La justicia de EE UU investiga al clero de Pensilvania por los abusos sexuales a ni?os

El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha puesto en marcha una investigaci¨®n sobre los altos cargos de la Iglesia en Pensilvania despu¨¦s del demoledor informe que este verano desvel¨® siete d¨¦cadas de abusos sexuales perpetrados por al menos 301 sacerdotes contra m¨¢s de un millar de v¨ªctimas cuando estas eran menores de edad. Fiscales federales han emitido ya citaciones que afectan a siete de las ocho di¨®cesis del Estado reclamando documento y llamando a testificar a testigos, seg¨²n avanz¨® la agencia Associated Press y confirmaron, despu¨¦s, algunos de los cl¨¦rigos aludidos.

Las investigaciones sobre la pederastia a manos de curas se hab¨ªan circunscrito hasta ahora al ¨¢mbito estatal, pero el esc¨¢ndalo de Pensilvania ha dado lugar al que, seg¨²n los medios locales, se trata del primer proceso a cargo de las autoridades federales. Las di¨®cesis de Filadelfia, Erie, Harrisburg, Scranton, Pittsburgh, Greensburg y Allentown han recibido ¨®rdenes de comparecencia. "No es una sorpresa considerando la terrible mala conducta detallada en el informe del gran jurado", se?al¨® en un comunicado la di¨®cesis de Greensburg.

La bomba estall¨® el 14 de agosto. El fiscal general del Estado, Josh Shapiro, present¨®?un?informe de m¨¢s de un millar de p¨¢ginas en el que no solo se recog¨ªa episodios truculentos de abusos sobre un millar de ni?os, ocurridos a lo largo de 70 a?os, sino que describ¨ªa un patr¨®n com¨²n de complicidad y encubrimiento con los agresores por parte de las m¨¢s altas instancias de la Iglesia. En la rueda de prensa, Shapiro, estuvo rodeado de v¨ªctimas.?

Aquel documento, fruto de dos a?os de investigaci¨®n, se hizo p¨²blico semanas despu¨¦s de que el exarzobispo de Washington, Theodor McCarrick, de 88 a?os, renunciara como cardenal por las acusaciones de abusos a ni?os y seminaristas mayores de edad supuestamente ocurridos a lo largo de toda su carrera religiosa. La semana pasada tambi¨¦n cay¨® Donald Wuerl, arzobispo de Washington, presunto conocedor de las agresiones de McCarrick, y cuyo nombre aparec¨ªa en decenas de ocasiones en el informe de Pensilvania. El Papa acept¨® la renuncia de Wuerl, quien la hab¨ªa presentado en septiembre.