Espa?a vuelve a la primera fila con Borrell como nuevo jefe de la diplomacia europea
S¨¢nchez no logra impulsar a un socialdem¨®crata a la presidencia de la Comisi¨®n, pero obtiene el puesto de alto representante
Diez a?os despu¨¦s de haber dejado la primera l¨ªnea de las instituciones europeas, Espa?a vuelve a ocupar uno de los grandes puestos institucionales de la UE. El ministro de Exteriores en funciones, Josep Borrell, se convertir¨¢ en noviembre en el nuevo jefe de la diplomacia comunitaria, uno de los cinco cargos en liza, aunque tambi¨¦n el de menos competencias. Es, precisamente, el mismo que desempe?¨® Javier Solana entre 1999 y 2009. ¡°Espa?a ha vuelto¡±, celebr¨® este martes el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez. El lado m¨¢s amargo de esa victoria es que Espa?a ¡ªy toda la familia socialdem¨®crata, en nombre de la que negociaba S¨¢nchez¡ª ha perdido la opci¨®n de sentar a un socialista al frente de la Comisi¨®n Europea, el ¨®rgano clave del poder comunitario.
Espa?a afrontaba esta negociaci¨®n con dos intereses claros, pero incompatibles entre s¨ª. La principal ambici¨®n era impulsar el primer cambio pol¨ªtico en 15 a?os en la c¨²pula de la Comisi¨®n Europea. Y eso pasaba por situar a un socialdem¨®crata al frente del centro de poder m¨¢s visible en las instituciones europeas. Al mismo tiempo, Pedro S¨¢nchez aspiraba a colocar a un espa?ol entre los cinco grandes puestos de la UE. Pero el candidato natural a esa plaza, Josep Borrell, era incompatible con Timmermans porque los necesarios equilibrios de la UE obligan a buscar diversidad. Y dos hombres socialdem¨®cratas trastocaban esos equilibrios. Finalmente gan¨® la baza de situar a un espa?ol como alto representante para la Pol¨ªtica Exterior de la UE.
¡°Espa?a ha vuelto. Hemos propiciado la llegada de una persona acreditada, y con experiencia, al frente de un puesto vital para la pol¨ªtica exterior y de defensa com¨²n¡±, enfatiz¨® S¨¢nchez en la conferencia de prensa posterior a la prolongada cumbre europea. Para darle realce al puesto, S¨¢nchez resalt¨® que las competencias actuales, que suponen una jefatura de la diplomacia europea y una cierta coordinaci¨®n de pol¨ªticas de defensa, van a crecer. En adelante se encargar¨¢ tambi¨¦n de la ayuda humanitaria y de la dimensi¨®n exterior de la pol¨ªtica migratoria, clave para Espa?a.
En realidad, la cartera que actualmente dirige Federica Mogherini ya supervisa, de alguna manera, las pol¨ªticas de ayuda humanitaria y de desarrollo. Tambi¨¦n coordina la faceta externa de la migraci¨®n: los acuerdos suscritos con los pa¨ªses de origen y de tr¨¢nsito de esos flujos para contener las salidas y propiciar el desarrollo de esas regiones. S¨¢nchez cit¨® expresamente las pol¨ªticas africanas, hoy dispersas en diferentes carteras de la UE, como nueva competencia y quiso ilustrar sobre la relevancia del puesto con dos datos: 14.000 millones de euros anuales de presupuesto ¡ªsi prosperan las propuestas para el pr¨®ximo presupuesto europeo¡ª y 4.000 trabajadores a su cargo.
El puesto de alto representante existe, con su estructura actual, desde 2011 con la pretensi¨®n de convertirse en el instrumento de gesti¨®n de las relaciones exteriores del bloque comunitario. Anteriormente (cuando lo ocup¨® Solana) ten¨ªa menos tareas asignadas y carec¨ªa de la estructura con la que cuenta ahora el servicio diplom¨¢tico. Pero la pr¨¢ctica ha demostrado que su capacidad de acci¨®n es limitada ante los grandes retos. Aunque ha propiciado hitos como la firma del acuerdo nuclear con Ir¨¢n (de la mano de Estados Unidos, que ahora lo ha dinamitado) o la aplicaci¨®n de sanciones econ¨®micas a Rusia tras la anexi¨®n de Crimea, su papel ha sido muy escaso en otras crisis, como la guerra de Siria. Espa?a conf¨ªa en que el aumento simb¨®lico de competencias y el perfil de Borrell contribuyan a darle peso.
Negociador socialista
S¨¢nchez jug¨® hasta el final para lograr la principal pieza. Como negociador de la familia socialdem¨®crata europea ¡ªjunto con el portugu¨¦s Ant¨®nio Costa¡ª, empuj¨® para aupar a Timmermans y casi roz¨® la victoria con los dedos cuando el esquema de un socialdem¨®crata al frente de la Comisi¨®n parec¨ªa hecho. Algunas fuentes europeas alaban su capacidad t¨¢ctica y reconocen que ha desplegado todas sus habilidades en m¨²ltiples contactos con los principales l¨ªderes. No bast¨® para lograr el sill¨®n m¨¢s preciado.
S¨¢nchez rechaz¨® que se trate de un fracaso. ¡°Los socialdem¨®cratas tenemos la misma representaci¨®n que hace cinco a?os, pero con menos pa¨ªses con Gobiernos socialistas y no tan importantes¡±, argument¨®. Y record¨® que en el ¨²ltimo reparto de puestos, con Mariano Rajoy en el Ejecutivo y mayor¨ªa absoluta del Partido Popular, no logr¨® ning¨²n puesto para un espa?ol. Por ¨²ltimo, la familia liberal tiene hoy m¨¢s representaci¨®n que la socialdem¨®crata en los Ejecutivos europeos.
Agotada la v¨ªa de la presidencia socialdem¨®crata, el presidente trat¨® de garantizar un buen puesto para Borrell, padre de dos hijos, porque entend¨ªa que era el candidato m¨¢s cualificado. El veterano pol¨ªtico presidi¨® el Parlamento Europeo entre 2004 y 2007, ha sido ministro de Exteriores con S¨¢nchez y ganador de las pasadas elecciones europeas por el PSOE. Si los tiempos se ajustan a lo previsto, a partir de noviembre se sentar¨¢ en el colegio de comisarios europeos, como vicepresidente de la Comisi¨®n, y tambi¨¦n en el Consejo Europeo, donde negocian los jefes de Estado y de Gobierno.
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