Los inmigrantes que Polonia s¨ª quiere: 600.000 ucranios
La sexta econom¨ªa de la UE es el Estado comunitario que m¨¢s permisos de residencia concede a extranjeros. La gran mayor¨ªa a ciudadanos del pa¨ªs vecino que cruzan la frontera para trabajar
Yuri Khoma acaba su turno de botones a las tres de la tarde. Cuando sale del lujoso hotel en el que trabaja, la niebla y la oscuridad empiezan a devorar las c¨¦ntricas calles de Varsovia. Es viernes, y a este joven le gustar¨ªa salir a tomar unas cervezas con sus compa?eros de piso, pero ma?ana empieza a trabajar a las seis de la madrugada y sabe que debe cumplir. ¡°He tenido mucha suerte con este empleo y no quiero perderlo por nada del mundo. Para un ucranio es complicado encontrar un trabajo en Polonia de solo 40 horas a la semana¡±, cuenta.
Khoma, de 20 a?os, lleg¨® a la capital en 2015. No le qued¨® otra que ¡°salir cuanto antes¡± de Odessa, su ciudad, al sur del pa¨ªs, en la ribera del mar Negro. ¡°Aquel a?o estall¨® la guerra con los separatistas prorrusos en la zona oriental de Ucrania. Mis padres ten¨ªan mucho miedo de que me llamaran para alistarme al Ej¨¦rcito. Aunque no es obligatorio, la situaci¨®n era tan confusa que ellos me sacaron del pa¨ªs y me vine a estudiar aqu¨ª¡±.
Desde entonces, este joven compagina sus estudios de Log¨ªstica y Administraci¨®n en una universidad privada de Varsovia con su trabajo de botones. Como ¨¦l, cientos de miles de ucranios (casi un mill¨®n, seg¨²n datos del Banco Nacional polaco de 2017), residen en Polonia atra¨ªdos por las oportunidades laborales en un pa¨ªs en el que la tasa de desempleo no alcanza al 4% de la poblaci¨®n y con un crecimiento del PIB que roza el 5%.
La sexta econom¨ªa de la UE necesita mucha mano de obra para mantener la salud de su econom¨ªa, sobre todo en sectores como la construcci¨®n, los servicios y las nuevas tecnolog¨ªas. Tanta demanda de trabajo hizo que Polonia fuera el a?o pasado el pa¨ªs de la UE que m¨¢s permisos de residencia concedi¨® (683.000) a ciudadanos de terceros pa¨ªses, por encima de Alemania y Reino Unido, seg¨²n Eurostat. El 85,7% de los beneficiarios de las autorizaciones polacas fueron ucranios. Y su principal motivo para solicitar ese permiso fue el empleo.
El discurso antiinmigratorio del Gobierno choca con la alta demanda de mano de obra que necesita el pa¨ªs para mantener la salud de la econom¨ªa
La crisis de corrupci¨®n end¨¦mica que sufre Ucrania, su d¨¦bil econom¨ªa y la prolongaci¨®n del conflicto b¨¦lico en la regi¨®n del Donb¨¢s ha obligado a los ciudadanos a hacer las maletas. ¡°Polonia est¨¢ muy cerca, la cultura es parecida y es m¨¢s f¨¢cil conseguir una visa aqu¨ª que en Alemania¡±, explica Mar¨ªa Popko, una limpiadora del hogar de 54 a?os que lleva m¨¢s de dos d¨¦cadas trabajando en el pa¨ªs vecino. Esta mujer, natural de Le¨®polis, se traslad¨® a Polonia en 1995 como temporera. ¡°Me hac¨ªan contratos por tres meses en el campo. Luego volv¨ªa a mi pa¨ªs durante un tiempo y despu¨¦s regresaba de nuevo a Polonia¡±. Hasta que, viendo que la econom¨ªa no mejoraba en Ucrania, se instal¨® finalmente de ilegal en Varsovia. Despu¨¦s de un rosario de calamidades, en 2012 consigui¨® por fin legalizar su situaci¨®n.
Ahora limpia las casas de cuatro familias, trabaja dos veces a la semana como auxiliar de oficina y cuando llega a casa prepara por encargo pierogis, un plato t¨ªpico de la cocina polaca y ucraniana que muestra la afinidad cultural entre estos dos pa¨ªses que han compartido partes de su territorio en varios momentos hist¨®ricos. Las lenguas de estos dos pueblos eslavos son parecidas y todos son cristianos: los ucranios ortodoxos y los polacos cat¨®licos, lo que ayuda a su integraci¨®n.
Mar¨ªa Popko ha encontrado su sitio aqu¨ª, pero reconoce que en los ¨²ltimos a?os la actitud de los polacos hacia los ucranios est¨¢ cambiando. ¡°Esto nos da mucho miedo, hemos luchado mucho por hacernos un hueco. Cada vez son m¨¢s los que dicen que les estamos quitando el trabajo y eso es mentira, hay mucho trabajo, lo que no hay son polacos porque muchos emigraron tambi¨¦n a otros sitios de Europa¡±, defiende. Tradicionalmente, Polonia ha exportado mano de obra a otros pa¨ªses de la UE. Ahora la necesita.
"Dicen que les quitamos el trabajo. Mentira. Aqu¨ª hay mucho empleo, lo que no hay es polacos", dice Mar¨ªa Popko
El Gobierno nacionalista y conservador de Ley y Justicia (PiS), ha declarado p¨²blicamente en muchas ocasiones su aversi¨®n hacia los inmigrantes. Su rechazo, por ejemplo, a la pol¨ªtica de reparto de refugiados de la UE le vali¨® la apertura de un expediente sancionador de Bruselas. El discurso ultranacionalista ha ido calando en la sociedad durante estos tres a?os de liderazgo del PiS, a pesar de que Polonia (con unos 38 millones de habitantes) tiene alrededor de un 1% de poblaci¨®n extranjera (residiendo legalmente en el pa¨ªs).
¡°El discurso nacionalista tambi¨¦n ha hecho aflorar el resentimiento hist¨®rico de los polacos contra los ucranios por la matanza de Volinia durante la Segunda Guerra Mundial¡±, cuenta Myroslava Keryk, presidenta de Our Choice, principal organizaci¨®n ucrania en Polonia. Keryk se refiere a la masacre que cometieron los nacionalistas ucranios entre 1943 y 1945 y en la que, seg¨²n Varsovia, murieron unos 100.000 polacos.
¡°La hostilidad est¨¢ creciendo. De hecho, en 2017, las denuncias interpuestas por los ucranios residentes en Polonia aumentaron un 18% con respecto al a?o anterior¡±, a?ade Keryk. Llama la atenci¨®n que un Ejecutivo que ha abanderado la pol¨ªtica contra los extranjeros sea el pa¨ªs de la UE que m¨¢s permisos de residencia concede. ¡°Una cosa es la ideolog¨ªa y otra la realidad¡±, zanja Keryk.
¡°Es verdad, en algunas ocasiones los polacos nos hacen sentir como si fu¨¦ramos ciudadanos de segunda porque no entendemos bien su idioma o porque se sienten amenazados por el trabajo¡±, cuenta Anastasia Mychko, estudiante de Filolog¨ªa espa?ola, en la cafeter¨ªa de la universidad de Ciencias Sociales y Humanidades de Varsovia. El 69% de los polacos no quiere que en su pa¨ªs vivan m¨¢s personas con un color de piel diferente, seg¨²n revel¨® en 2013 un estudio del Centro de Investigaci¨®n sobre el Prejuicio de la Universidad de Varsovia. "Un ejemplo de c¨®mo nos tratan diferente: el d¨ªa de la independencia de Polonia ser¨¢ este domingo. Yo me quedar¨¦ en casa por la marcha de ultras de extrema derecha que habr¨¢ en Varsovia", dice Khiiam Sabet, tambi¨¦n universitaria ucrania.
A pesar de todo, su amiga, Anastasia Mychko, de 19 a?os, tiene claro que no quiere volver a Ucrania. Aunque no piensa quedarse en Polonia cuando acabe la carrera. ¡°Vine aqu¨ª porque era m¨¢s barato estudiar y porque la educaci¨®n en mi pa¨ªs es muy mala, pero luego me quiero ir a Alemania o Espa?a¡±.
Cada vez son m¨¢s los estudiantes ucranios que estudian en Polonia. En apenas dos a?os (desde 2014 a 2016), el n¨²mero de matriculados ucranios en las universidades p¨²blicas polacas ha aumentado casi un 50%. ¡°Ucrania ha perdido a toda una generaci¨®n de j¨®venes que est¨¢n dando lo mejor de s¨ª en un pa¨ªs extranjero¡±, lamenta Myroslava Keryk.
La contradicci¨®n polaca
En contraste con el discurso antiinmigratorio del Gobierno, cada vez son m¨¢s los extranjeros que se afincan en Polonia para buscar oportunidades laborales. En 2017, cerca de 13.000 permisos de trabajo se concedieron a ciudadanos nepal¨ªes, indios y banglades¨ªes. En un foro econ¨®mico en 2016, el entonces ministro de Econom¨ªa y hoy primer ministro del pa¨ªs, Mateusz Morawiecki, reconoc¨ªa que el mercado laboral polaco necesita inmigrantes para mantener su buena salud. ¡°La paradoja es inevitable: si Polonia quiere seguir por la v¨ªa del crecimiento, tiene que adaptarse a un mercado de trabajo multinacional. Quiz¨¢ esa necesidad y la presencia de estos empleados en nuestro pa¨ªs ayude poco a poco a cambiar la imagen de sociedad homog¨¦nea que se tiene de Polonia¡±, explica Anna Gorska, soci¨®loga del Instituto polaco de Estudios P¨²blicos.
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