El pr¨®ximo presidente de Colombia frente al desaf¨ªo de la lucha anticorrupci¨®n

El cambio que ha experimentado la sociedad colombiana desde la firma de la paz con las FARC, en 2016, queda reflejado en un dato. A pesar de la oposici¨®n a esos acuerdos, la principal preocupaci¨®n de los ciudadanos es hoy la corrupci¨®n, por encima de la seguridad. Esa inquietud ha dominado los discursos de los candidatos que el domingo se disputan la presidencia, el uribista Iv¨¢n Duque y el izquierdista Gustavo Petro. La primera gran cita del pr¨®ximo mandatario, que asumir¨¢ el cargo en agosto, ser¨¢ una consulta anticorrupci¨®n, prevista para el 26 de ese mes.

?¡°Todos roban¡±. Esta quiz¨¢ sea la queja m¨¢s transversal y llana que sobrevuela las conversaciones de los colombianos. La sencillez del mensaje tiene sustento en el goteo constante de casos de corrupci¨®n que afectan a representantes p¨²blicos, nacionales y locales, y en la creciente desconfianza de la poblaci¨®n hacia las ¨¦lites tradicionales. La Contralor¨ªa, el organismo que audita las finanzas del Estado, calcul¨® que la corrupci¨®n le cuesta al pa¨ªs m¨¢s de 14.000 millones de d¨®lares cada a?o (unos 12.000 millones de euros).

Aunque esta situaci¨®n no constituye una novedad, desde que estallara el caso Odebrecht, la constructora brasile?a que teji¨® una extensa red de sobornos en Am¨¦rica Latina, el debate p¨²blico comenz¨® a centrarse en la lucha contra las malas pr¨¢cticas, la fiscalizaci¨®n de los recursos y la renovaci¨®n de la clase dirigente.

Los dos candidatos, aun desde posiciones antit¨¦ticas, representan de alguna manera, para distintos electorados, esa regeneraci¨®n. Duque, el favorito en estas elecciones presidenciales, naci¨® en 1976 y, aunque cuente con el apoyo del expresidente ?lvaro Uribe, ha desarrollado buena parte de su carrera en Washington y solo ha sido senador en la pasada legislatura. Petro, que ha sido impulsado por un calculado discurso antiestablishment, no es nuevo en pol¨ªtica.

Fue alcalde de Bogot¨¢, senador, miembro de la C¨¢mara de Representantes y tiene tambi¨¦n un pasado como militante del M-19, un grupo guerrillero desmovilizado en 1990. No obstante, siempre hizo de la lucha contra con la corrupci¨®n una bandera y un instrumento de denuncia. ¡°El presidente que llegue va a tener que tomar medidas contra la corrupci¨®n. Va a tener que apoyar la consulta del 26 de agosto ¡ªque endurece las penas y a?ade condiciones de transparencia¡ª, va a tener que aprobar algunas reformas¡±, opina Ariel ?vila, subdirector de la Fundaci¨®n Paz y Reconciliaci¨®n. ¡°La pregunta¡±, prosigue, ¡°es si va a hacer shows, es decir, denunciar corrupci¨®n sin m¨¢s o va a tomar decisiones de fondo. En cualquier caso, creo que van a ser muy cuidadosos en nombrar a los cargos, porque la ciudadan¨ªa est¨¢ pidiendo transparencia, meritocracia¡±.

Relaciones con Estados Unidos

La transici¨®n que afronta Colombia abre ahora un amplio mercado relacionado con las infraestructuras. Santos asegur¨® el mi¨¦rcoles que su Gobierno nunca recibi¨® sobornos, aunque s¨ª se?al¨® al anterior Ejecutivo, encabezado por ?lvaro Uribe. ¡°Odebrecht estuvo en Colombia y soborn¨® a funcionarios del Gobierno anterior. En este Gobierno Odebrecht se present¨® en 15 licitaciones, se gan¨® una que la construy¨® adecuadamente en Boyac¨¢ y el resto nunca gan¨®¡±, dijo.

Seg¨²n Sergio Guzm¨¢n, analista de la consultora brit¨¢nica Control Risks, ¡°las investigaciones saldr¨¢n bajo las pr¨®ximas Administraciones y ciertamente se destapar¨¢n muchas cosas que tienen que ver con contrataciones p¨²blicas y licitaciones¡±. En su opini¨®n, Duque tiene los n¨²meros para presentarse como un pol¨ªtico que lidere la regeneraci¨®n. ¡°Gran parte de los casos de corrupci¨®n que han venido sacudiendo en Colombia se han revelado con la colaboraci¨®n de Estados Unidos, con la DEA (agencia antidroga) y el Departamento de Justicia. La relaci¨®n con la DEA va a jugar un papel importante. Ese punto de colaboraci¨®n va a ser fundamental en un Gobierno Duque. Las relaciones entre EE?UU y Colombia mejorar¨ªan porque est¨¢n de alguna manera alineadas¡±.