencias hist¨®ricas ¡ªcasi nadie osaba apoyar la inversi¨®n militar en un club que naci¨® como garant¨ªa de paz en el continente¡ª, Bruselas aprovecha la convulsa situaci¨®n exterior para apuntalar la defensa com¨²n. ¡°Europa afronta nuevas amenazas que no conocen fronteras y ning¨²n pa¨ªs europeo las puede afrontar por separado. En un entorno internacional cambiante, Europa necesita reforzar su autonom¨ªa estrat¨¦gica¡±, defiende el Ejecutivo comunitario en un borrador al que ha tenido acceso EL PA?S.

La defensa del bloque comunitario depende en estos momentos bastante de Estados Unidos, que presta asistencia ¡ªy vende equipos¡ª a sus aliados europeos. La Administraci¨®n de Donald Trump observa con enorme recelo cualquier intento europeo de potenciar la industria armament¨ªstica comunitaria. Porque aunque Trump no se ha cansado de repetir que la UE tiene que gastar m¨¢s en el ¨¢mbito militar y en su propia defensa, su mensaje daba por sentado que ese dinero acabar¨ªa en manos de empresas estadounidenses, l¨ªderes en estos proyectos. Justo lo contrario de lo que persiguen las herramientas que ha ideado Bruselas, aunque est¨¢ por ver que lo logren.

El Ejecutivo comunitario presentar¨¢ este mi¨¦rcoles el nuevo Fondo Europeo de Defensa, dotado con 13.000 millones de euros ¡°para defender y proteger a los europeos¡±, seg¨²n el documento consultado. Esa partida, que est¨¢ prevista para el periodo presupuestario 2021-2027, pretende impulsar la inversi¨®n en equipamiento militar, con reglas claras para evitar acabar financiando a empresas controladas por pa¨ªses terceros, entre ellos Estados Unidos.

Aun as¨ª, Bruselas abre la posibilidad a algunas exenciones de la norma. Se podr¨¢ financiar a filiales europeas de empresas radicadas en el exterior a condici¨®n de que no haya transferencias de informaci¨®n clasificada (algo fundamental en un ¨¢mbito estrat¨¦gico como la defensa). El Ejecutivo comunitario ha incluido esta salvedad por la insistencia del Consejo de la Uni¨®n, que representa a los Estados miembros y que tem¨ªa que muchos proyectos industriales pudieran quedar fuera del paraguas financiero com¨²n por desarrollarse en colaboraci¨®n con firmas extranjeras.

Elevar la inversi¨®n

Europa ya puso en marcha el a?o pasado una primera versi¨®n de ese fondo. Pero la cantidad habilitada para los pr¨®ximos presupuestos supera con creces los apenas 600 millones de euros fijados entre 2018 y 2020 en el proyecto piloto. Los 13.000 millones programados para las pr¨®ximas cuentas europeas (lo que supone unos 1.800 millones anuales) se dividir¨¢n en dos apartados: 4.100 millones para proyectos de investigaci¨®n militar y 8.900 millones adicionales para desarrollar capacidades de defensa (tanques, drones, programas de ciberseguridad¡­) en proyectos en los que participen al menos tres Estados miembros. El objetivo es fomentar la cooperaci¨®n.

Las condiciones impuestas por Bruselas son exigentes. Solo se financiar¨¢n iniciativas que se ajusten a las prioridades de la UE, con participaci¨®n de peque?as y medianas empresas. La Comisi¨®n aportar¨¢ el 20% del desarrollo y el resto lo abonar¨¢n los Estados interesados en poner en marcha esos equipos (y en adquirirlos posteriormente).

La cofinanciaci¨®n comunitaria puede subir hasta el 30% del coste del proyecto si la iniciativa pertenece al n¨²cleo duro de la defensa que conformaron el a?o pasado 25 Estados miembros para avanzar m¨¢s en su integraci¨®n militar (PESCO, por sus siglas en ingl¨¦s). ¡°El 5% de los fondos se destinar¨¢n a innovaci¨®n, a tecnolog¨ªas disruptivas¡±, asegura el documento. Es decir, a tecnolog¨ªas que cambien radicalmente el mercado, como los drones o el encriptado de informaci¨®n.

Los expertos muestran cautelas respecto al futuro de la pol¨ªtica europea de defensa, una de las pocas que suscita acuerdos mayoritarios. ¡°No s¨¦ si ya tenemos consenso, pero [Angela] Merkel ha dado un paso adelante en su respuesta a [Emmanuel] Macron y el hecho de que la Administraci¨®n de Trump no proteja, sino que m¨¢s bien desestabilice y humille a la UE, funciona como pegamento", reflexiona S¨¦bastien Maillard, del Instituto Delors. Maillard se refiere al respaldo que ha otorgado la canciller alemana a la fuerza de intervenci¨®n r¨¢pida para situaciones de crisis que ha propuesto el presidente franc¨¦s.

M¨¢s esc¨¦ptico, Charles Wyplosz, de la instituci¨®n especializada en relaciones internacionales Graduate Institute, concluye: ¡°El ¨²nico ej¨¦rcito eficaz es el franc¨¦s. El otro es el brit¨¢nico, pero se va [de la UE]. El Ej¨¦rcito alem¨¢n no existe. Y lo militar es un medio, no un fin. No se ve cu¨¢l ser¨ªa el fin com¨²n¡±.