Rohan¨ª desaf¨ªa a EE UU y dice que Ir¨¢n va a seguir vendiendo petr¨®leo
El presidente iran¨ª tacha de "ilegales e injustas" las sanciones de Washington al crudo y la banca
¡°Vamos a seguir vendiendo nuestro petr¨®leo¡±, ha asegurado este lunes el presidente iran¨ª, Hasan Rohan¨ª, coincidiendo con la entrada en vigor de la ¨²ltima tanda de sanciones de EE UU. Las medidas, que Ir¨¢n considera ¡°ilegales e injustas¡±, afectan al crudo, la flota y la banca, as¨ª como a las entidades de otros pa¨ªses que intenten evadirlas. A pesar de las declaraciones desafiantes de los dirigentes de la Rep¨²blica Isl¨¢mica, el da?o a su econom¨ªa ya lleva meses castigando a los iran¨ªes de a pie. Est¨¢ por ver c¨®mo va a afectar al equilibro de poder interno. De momento, esta nueva vuelta de tuerca ha acabado con las esperanzas de apertura.
¡°Es una guerra econ¨®mica contra Ir¨¢n, pero est¨¢ por ver qui¨¦n va a ganarla. (¡) Estamos preparados para resistir cualquier presi¨®n¡±, ha manifestado Rohan¨ª en una reuni¨®n con los responsables del Ministerio de Econom¨ªa y Finanzas, de la que se han hecho amplio eco los medios iran¨ªes. El presidente, un conservador moderado que apost¨® por el acuerdo nuclear como v¨ªa de reintegrar a su pa¨ªs en la comunidad internacional, ha llegado a decir que ¡°va a hacerse realidad el eslogan de ¡®Muerte a Am¨¦rica¡±, que los ultras corean en las manifestaciones.
La segunda tanda de sanciones, que sigue a la anunciada el pasado agosto, culmina el restablecimiento de todas las restricciones a Ir¨¢n que EE UU levant¨® tras el pacto nuclear alcanzado en 2015. Pero el mero anuncio de las intenciones de Trump, ya ha reducido sus exportaciones de petr¨®leo en un mill¨®n de barriles diarios desde los 2,8 millones que alcanz¨® el pasado abril, y provocado la salida de las empresas extranjeras que empezaban a regresar a la Rep¨²blica Isl¨¢mica. Al mismo tiempo, el derrumbe del rial (la moneda iran¨ª), que ha perdido casi el 80% de su valor en el ¨²ltimo a?o, ha encarecido las importaciones, elevado la inflaci¨®n y empobrecido a los iran¨ªes, muchos de los cuales tienen dificultades para comprar alimentos b¨¢sicos.
El Gobierno de Rohan¨ª ha puesto en marcha algunas ayudas econ¨®micas para paliar esos efectos, pero si no puede vender petr¨®leo (fuente del 80% de los ingresos p¨²blicos) carecer¨¢ de fondos para ello. El objetivo de las sanciones es reducir a cero sus exportaciones. De ah¨ª que, a pesar de Washington ha dicho que no pretende el cambio de r¨¦gimen, algunos analistas opinen que busca aumentar el descontento social para poner contra las cuerdas al sistema isl¨¢mico. Por ahora, ha cerrado las puertas a una apertura hacia el exterior.
Rohan¨ª tambi¨¦n ha cuestionado el objetivo de Trump de que las sanciones fuercen a Ir¨¢n a renunciar a su programa de misiles y a inmiscuirse en los pa¨ªses vecinos como Siria, L¨ªbano o Yemen, donde respalda a fuerzas locales enfrentadas con los aliados ¨¢rabes de EE UU. ¡°Apoyamos a los pueblos de la regi¨®n con honor, mientras que EE UU se enorgullece de proteger a un r¨¦gimen que a diario mata a los palestinos bombarde¨¢ndolos, y a otro que a diario mata a los yemen¨ªes¡±, ha dicho en referencia a Israel y a Arabia Saud¨ª, respectivamente.
Reforzando la firmeza de las declaraciones oficiales, las fuerzas armadas iran¨ªes realizan durante el lunes y el martes ejercicios militares en el norte del pa¨ªs, mostrando sus capacidades defensivas. Las maniobras, ampliamente aireadas en la televisi¨®n estatal, constituyen sobre todo un mensaje para consumo interno, en un momento en que ante las dificultades se apela al sentimiento nacional.
La radicalidad de las medidas preocupa m¨¢s all¨¢ de Ir¨¢n porque el precio del petr¨®leo puede dispararse si logran sacar a Ir¨¢n del mercado, ya que hay dudas sobre la capacidad para cubrir su vac¨ªo. De momento, ese temor se ha frenado con las excepciones temporales que EE UU ha concedido a los principales importadores de crudo iran¨ª. ?
Otra preocupaci¨®n son los efectos humanitarios. Aunque las sanciones no impiden la venta de alimentos y medicinas, las medidas impuestas a la banca dificultan y encarecen ese comercio. Suiza ha revelado que mantiene conversaciones con Ir¨¢n y EE UU para lanzar un canal de pago que permita la compra de esos productos.
Mientras, la Uni¨®n Europea que, como el resto de los firmantes del acuerdo nuclear, se ha opuesto a la decisi¨®n estadounidense de abandonar el pacto y restablecer las sanciones, no ha logrado tener listo el mecanismo anunciado para facilitar los pagos desde Ir¨¢n debido a que ning¨²n pa¨ªs se ha ofrecido como sede.
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