Una huelga contra Macri suma tensi¨®n social a la crisis econ¨®mica en Argentina
Sindicatos disidentes paralizan la Administraci¨®n p¨²blica y parte del transporte en un nuevo pulso con el Gobierno


La situaci¨®n econ¨®mica argentina ya no puede desligarse, a seis meses de las elecciones presidenciales, de la situaci¨®n pol¨ªtica. El pa¨ªs vivi¨® el martes una huelga muy desigual, que afect¨® b¨¢sicamente al transporte y a la ciudad de Buenos Aires. El paro tuvo como referencia al l¨ªder sindical Hugo Moyano, disidente de la hist¨®rica Confederaci¨®n General del Trabajo (que no secund¨® la medida) y figura se?era del peronismo m¨¢s vinculado a Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner. El gobierno acus¨® a Moyano de querer "crear un caos" con objetivos pol¨ªticos y present¨® una demanda penal contra los convocantes de la huelga.
Hugo Moyano, un hombre poderoso (es tambi¨¦n presidente del club de f¨²tbol Independiente de Avellaneda) y muy pol¨¦mico, plante¨® el paro como un movimiento estrat¨¦gico: su objetivo es empujar a la CGT hacia una huelga general masiva en los pr¨®ximos meses, con el fin de acorralar al gobierno. La idea no consiste tanto en forzar un cambio en la pol¨ªtica econ¨®mica como en debilitar a Mauricio Macri para conseguir una victoria electoral del peronismo en octubre y noviembre.
El seguimiento de la huelga fue grande en los transportes (no hubo vuelos nacionales ni internacionales, no funcionaron ni el metro de Buenos Aires ni el ferrocarril Sarmiento y 75 l¨ªneas de autobuses quedaron sin apenas servicio), en la administraci¨®n p¨²blica (la Asociaci¨®n de Trabajadores del Estado, con casi 300.000 afiliados, secund¨® la protesta) y en la ense?anza, en especial la p¨²blica. En la CGT se debate sobre una posible huelga masiva en el futuro, pero no parece haber entusiasmo por la idea.
Cae la actividad econ¨®mica
En coincidencia con la huelga contra el Gobierno, el INDEC difundi¨® este martes los datos del Estimador Mensual de la Actividad Econ¨®mica (EMAE)?de febrero. El EMAE es un estimador mensual que anticipa en forma provisoria el comportamiento del PIB, cuyos informes son trimestrales.
Las cifras no son alentadores. Seg¨²n el INDEC, la actividad econ¨®mica argentina cay¨® 4,8% en febrero en t¨¦rminos interanuales, afectada por el mal desempe?o de la industria y el derrumbe del consumo. El porcentaje crece hasta el 5,3% cuando se compara el primer bimestre de este a?o con el de 2018.
La situaci¨®n econ¨®mica justifica las protestas. Los salarios pierden poder adquisitivo por la inflaci¨®n, la recesi¨®n cierra empresas y uno de cada cuatro argentinos vive en la pobreza, es decir, con menos de cuatro d¨®lares diarios y con graves carencias sanitarias y de vivienda. Pero la situaci¨®n tambi¨¦n justifica la prudencia: la crisis es grave y las medidas de fuerza podr¨ªan empeorarla, incluso causar un colapso. El presidente Mauricio Macri insisti¨® en que sus pol¨ªticas eran las ¨²nicas v¨¢lidas: "Ser¨ªa muy f¨¢cil dar un giro hacia atr¨¢s y tomar los recursos que tenemos y gastarlos", dijo, "pero los argentinos hemos decidido no volver atr¨¢s".
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, acus¨® a los convocantes de usar m¨¦todos "violentos y gangsteriles" para obligar a los trabajadores a secundar la huelga. Su ministerio present¨® una demanda penal ante el Juzgado Federal n¨²mero 2 de Mor¨®n contra Hugo Moyano, Sergio Palazzo (de la Asociaci¨®n Bancaria) y otros sindicalistas con el objetivo de que pagaran los costes del operativo policial y los da?os causados por los piquetes. Al menos 12 miembros de piquetes fueron detenidos con armas de fuego, cuchillos y bidones de gasolina, y tambi¨¦n se detuvo a otras 20 personas por actos de vandalismo en la calle, seg¨²n la polic¨ªa. Varios autobuses fueron incendiados y la fachada del banco JPMorgan en Buenos Aires qued¨® cubierta de pintura tras un escrache.
El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, afirm¨® que Moyano y sus aliados quisieron "demostrar su poder con la fuerza". "Intentan amenazar, amedrentar y generar violencia. Esto", dijo por la ma?ana, "no es un paro general, es un paro de un grupo de sindicatos al que la gente no se ha adherido. Van a hacer lo imposible para que la gente se sume a trav¨¦s de la violencia y generando miedo".
Pablo Moyano, hijo de Hugo Moyano y secretario general adjunto del Sindicato de Ch¨®feres de Camiones, responsabiliz¨® al gobierno de "cualquier acto de violencia" y lament¨® que se atribuyera la huelga a su familia: "Personificar una medida de fuerza en los Moyano cuando convocan m¨¢s de 70 centrales sindicales... Est¨¢n encerrados en su propia soberbia y hacen lo que les dice el FMI", declar¨®, en referencia al gobierno, a El Destape Radio. En la misma emisora, el l¨ªder de la CTA (Central de Trabajadores de Argentina) aut¨®noma, Pablo Micheli, dijo que habr¨ªa protestas "hasta el ¨²ltimo d¨ªa del mandato de Macri" y vincul¨® directamente la huelga con el kirchnerismo: "Si abandonamos la calle se pone en duda el triunfo del frente popular que encabezar¨¢ Cristina en las elecciones, tenemos que ayudarla". La expresidenta Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner no ha anunciado a¨²n su candidatura.
A mediod¨ªa, miles de personas empezaron a marchar por la Avenida de Mayo bonaerense hacia la Casa Rosada. La ma?ana fue muy complicada para quienes quisieron desplazarse al trabajo con veh¨ªculo privado, debido a los cortes de calles en el centro y del puente La Noria, al sur de la ciudad. La polic¨ªa logr¨®, sin embargo, mantener despejados los principales accesos urbanos y la Panamericana, donde unos piquetes intentaron montar barricadas.
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