Italia recorta el ¡°Presupuesto del pueblo¡± para contentar a Bruselas

Matteo Salvini lleg¨® tarde a Palazzo Chigi. Hab¨ªa parado por el camino en un restaurante japon¨¦s y se present¨® con la bandejita de sushi. Eran las nueve de la noche del domingo y la reuni¨®n, calentada sobremanera por las crecientes fricciones entre la Liga y el Movimiento 5 Estrellas (M5S), iba a ser larga. ¡°Es el momento m¨¢s importante desde las elecciones del 4 de marzo¡±, ha lanzado el viceprimer ministro y l¨ªder de los grillinos, Luigi Di Maio. Especialmente para su partido, en ca¨ªda libre en las ¨²ltimas semanas y?m¨¢s desprotegido electoralmente que su socio de Gobierno en la marcha atr¨¢s que estaban a punto de formalizar en el Presupuesto: una rebaja de cuatro d¨¦cimas del d¨¦ficit, previsto ahora en un 2,04%. Algo ya muy parecido al 1,9% que ped¨ªa Bruselas y que prometieron no aceptar hace dos meses asomados al balc¨®n del Palazzo Chigi.

El ¡°Presupuesto del pueblo¡±, la herramienta con la que el Gobierno populista de Italia piensa dar cabida a sus principales promesas electorales, empieza a diluirse. La presi¨®n de los mercados, el cabreo de los empresarios con la par¨¢lisis de las grandes inversiones en el norte de Italia y el atisbo de desaceleraci¨®n econ¨®mica (el PIB ha ca¨ªdo en el tercer trimestre un 0,1%, el primer descenso en cuatro a?os) han pesado en un cambio de rumbo que ninguno de los socios de Gobierno quiere asumir pol¨ªticamente.

Bruselas tiene todav¨ªa que pronunciarse. Pero, de momento, los t¨¦cnicos del Ministerio de Econom¨ªa y el propio titular del departamento, Giovanni Tria, llevan la muesca en el rev¨®lver. Acosados por los l¨ªderes pol¨ªticos cuando advirtieron de que en la Comisi¨®n Europea no comprar¨ªan los n¨²meros iniciales, han visto c¨®mo Salvini y Di Maio ol¨ªan el miedo y aceptaban tocar las partidas destinadas a sus propuestas estrella: la reforma de la ley de pensiones y la renta ciudadana. Una muestra m¨¢s, incluso en tiempos de ruido y furia, de que la pol¨ªtica italiana siempre es capaz de buscar una salida en el ¨²ltimo minuto.

Los mercados celebraron el cambio de ruta este lunes con una prima de riesgo por debajo de los 270 puntos (lleg¨® a 340 hace dos semanas). Pero Di Maio sigue consider¨¢ndolo una victoria del pueblo: ¡°Aqu¨ª no hay intereses de partido. Est¨¢n los sue?os de quien quiere cambiar Italia. Nosotros continuamos creyendo en esos sue?os¡±. Aunque tengan una medida m¨¢s realista. Entre otras cosas, se caen de las cuentas 4.000 millones de euros destinados a ambas propuestas (han pasado de 16.000 millones a 11.000). En el caso de la renta ciudadana, convertida en una suerte de subsidio por desempleo de car¨¢cter formativo (se pagar¨¢ hasta 780 euros a los desempleados a condici¨®n de que sigan cursos espec¨ªficos para los trabajos que se ofertan), se empezar¨¢ m¨¢s tarde su implantaci¨®n. Para la reforma de la ley de pensiones, que pretende adelantar la edad de jubilaci¨®n hasta los 62 a?os (en caso de haber cotizado 38) y pone los pelos de punta en Bruselas y en el INPS, el propio ¨®rgano que se encarga de pagarlas, se introducen modificaciones que reducir¨¢n de forma importante el n¨²mero de beneficiarios. Hay otras novedades: una ecotasa a los veh¨ªculos m¨¢s contaminantes (solo SUV y coches de lujo), un recorte a las conocidas como pensiones de oro (por encima de los 4.500 euros) o reducciones en el bono cultura.

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Los tiempos son limitados. La propuesta tiene que convertirse en ley antes del 31 de diciembre y el viernes deber¨ªa votarse en las C¨¢maras. Pero Bruselas todav¨ªa no se ha pronunciado ni hab¨ªa colocado la cuesti¨®n la tarde de este lunes en el orden del d¨ªa de la reuni¨®n de ma?ana. Fuentes del Gobierno italiano explicaron a este peri¨®dico que, tras los esfuerzos realizados en las ¨²ltimas semanas y el anuncio del aumento del d¨¦ficit p¨²blico por parte de Macron para contentar a los chalecos amarillos, ¡°ser¨ªa muy dif¨ªcil de explicar a los italianos un proceso sancionador¡±. ¡°El di¨¢logo siempre estar¨¢ abierto, pero esta propuesta deber¨ªa ser suficiente¡±. Salvini tambi¨¦n se refiri¨® a ello a su manera: "Espero que en Bruselas hay sentido com¨²n y no hijos e hijastros: a Italia le cuentan hasta los pelos de la nariz y a la Francia de Macron le dejan hacer lo que quiere. Espero que el partido est¨¦ cerrado".

En Palazzo Chigi hay buenas noticias. El primer ministro, Giuseppe Conte, ha salido notablemente reforzado de esta negociaci¨®n. El jefe del Gobierno, un abogado desconocido sin ning¨²n perfil pol¨ªtico, elegido para cumplir ¨®rdenes, ha pasado los primeros seis meses de Gobierno yendo de un despacho a otro para tratar de satisfacer a ambos viceprimeros ministros. Las conversaciones con Bruselas y el tono conciliador utilizado para evitar que el Gobierno saltase por los aires en varias ocasiones estos ¨²ltimos d¨ªas le han otorgado un relieve del que carec¨ªa. Su relaci¨®n con el presidente de la Rep¨²blica, Sergio Mattarella, ha mejorado notablemente y se deja aconsejar por el veterano mandatario, deslizan en su entorno. Ha sabido mantener unidos a los t¨¦cnicos del Ejecutivo y en Bruselas han encontrado un interlocutor alejado de los esl¨®ganes populistas de Salvini y Di Maio. Tanto, que algunas voces en el M5S se plantean la posibilidad de entregarle el mando real del Ejecutivo en caso de que Di Maio no logre mantener el barco a flote.

El M5S ha sufrido mucho en las ¨²ltimas semanas. Ha perdido siete puntos en las encuestas respecto a la Liga, que vuela ya con una estimaci¨®n de voto cercana a la de un Gobierno de mayor¨ªa e impone su criterio en las negociaciones. La formaci¨®n de Salvini va tan sobrada que el cerebro estrat¨¦gico del partido, el siempre contenido Giancarlo Giorgetti, incendi¨® la relaci¨®n entre ambos grupos el fin de semana y volvieron a dispararse las alarmas de una crisis de Gobierno. Ya no son solo rumores.