Conte: el ascenso del hombre discreto
La negociaci¨®n presupuestaria con la UE y su postura en la crisis migratoria permiten al discreto primer ministro italiano crecer y ganarse un papel relevante
Giuseppe Conte (Volturara Appula 1964) no adora la televisi¨®n. Poco habituado a los focos, est¨¢ convencido de que el lugar de un primer ministro no est¨¢ en un plat¨®, una anomal¨ªa en un pol¨ªtico italiano. Hace una semana, sin embargo, se plant¨® en Porta a Porta, el programa de mayor audiencia del legendario Bruno Vespa, y pidi¨® el bal¨®n. No era el guion previsto, pero c¨®modo, crecido por los ¨²ltimos ¨¦xitos en la negociaci¨®n del presupuesto con la Uni¨®n Europea, el hombre que la Liga y el Movimiento 5 Estrellas (M5S) eligieron como guard¨¦s del acuerdo de gobierno, decidi¨® probarse. En pleno prime time, desafi¨® a Matteo Salvini en el tema migratorio: ¡°Si no permite los desembarcos, les ir¨¦ a buscar en mi avi¨®n¡±, lanz¨® en referencia al cierre de puertos impuesto por el ministro del Interior, que perdi¨® ese d¨ªa la batalla en un tema crucial para su electorado. Conte habl¨® por primera vez de l¨ªmites morales, devolvi¨® la dignidad al gobierno y el M5S, tocado en los sondeos ante las embestidas de la Liga, recuper¨® el relieve pol¨ªtico. En realidad, todo empez¨® unas semanas antes.
Nacido en una familia humilde de la Apulia, Conte es el primer presidente del Consejo de Ministros procedente del sur de Italia en 30 a?os (desde Ciriaco De Mita). ¡°Tiene el orgullo de quienes hemos salido adelante con mucho esfuerzo¡±, apunta una persona de su entorno. Ejerci¨® discretamente como abogado en Roma y fue profesor universitario en Florencia. Ligado a cierta jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica -coincidi¨® con el actual secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, en la residencia universitaria romana Villa Nazareth-, era completamente ajeno a los salones de poder romanos. Votante de izquierdas, nunca milit¨® en el M5S ni perteneci¨® a sus c¨ªrculos fundacionales. Lleg¨® del brazo del actual ministro de Justicia, Alfonso Bonafede, y sali¨® del anonimato cuando Luigi Di Maio, candidato entonces, le incluy¨® en la lista de futuros ministros. Seg¨²n aquel plan, con suerte ser¨ªa el titular de Administraciones P¨²blicas. Pero una accidentada negociaci¨®n y la necesidad de encontrar una figura neutra para guiar las corrientes el¨¦ctricas contrapuestas de dos partidos como la Liga y el M5S lo propulsaron en primer ministro el pasado 1 de junio.
Los primeros meses de gobierno, bajo la sombra de haber hinchado su curr¨ªculum y en los que apenas logr¨® hacer o¨ªr su voz entre la de los dos vicepresidentes, le granjearon una imagen de hombre de paja. Conte, el 66? primer ministro de Italia de los ¨²ltimos 73 a?os, tuvo que interpretar hasta diciembre una partitura ajena sin la cuota de poder pol¨ªtico en el partido necesaria para imponer su criterio. ¡°Hubo un momento en que se plant¨®. Si le han pedido que sea primer ministro, ha decidido que lo har¨¢ a su manera. Tiene el car¨¢cter¡±, se?ala un pol¨ªtico que lo conoce bien. La negociaci¨®n de los presupuestos con la UE, en la que logr¨® evitar un procedimiento sancionador pese a quebrantar las reglas europeas (el exceso de d¨¦ficit franc¨¦s tambi¨¦n ayud¨®), precipit¨® el cambio de guion. El conflicto le permiti¨® mediar con Bruselas, el Palacio del Quirinal y con sus dos ¡°sponsors pol¨ªticos¡±, como se?ala el polit¨®logo Roberto D¡¯Alimonte, gradu¨¢ndose como primer ministro. ¡°Es una persona inteligente. Su nuevo relieve est¨¢ ligado a los conflictos entre Liga y M5S. Cuando estaban en todo de acuerdo, su papel era de notario. Ahora que crecen las diferencias, ¨¦l ha empezado a asumir un papel de mediador, pero siempre de forma neutral. Est¨¢ muy pendiente de no enemistarse con ninguno de los dos¡±, se?ala.
Conte, impulsado por un buen equipo de comunicaci¨®n, es una isla en el ruidoso escenario pol¨ªtico italiano. Junto a los ministros de Econom¨ªa, Giovanni Tria, y el de Exteriores, Enzo Moavero, es el elemento de moderaci¨®n que aporta sosiego en el momento de mayor tensi¨®n entre el M5S y la Liga. Nada de histrionismos, siempre elegante en las formas, ni un solo selfie para la parroquia. Los empresarios, generalmente m¨¢s inclinados a la Liga que al M5S, ven en ¨¦l a un buen interlocutor. Su buena sinton¨ªa con el presidente de la Rep¨²blica, Sergio Mattarella, es un s¨ªntoma claro de su crecimiento como hombre de estado. ¡°Con el tiempo la relaci¨®n se ha consolidado. Han tenido m¨¢s contacto porque todos los decretos pasan por el presidente, as¨ª que ha habido una estrecha colaboraci¨®n¡±, se?alan fuentes cercanas a Mattarella. ¡°El hecho de que los dos sean juristas y profesores de derecho [Conte lo es de derecho privado y Mattarella de p¨²blico] les permite hablar un lenguaje com¨²n. Por su formaci¨®n, Conte no solo est¨¢ atento a la propaganda, sino a los aspectos jur¨ªdicos y legislativos de todas las cuestiones, es un hombre de reglas y eso, para un jefe de Estado es b¨¢sico. Comparten ese lenguaje¡±.
Un primer ministro que gusta
El primer ministro tambi¨¦n ha convencido a los italianos. Seg¨²n el ¨²ltimo sondeo Ipsos para Corriere della Sera, el 62% tiene una opini¨®n favorable sobre el primer ministro. Cuatro puntos por encima del consenso que obtiene el Gobierno y m¨¢s alto tambi¨¦n que el de Salvini (53%) o el propio Luigi Di Maio (43%), l¨ªder del M5S. Un dato que algunos empiezan a interpretar en clave electoral y que podr¨ªa levantar suspicacias en el propio gobierno. Si hubiera elecciones pr¨®ximamente, ?por qu¨¦ no presentar al propio Conte en detrimento de los hombres del aparato? Fuentes de su equipo, se?alan que esa posibilidad no entra dentro de los planes de sus planes. ¡°Tiene solo una vocaci¨®n de servicio y de contribuci¨®n al M5S¡±, se?alan. Pero el poder, que se lo digan a su predecesor en el cargo, Paolo Gentiloni, transforma y despierta nuevos instintos. Por muy escondidos que se encuentren.
El horizonte de las elecciones europeas marcar¨¢ el equilibrio entre ambos partidos y el crecimiento del primer ministro. Italia devora a uno de su especie cada 14 meses desde hace 73 a?os, y las costuras del acuerdo entre la Liga y el M5S aprietan cada vez m¨¢s a ambas formaciones. La cuesti¨®n ahora es hasta d¨®nde permitir¨¢ crecer a Conte esa esperanza de vida media.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.