Miles de personas exigen en Londres votar sobre los t¨¦rminos del Brexit

Decenas de miles personas se han manifestado este s¨¢bado por el centro de Londres en protesta contra el Brexit, demandando el derecho a votar sobre el acuerdo que finalmente se alcance con Bruselas, en el segundo aniversario del refer¨¦ndum. La manifestaci¨®n, llamada la Marcha de la Gente, ha terminado con una serie de discursos frente al Parlamento por parte de diputados proeuropeos ¡ªlaboristas, conservadores y liberal-dem¨®cratas¡ª?y activistas.

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La marcha, convocada por diversos grupos de campa?a, forma parte de una serie de movilizaciones durante el verano que buscan aumentar la presi¨®n a la primera ministra, Theresa May, y al l¨ªder de la oposici¨®n. ¡°?D¨®nde esta Jeremy Corbyn?¡±, coreaba la multitud, descontenta con la ausencia del l¨ªder laborista, quien mantiene un perfil bajo en el debate europeo, a pesar del llamativo desastre en que el Gobierno conservador, incapaz de consensuar siquiera una postura en su seno, est¨¢ convirtiendo las negociaciones de salida.

El atasco de las negociaciones, a apenas cuatro meses de que el acuerdo deba estar terminado, ha provocado en los ¨²ltimos d¨ªas numerosas cr¨ªticas p¨²blicas y reacciones por parte del mundo empresarial. A las advertencias de Airbus y BMW de que la incertidumbre les est¨¢ haciendo considerar su permanencia y sus inversiones en Reino Unido, se ha sumado este s¨¢bado el presidente de Siemens, que tambi¨¦n expres¨® su frustraci¨®n.

Nuevos an¨¢lisis econ¨®micos revelan que la decisi¨®n de abandonar la UE ya est¨¢ costando a la econom¨ªa brit¨¢nica 440 millones de libras (400 millones de euros) a la semana. Mientras tanto, el ministro de Exteriores, Boris Johnson, ha pedido una salida "completa" de la UE y ha asegurado, en un art¨ªculo publicado en el rotativo The Sun, que la poblaci¨®n no tolerar¨ªa una retirada "suave" de la Uni¨®n, sino que quiere romper con Bruselas.

El titular de Comercio Internacional, Liam Fox, ha insistido en que Reino Unido no va de farol cuando amenaza con abandonar las negociaciones renunciando a acuerdo alguno. Lo mismo ha advertido el ministro del Brexit, David Davis, en el tabloide Daily Express. "No queremos hacer eso, nunca lo quisimos. La mejor opci¨®n es salir con un buen acuerdo, pero tenemos que poder marcharnos de la mesa [de negociaci¨®n sin nada]", ha escrito Davis.

En un ambiente familiar y festivo, los manifestantes proeuropeos han partido desde la avenida Pall Mall en direcci¨®n a la plaza del Parlamento de Westminster. Los asistentes a la marcha han portado carteles con lemas como "Queremos tener la palabra sobre el Brexit", "A¨²n no nos hemos marchado", "Detener el Brexit" o "Tengo 16 a?os. El Brexit me rob¨® el futuro". El objetivo de esta cita ha sido pedir al Gobierno que conceda a los brit¨¢nicos la oportunidad de votar en una consulta acerca de si aceptan o no el acuerdo sobre el Brexit que alcance la primera ministra conservadora, Theresa May, con el bloque comunitario.

Casi 15 meses despu¨¦s de que May activase el art¨ªculo 50 del Tratado de Lisboa, que establece la cuenta atr¨¢s para la desconexi¨®n con la UE en un periodo de dos a?os, el Gobierno brit¨¢nico est¨¢ sumido en una profunda crisis interna entre los partidarios y los detractores del Brexit sobre el tipo de v¨ªnculo comercial que se quiere tener con la UE. Los primeros quieren una ruptura "dura", sin acceso al mercado ¨²nico y a la uni¨®n aduanera, y los segundos prefieren una salida "suave", estar m¨¢s cerca de la UE en materia comercial. En medio de esta profunda grieta y la debilidad de su Gobierno, que saca adelante las leyes con el apoyo de los diez diputados del probrit¨¢nico Partido Democr¨¢tico Unionista (DUP) de Irlanda del Norte, May busca la manera de contentar a ambos bandos, al tiempo que negocia un acuerdo favorable para su pa¨ªs y aceptable para Bruselas.