La UE cree que los ciudadanos ignoran lo que acarrear¨ªa un Brexit duro

Todo est¨¢ listo para un Brexit sin acuerdo. La Comisi¨®n Europea ten¨ªa tanta prisa por anunciar que el club comunitario est¨¢ capacitado para afrontar el abismo que el 25 de marzo ya dio por terminados los preparativos aunque, en realidad, todav¨ªa faltaban dos de las normas m¨¢s importantes (la relativa a exenci¨®n de visados y el acuerdo sobre el presupuesto de 2019 posterior al Brexit). Pero a medida que se acerca el precipicio, fijado ahora en el 12 de abril, las dudas sobre la resistencia de los amortiguadores previstos van en aumento y en muchos sectores crece el temor a una sacudida devastadora.

La Uni¨®n Europea ha aprobado en tiempo r¨¦cord 19 propuestas legislativas que establecen per¨ªodos transitorios para casi todas las actividades y garantizan el mantenimiento de ciertos derechos, siempre y cuando se produzca reciprocidad por parte del Reino Unido. Aun as¨ª, Bruselas insiste en que se trata de medidas de car¨¢cter temporal y que en ning¨²n caso ofrecen el mismo nivel de fluidez y protecci¨®n que el ofrecido por el acuerdo de salida, que mantendr¨ªa el statu quo al menos hasta el 1 de enero de 2021.

Si la salida se produce sin acuerdo, una posibilidad que las dos partes rechazan y temen por igual, las consecuencias ser¨¢n inmediatas porque de la noche del 12 al 13 de abril el Reino Unido pasar¨ªa a ser un pa¨ªs tercero.

Autorizaci¨®n para quedarse en Reino Unido. Tras un Brexit sin acuerdo, los ciudadanos europeos que deseen permanecer en el Reino Unido m¨¢s de tres meses deber¨¢n pedir permiso a las autoridades brit¨¢nicas. A quienes ya se encuentren viviendo o trabajando en el territorio del pa¨ªs, Londres se ha comprometido a respetar sus derechos. Pero dispondr¨¢n de menos tiempo para regularizar su nueva situaci¨®n: hasta el 31 de diciembre del a?o que viene, y no hasta junio de 2021, como prev¨¦ el acuerdo. Se restringen tambi¨¦n las posibilidades de impugnar una denegaci¨®n del derecho de residencia. Y las posibilidades de reagrupamiento familiar ya no ser¨ªan temporalmente ilimitadas.

?Qu¨¦ pasa con los Erasmus? Para los estudiantes con becas Erasmus, Bruselas desea que se completen las becas y se reconozcan los cr¨¦ditos a quienes se encuentren en centros universitarios brit¨¢nicos antes de la ruptura. Se calcula que a finales de marzo hab¨ªa unos 14.000 estudiantes europeos en Reino Unido (y 7.000 brit¨¢nicos en el continente). Pero quienes lleguen tras la salida de Reino Unido del club comunitario ya no tendr¨¢n garantizada ni la remuneraci¨®n ni el reconocimiento de estudios.

Colas en el canal de la Mancha. El impacto ser¨¢ muy considerable en el sector del transporte de mercanc¨ªas. ¡°Habr¨¢ grandes perturbaciones y colas en el t¨²nel del canal de la Mancha¡±, avis¨® esta semana Pierre Moscovici, comisario europeo de Econom¨ªa, Fiscalidad y Aduanas. Moscovici record¨® que solo por el paso de Dover a Calais transitan cada d¨ªa m¨¢s de 11.000 camiones, es decir, cuatro millones al a?o.

El control de mercanc¨ªas ser¨¢ inevitable. Y aunque el chequeo no afectar¨¢ al 100% de los veh¨ªculos, Moscovici advierte que ¡°es mejor un control riguroso, aunque sea a costa de provocar filas de camiones, que exponernos a una crisis sanitaria o al tr¨¢fico ilegal¡±.

Refuerzo en las plantillas aduaneras. Los pa¨ªses m¨¢s afectados est¨¢n ampliando las plantillas de los puestos de aduana. Alemania y Holanda, donde se encuentran los puertos de Hamburgo y R¨®terdam, con m¨¢s de 900 efectivos adicionales cada uno. Francia, m¨¢s de 700. B¨¦lgica, que cuenta con el puerto de Amberes y el de Zeebrugge, casi 400. Y otros tantos en Irlanda.

Moscovici alab¨® ¡°el trabajo colosal de los servicios de aduanas, que se ha llevado a cabo en tiempo r¨¦cord y en medio de una incertidumbre total¡±. Pero la impresi¨®n sobre el terreno no es tan entusiasta. A mediados de marzo, los aduaneros franceses ya provocaron numerosos retrasos en los servicos ferroviarios hacia Reino Unido con una huelga de celo para exigir complementos salariales y m¨¢s recursos humanos.

La peor parte, para Reino Unido. Bruselas insiste en que en todos los terrenos el impacto de la salida sin acuerdo ser¨¢ mucho m¨¢s devastador en Reino Unido que en la Uni¨®n Europea. Pero el panorama que dibuja a cinco d¨ªas del temible abismo no deja de evocar en cierto modo el apocalipsis b¨ªblico: ¡°Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profec¨ªa, y guardan las cosas en ellas escritas, porque el tiempo est¨¢ cerca¡±.