Washington trata de separar la detenci¨®n de Meng de la relaci¨®n comercial con China
Trump intenta enviar un mensaje de calma tras la detenci¨®n en Canad¨¢ de la vicepresidenta del gigante de comunicaciones chino Huawei
¡°?Las conversaciones con China van muy bien!¡±, ha asegurado este viernes Donald Trump, en su habitual hilo de tuits matinales. Una escueta llamada a la calma, que trata de ocultar la realidad de que la detenci¨®n en Canad¨¢ de Meng Wanzhou, la vicepresidenta del gigante de comunicaciones chino Huawei que se enfrenta a su extradici¨®n a Estados Unidos, evidencia lo dif¨ªcil que ser¨¢ para el presidente resolver su enconado conflicto comercial con China. As¨ª lo entendieron los mercados, con severas ca¨ªdas el jueves que escenifican el miedo a que la tregua de 90 d¨ªas acordada entre Trump y Xi Jinping el pasado fin de semana en Buenos Aires se quede en agua de borrajas.
El director del Consejo Econ¨®mico Nacional de la Casa Blanca, Larry Kudlow, no cree que el episodio ¡°se desborde¡± a las negociaciones comerciales con China. Las dos cosas, ha dicho en una entrevista en la NBC, ¡°van por carriles separados¡±. Tambi¨¦n Peter Navarro, consejero comercial de Trump, ha asegurado en la CNN que la detenci¨®n y las negociaciones ¡°son dos eventos separados¡± y que su coincidencia en el tiempo fue una casualidad. Lo cierto es que la guerra emprendida por Trump contra China en materia comercial no est¨¢ dando los frutos previstos, ya que el d¨¦ficit comercial estadounidense escal¨® en octubre a su nivel m¨¢s alto en diez a?os.
Mientras Trump y Xi cenaban juntos el s¨¢bado por la noche en Buenos Aires, y celebraban lo que el estadounidense llam¨® una relaci¨®n ¡°especial¡± entre ambas potencias, la polic¨ªa canadiense, en cumplimiento de una solicitud de extradici¨®n a Estados Unidos, arrestaba a Meng Wanzhou durante un transbordo de vuelos en Vancouver. La justicia estadounidense investiga si Huawei, la compa?¨ªa que fund¨® el padre de Meng, viol¨® las sanciones impuestas por Estados Unidos contra Ir¨¢n.
Pero, con la detenci¨®n, la Administraci¨®n de Trump lanzaba tambi¨¦n una advertencia contra la expansi¨®n global de la tecnolog¨ªa china. El episodio, sospecha Pek¨ªn, podr¨ªa ocultar un intento de los sectores m¨¢s nacionalistas del Gobierno estadounidense de torpedear el acuerdo comercial entre ambos pa¨ªses. El hecho de que el presidente Trump acudiera a la cena con Xi sin conocer, aparentemente, la operaci¨®n en marcha para detener a Meng alimenta las suspicacias. Pero podr¨ªa indicar tambi¨¦n, adem¨¢s de una preocupante falta de coordinaci¨®n entre las diferentes partes de la administraci¨®n, que la operaci¨®n no est¨¢ relacionada con las conversaciones en las que est¨¢n inmersas Washington y Pek¨ªn para buscar una salida negociada a la guerra comercial.
A pesar de que la detenci¨®n de Meng se debe a la posible venta de tecnolog¨ªa a Ir¨¢n en violaci¨®n de las sanciones estadounidenses, el FBI lleva al menos ocho a?os investigando a la compa?¨ªa china por posibles amenazas a la seguridad nacional. Los investigadores sospechan que ejecutivos de la compa?¨ªa trabajaban de manera encubierta para el Gobierno chino.
El Departamento de Justicia, seg¨²n publica The New York Times, s¨ª inform¨® a la Casa Blanca. Pero la informaci¨®n no lleg¨® al presidente y el tema no se trat¨® en el encuentro con Xi. John Bolton, consejero de Seguridad Nacional, asegur¨® en televisi¨®n que ¨¦l s¨ª estaba al tanto de que iba a producirse la detenci¨®n, pero no aclar¨® si lo sab¨ªa antes de la cena. ¡°No informamos al presidente de cada una de estas notificaciones¡±, explic¨®. La coincidencia en el tiempo entre la detenci¨®n y la cena, seg¨²n fuentes citadas en la prensa estadounidense, pudo ser fruto de la casualidad y de los itinerarios de viaje de Meng.
La detenci¨®n indica que el Departamento de Justicia tiene una causa suficientemente s¨®lida contra Huawei. Si Meng fuera extraditada a Estados Unidos, los fiscales podr¨ªan tratar de demostrar los v¨ªnculos de la compa?¨ªa con agencias estatales chinas.
En Estados Unidos, los analistas esperan que China, a pesar de la contundente reacci¨®n inicial, trate de contener la escalada y evitar que provoque el fracaso de una soluci¨®n negociada a la guerra comercial entre las dos mayores econom¨ªas del mundo. Pero la operaci¨®n podr¨ªa aportar inercia a la campa?a de Washington para persuadir a las compa?¨ªas de pa¨ªses aliados de no adquirir tecnolog¨ªa del gigante chino.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
