Trump recurre por primera vez al veto para salvar su pol¨¦mica emergencia nacional

Como hab¨ªa anunciado desde antes incluso de la aparatosa rebeli¨®n que sufri¨® el jueves en el Senado, el presidente Donald Trump ha recurrido a su derecho de veto sobre la legislaci¨®n del Congreso, por primera vez en sus dos a?os de mandato, para mantener viva su declaraci¨®n de emergencia nacional en la frontera sur, que le permitir¨ªa burlar la divisi¨®n de poderes y obtener fondos para levantar su muro con M¨¦xico. As¨ª, el hist¨®rico voto de ayer, en el que casi una cuarta parte de los senadores republicanos que conforman la mayor¨ªa en la C¨¢mara alta (12 de 53) se aline¨® con los dem¨®cratas, queda convertido en un rev¨¦s pol¨ªtico m¨¢s que en un obst¨¢culo sustantivo en los planes de Trump.

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Los n¨²meros de ayer no son suficientes para revocar un veto presidencial, que requerir¨ªa mayor¨ªas de dos tercios en ambas c¨¢maras. Pero es la primera vez que el Congreso vota por bloquear una iniciativa presidencial en uno de los asuntos centrales de su pol¨ªtica, el muro fronterizo, pilar esencial sobre el que se levanta el trumpismo. Y la primera verdadera se?al de que el presidente, que ha actuado pr¨¢cticamente libre de control por parte del Congreso durante la primera mitad de su mandato, deber¨¢ cuidar m¨¢s sus pasos en esta nueva realidad pol¨ªtica, marcada por una mayor¨ªa dem¨®crata en la C¨¢mara baja dispuesta a poner a prueba a los senadores republicanos m¨¢s moderados en cada ocasi¨®n en que Trump se extralimite.

"Hoy veto esta resoluci¨®n. El Congreso tiene la libertad de aprobar esta resoluci¨®n y yo tengo el deber de vetarla", ha dicho el presidente en el Despacho Oval, a las cuatro de la tarde (hora de Washington), rodeado por el vicepresidente, miembros de su Gabinete, agentes de seguridad y padres de ni?os asesinados por inmigrantes irregulares.

El peso de la lucha contra la declaraci¨®n de emergencia de Trump, controvertido mecanismo al que recurri¨® el 15 de febrero para poder financiar su muro sin el concurso del Congreso, que se niega a aprobar los miles de millones que pide para hacerlo, se traslada ahora a los tribunales. El rechazo en ambas c¨¢maras llenar¨¢ de viento las velas de las demandas judiciales contra una declaraci¨®n de emergencia que, para los cr¨ªticos, constituye una violaci¨®n flagrante del principio de separaci¨®n de poderes consagrado en la Constituci¨®n. El pasado 18 de febrero, una coalici¨®n de 16 Estados liderados por California y Nueva York registr¨® en un tribunal federal de San Francisco una demanda para tratar de frenar la medida.

La declaraci¨®n de emergencia se mantiene, pues, en efecto. Pero la lucha en los tribunales, que retrasa aspectos de su implementaci¨®n, puede ser larga. Y los congresistas dem¨®cratas ya han se?alado que su batalla no acaba aqu¨ª: que seguir¨¢n forzando votaciones en el Congreso para tratar de tumbar la declaraci¨®n de emergencia, algo que interpretan que la ley les permite hacer cada cierto tiempo.

El veto de Trump no ha sido, ni mucho menos, una sorpresa. Llevaba amenazando con ello desde el mi¨¦rcoles. Minutos despu¨¦s de conocerse el resultado de la votaci¨®n del jueves, lanz¨® un escueto e inequ¨ªvoco tuit: "?VETO!". Media hora despu¨¦s, desarrollaba la idea en otro mensaje en la misma red social: "Estoy ansioso por VETAR la reci¨¦n aprobada resoluci¨®n inspirada por los dem¨®cratas que ABRIR?A LAS FRONTERAS e incrementar¨ªa el crimen, las drogas y el mercado negro en nuestro pa¨ªs. ?Agradezco a todos los republicanos fuertes que han votado por apoyar la seguridad fronteriza y el MURO que necesitamos desesperadamente!".

Trump reclama miles de millones de d¨®lares para construir un muro en la frontera con M¨¦xico, su principal promesa electoral y la machacona consigna que corean en sus m¨ªtines sus seguidores. El Congreso, de mayor¨ªa dem¨®crata en la C¨¢mara baja tras las legislativas de noviembre, se neg¨® a aprobar ese gasto para una medida que muchos consideran, cuando menos, ineficiente y cara. El desacuerdo llev¨® a un cierre parcial de la Administraci¨®n durante 35 d¨ªas, el m¨¢s largo de la historia del pa¨ªs. Trump recul¨®, pero despu¨¦s firm¨® una declaraci¨®n de emergencia nacional para poder desviar dinero de otros programas federales, esquivando al Congreso, y as¨ª levantar el muro que dice necesario para frenar un supuesto flujo incontrolado de inmigrantes ilegales, drogas y criminales.

La realidad es que el n¨²mero de inmigrantes ilegales detenidos en la frontera est¨¢ en sus niveles m¨¢s bajos en cuatro d¨¦cadas. Lo que s¨ª hay es una saturaci¨®n en los centros de detenci¨®n fronterizos, a la que han contribuido algunas pol¨ªticas de la Administraci¨®n Trump que complican las solicitudes de asilo: sucede que el perfil t¨ªpico de los inmigrantes que cruzan la frontera ha pasado de individuos solos procedentes de M¨¦xico a familias enteras de origen centroamericano que solicitan asilo. Los ¨ªndices de criminalidad de los inmigrantes irregulares no son mayores que los de los nacionales. Y respecto al tr¨¢fico de drogas, la inmensa mayor¨ªa de los estupefacientes ilegales entra al pa¨ªs oculta por los puestos de control fronterizos o mediante otros mecanismos, como t¨²neles excavados entre M¨¦xico y Estados Unidos. De poco servir¨ªa el muro de Trump para impedirlo.